jueves, 28 de abril de 2016

El verdadero significado de Noches lúgubres de Cadalso (amistad y filantropía) y noticias de nuestras lecturas.


Nadie es infeliz si puede hacer a otro dichoso, le dice Tediato a Lorenzo. Lo que parecía una relación desigual se ha trasformado en solo dos noches en amistad. Lo penoso de la situación de ambos les ha unido, especialmente tras conocer Tediato las circunstancias familiares de Lorenzo. Los dos usan esa palabra: amigo. Ya no importa tanto el pago que le reclamó Lorenzo a Tediato nada más encontrarlo en la primera noche. El concepto de amistad en el siglo XVIII se trasforma gracias a la ilustración. La amistad ha existido siempre, por supuesto, pero las ideas que trasformarán el mundo la afectan notablemente y aquí se ponen de manifiesto desde la misma forma de tuteo usada por Cadalso. Tediato y Lorenzo se han unido en la amistad porque se reconocen en el sufrimiento y en la desesperación, su dolor no puede tener remedio de ninguna manera. Sólo esa sensación de hermandad a partir de la amistad puede consolar algo:

hallarás en mí un desdichado que padece no sólo sus infortunios propios, sino los de todos los infelices a quienes conoce, mirándolos a todos como hermanos; ninguno lo es más que tú. ¿Qué importa que nacieras en la mayor miseria y yo en cuna más delicada? Hermanos nos hace un superior destino, corrigiendo los caprichos de la suerte que divide en arbitrarias clases a los que somos de una misma especie: todos lloramos..., todos enfermamos..., todos morimos.

Esta es una de las claves de la obra, no tanto el argumento más o menos truculento que tanto puede llamar la atención al lector en la primera lectura. Sea cual sea el primer motor de la escritura del texto -recordemos que la leyenda quiere que la obra se escribiera por el dolor de la pérdida de la amada-, desencadena en un canto a la hermandad entre los que sufren y a la amistad, muy apropiado para la filantropía como concepto ilustrado, que ve en la nueva realidad del ciudadano la solidaridad que faltaba en el mundo teocéntrico, establecido a partir de conceptos similares pero nunca idénticos: piedad, justicia divina, caridad. El ser humano debe buscar la filantropía independientemente de que haya un dios que lo castigue por no hacerlo o premie por hacerlo. He aquí la lectura final de esta obra, que nos sitúa en un ámbito ideológico concreto, muy interesante. Y que termina como debe hacerlo. No debe olvidársenos que Cadalso tuvo el suficiente tiempo para continuarla y no lo hizo, que la dejó en fragmento a propósito y que la cerró, significativamente con las palabras de Tediato: Andemos, amigo, andemos.

De la obra hay suficientes y acreditadas ediciones en papel. Además, en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes tenéisun magnífico portal dedicado al autor dirigido por Juan Antonio Ríos Carratalá, experto en la época. En él hallaréis una semblanza biográfica, una recopilación de estudios sobre el autor y su obra y una excelente edición digital de las Noches lúgubres a partir de la del Correo de Madrid (diciembre de 1789-enero de 1790) y una oportuna reproducción digital de la edición de Barcelona 1798 (que fue la primera edición en volumen).

Noticias de nuestras lecturas

Mª del Carmen Ugarte escribe una última entrada sobre la obra llena de acierto en todo, desde la ilustración inicial hasta el comentario sobre el final abierto o cerrado. Más que recomendable.

Pancho comenta la tercera noche y completa su texto con los comentarios de las continuaciones que se escribieron en el siglo XIX, lo que atestigua el indudable éxito de la obra de Cadalso. Y por si sí o por si no, merece la pena llegar hasta el vídeo final de la entrada.

Entre Austri y Mª Ángeles Merino comentan la segunda noche de las Noches lúgubres, entre divertidas y asustadas por lo que se dice en ellas...

Luz del Olmo recrea en buen verso la noche segunda desde la voz de Tediato.




Con motivo de la celebración del cervantino día del libro varios de los amigos del Club de lectura han publicado entradas cervantinas que os recomiendo:  Gelu trae a su blog un artículo alusivo a la efeméride que escribiera José Sánchez Rojas; Edurne recupera un cervantino juego dulcinesco que ya había publicado en su blog antes; Mª Ángeles Merino da cuenta de una interesante lectura del Quijote que enlaza con la que aquí hicimos en su día; Cornelivs corre -y es literal- para llegar a Cervantes.



La próxima semana comenzamos con la lectura de Cicatriz, de Sara Mesa. El martes 3 tendremos la sesión habitual en el formato presencial de este club de lectura.

Recojo en estas noticias las entradas que durante la semana han publicado los blogs amigos. El listado de lecturas para lo que queda de curso, en este enlace

5 comentarios:

PENELOPE-GELU dijo...

Buenos días, profesor Ojeda:

El ser humano, tan indefenso al nacer, ha podido llegar al momento presente por algún tipo de sentimiento amoroso que le proveía de los cuidados necesarios, hasta ser autosuficiente, para enfrentarse a la lucha que supone el vivir.
Tediato, se percata de la realidad al morir su amada. Todos los privilegios hasta ese momento de la pérdida, disfrutados como cosa natural carecen de valor, ante su soledad.
Al conocer a Lorenzo, descubre otro mundo que ignoraba, y valora las auténticas penurias y la amistad.

Abrazos

Abejita de la Vega dijo...

Tediato se compadece, claro que se compadece; pero, en la segunda noche. La solución que da a Lorenzo no es muy compasiva bajo nuestro punto de vista: ¡enterrar a los niños! Puede ser compasiva para un loco…

Empieza a ver el dolor ajeno al final de la segunda noche y lo dice. Es en la tercera cuando sale del todo de su egoísmo y abraza la Fraternidad Universal, idea ilustrada que no se cumplía en la práctica.

Un abrazo, Pedro.

pancho dijo...

El soliloquio de Tediato se hace plática con Lorenzo, más desafortunado que él. Aprende el secreto de la filantropía (como Antonio Machado) de alguien más desgraciado y pobre de solemnidad. El enterrador da una lección de solidaridad insólita cuando no acepta la cartera llena de joyas que Tediato le regala cuando ya no es de este mundo. Prefiere la prisión a la libertad si ésta consiste en ver la pobreza extrema y la miseria que reina en casa de Lorenzo.
Nos metemos en el mes de mayo y se multiplica el trabajo ( las alergias y otras cosas) con la llegada de las flores y la primavera. No voy a tener tiempo de leer la novela propuesta, que seguro que es buena viniendo recomendada por Oscar Esquivias.
Os seguiré con interés, como siempre.
Un abrazo.

Myriam dijo...

Cómo bien debes imaginar, esta clase me ha encantado
lo mismo que la lectura final de la obra.

¡Filantropía y amistad! ¡qué conceptos más bellos!

Esa es la clave para la salud del alma, de
la mente y del cuerpo. Sólo así puede superarse
el propio dolor. La propia vida cobra sentido
y puede trascenderse cuando se sale de uno mismo
hacia los otros seres humanos que nos rodean
y se tiene en cuenta sus logros, sus necesidades,
sus alegrías, su dolor; en puna palabra: su Ser
como personas.

Besos a ti y abrazos al grupo.

PD Con respecto a Cicatriz, tengo encargado
el libro, pero aún no me ha llegado.




impersonem dijo...

¿Y empatía?

Me ha gustado mucho este texto Pedro... mucho.

Abrazo