A mí me ha sucedido muchas veces
ir caminando y encontrarme
de pronto una palabra que había dicho
hace tantos amores a estas horas,
hace tantos latidos y amarguras,
cuando la adolescencia. Ella tenía
aproximadamente dieciocho
años, y unos cabellos que las brisas
adoraban, diciéndole al oído:
Nunca los tuve iguales entre mis dedos.
(...)
A merced de las horas, sin derecho
más que a un poco de aire, de hermosura,
nacemos, y es bastante. A veces sobra.
Todo en fin es amor. Me ha sucedido
encontrarme a menudo que no peso,
que esto que llaman por llamar no tiene
más que un nombre, querencia. Va a lo alto
inevitablemente. Va a lo alto
como el chopo y el bien. Sigue a lo alto.
(José Antonio Muñoz Rojas: Canciones, 1933-1940)
Ayer murió en Antequera José Antonio Muñoz Rojas, poeta.
Cada vez la línea delante de nosotros es más delgada. Que la tierra les sea leve.