sábado, 15 de agosto de 2020

Ser pueblo, hacer pueblo y estar con el pueblo

 


En el Andador de Oaxaca, las paredes lucían algunos carteles revolucionarios, con una calidad e intención a la que no estamos acostumbrados en España, en donde nos limitamos a estropear paredes con mensajes confusos que no se entienden. Traigo este, que hace alusión al maestro rural Lucio Cabañas, que se convirtió en revolucionario o quizá ya naciera así por sus antecedentes familiares. Me llamó la atención el lema: Ser pueblo, hacer pueblo y estar con el pueblo. Me llamó la atención porque por aquí, en España, se estila la proclama de revolución que quiere dirigir al pueblo, no serlo, como abundan los poetas sociales a los que no les gusta lo que hace el pueblo, ni se acercan de verdad a comprenderlo porque no se encuentran de verdad a gusto entre la gente popular. Juegos de salón. Defender al pueblo, pero sin el pueblo, incluso contra el pueblo, qué diferente resulta como lema.

En el Andador de Oaxaca, dos niños vendían sus dibujitos por unos centavos. Habían improvisado una exposición en el suelo de la calle, sujetando las hojas sueltas de cuadernos escolares con unas piedrecitas. Se habían venido en autobús desde Chiapas, los dos solos. El mayor de ellos, de unos nueve años, protegía al menor. No pedían limosna, vendían sus dibujos: soles, montañas, nubes, ríos, gente, llenos de color alegre y vida. Mayca y yo nos arrodillamos y estuvimos hablando un buen rato con ellos, dejando que nos explicaran uno a uno sus trabajos y entresacando sus emociones y esperanzas. El grande quería ser pintor de mayor, el pequeño no sabía, pero asentía muy serio también. Mientras charlábamos, les repartimos unas galletas que habíamos comprado un poco antes, de esas maravillosas galletas artesanas oaxaqueñas. Nos enseñaron sus cuadernos, llenos de más dibujos. Les compramos algunos y nos despedimos. Al día siguiente los buscamos, pero ya no estaban.

11 comentarios:

La seña Carmen dijo...

Pequeñas historias de pequeños grandes artistas. Gracias por contárnoslas.

Emilio Manuel dijo...

"Ser pueblo, hacer pueblo y estar con el pueblo", que lema más hermoso.

Sor Austringiliana dijo...

Lo que más abunda es aquello tan antiguo de todo para el pueblo pero sin el pueblo. Los maestros viven muy cerca al pueblo y son pueblo. Es impresionante ese retrato del maestro rural mexicano. Y la dignidad de esos niños de Chiapas que venden sus dibujos. Veo que metiste un trocito de México en tu maleta. Feliz domingo de San Roque.

mojadopapel dijo...

Me hubiera traído a los niños solo con que me lo hubieran pedido... Ésta es la excusa de mi propia cobardia.

Fackel dijo...

La verdad es que a estas alturas esa clase de eslóganes me hacen desconfiar. Habría que ver hasta qué punto en su tiempo y circunstancia el lema se desarrolló o fue traicionado por la demagogia.

Gonzalo dijo...

Oaxaca es el estado mexicano que mayor guarda la comunalidad y el respeto del pueblo, esa frase lo dice todo!!

Alimontero dijo...


Querido Pedro, con lo que sea, llega al alma..
Cómo no enternerse....
Saludos,
beso
Ali

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Mientras no se idealice a la pobreza como sinónimo y eterno destino de ese pueblo...

Berta Martín Delaparte dijo...

Las ilusiones de los niños, no se diferencian demasiado, al fin y al cabo son en cualquier lugar del mundo las mismas: perseguir un sueño hasta alcanzarlo.
Lamentablemente en muchos lugares de los países de America Latina , los sueños se quedarán en eso, en un sueño.

Pero no todo es negativo, como únicamente se desea lo que se conoce, supongo que por eso, los niños , " esos niños, siempre sonríen ". Yo creo que en el fondo ellos son felices. 😘✔

Doctor Krapp dijo...

Es una hermosa historia corriente.
Hay que ver como el despotismo ilustrado sigue prevaleciendo entre nosotros.

Ele Bergón dijo...

Una historia conmovedora de las que no se olvidan Los niños crecerán y yo creo que tampoco olvidarán aquella pareja deñ españoles que estuvo hablando con ellos y les regaló unas galletas.
Besos