miércoles, 25 de noviembre de 2020

Cruces

 


Hoy he tenido un fuerte dolor de cabeza que, al irse, me ha dejado el regusto del cansancio. Recuerdo que mi madre sufrió de jaqueca durante muchos años. En los episodios más intensos, tenía que refugiarse en una habitación oscura. Después del fallecimiento de mi padre, la jaqueca desapareció, pero llegó un largo cansancio de tristeza.

Hay personas con las que deseas que el cruce de las secantes se convierta en enredadas. Con otras desearías tener a mano un machete para cortar los cruces, como el que se adentra en un zarzal que ha de atravesar para llegar a un prado abierto.

La mejor definición de ti mismo te la da la dirección que tomas cuando te encuentras con alguien en un descampado inmenso.

Te cruzas con tu imagen en la superficie del agua de una charca. Y la pisas para ver cómo se fragmenta. Cuando regresa la calma, siempre falta un fragmento, que ha quedado adherido a los juncales de la orilla.

12 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Como decia mi suegra cada uno lleva su cruz como puede.

María dijo...

Yo no suelo tener dolores de cabeza, pero sí deben ser desagradables.

Besos.

Berta Martín Delaparte dijo...

siempre falta un fragmento, que ha quedado adherido a los juncales de la orilla.
¡Admiradora de tu capacidad para imaginar!
Un abrazo.😄

Sor Austringiliana dijo...

La vida humana se somete mal a los dictados de la geometría. Hay días y días, hay personas y personas, hay dolores de cabeza...Siemore queda algún fragmento donde los demás no tienen acceso. La soledad es deseable o indeseable, según. Y hay machetes.nos damos miedo.
Cuídate. Besos, Pedro.

impersonem dijo...

Cruces y encrucijadas forman parte de nuestro caminar... y la concordancia o discordancia con los demás, la afinidad o el rechazo, también forman parte del mismo... es así, y cada cual lo gestiona según creo o según puede...

Abrazo

São dijo...

Enxaqueca é algo muito mau.

Do género de estar no escuro, só sofri uma vez, mas deus para saber quanto é dolorosa e incomodativa.

Besos, amigo mio

Rita Turza dijo...

El camino esta lleno de cruces y algunas tan bonitas como la que nos traes en este precioso retrato de interior.

Abrazos enormes.

El Deme dijo...

Lo que estamos viviendo ahora sí que es una cruz...

Fackel dijo...

Siempre hay algo tras los dolores de cabeza. Tal vez cruces, acaso encrucijadas, pero importa no acabar crucificados por lo que se encuentre recóndito dentro de nosotros.

Myriam dijo...

Espero que ya se te haya pasado el dolor de cabeza.
Cuídate del estrés, enserio. Escucha las señales.

Me gusta esa descripción que cruces con personas que hiciste, espero y deseo ser parte de esa enredadera. Y sí, para otros casos hasta un machete, a veces, no es sufiicente.

Besotes x2

andandos dijo...

Menos el dolor de cabeza imagínate que lo que has escrito lo hubieras hecho con doce años. Doce años de los de entonces. Ahora tenemos bastante educación, urbanidad quiero decir.

Un abrazo

Ele Bergón dijo...

Creo que está bastante demostrado que nuestra mente, influye y mucho, en el cuerpo que nos sustenta.

Hay personas que las buscas y hay otras que desearías no volver a verlas.

Das buena definición de las querencias y no querencias

Si pisas la charca limpia, suele ocurrir que el agua se renueve y entonces emborrona la imagen reflejada.

Besos