Y, al fin y al cabo, la vida es esto. Un poco de resignación y su otro pellizco de rebeldía, días en los que el mundo parece terminarse y otros en los que simula estreno. Mirar siempre más allá de uno mismo y de vez en cuando sentarse al pie del sendero a recuperar la fuerza y conversar con los que caminan. Pasar por todo ello con el menor ruido posible para evitar dañar la floración de los frutales y alterar el vuelo de los vencejos.
18 comentarios:
Puede que haya que mirar siempre más allá de uno mismo, pero es inevitable hacerlo a través de uno mismo y no sé hasta qué punto somos buenos observadores, desde luego nada objetivos, pero al menos hay que intentarlo. Del vuelo de los vencejos ya se encarga el ruidoso mundo técnico que nos rodea a todos incluso durmiendo.
No alteremos ni el monte dejando "porqueria", y dejemos volar no solo a los vencejos a todas las aves.
Es una buena definición de la vida.
Esa sonrisa que nos muestras es un reflejo de lo que escribes; tiene algo de resignación, algo también de rebeldía,y por supuesto algo de agradecimiento por poder admirar, un año más, la floración de esos frutales y el vuelo de los vencejos.
Un saludo, Pedro.
Vivir y ayudar a vivir, nada más.
Maravilloso retrato de interior. Te sienta muy bien el norte.
Un fuerte abrazo, Pedro.
Como decía en mi posteo, desconozco muchas cosas que no sean de la ciudad. Me fui a averiguar que son los vencejos...nada más hermosos Pedro! Aves migratorias que durante primavera y veranos están en Europa, luego se van al
Sahara.
Siempre creciendo contigo.
Beso
Ali
Como expresé en mi posteo, desconozco muchas cosas que no sean de la ciudad, por lo tanto averigué qué son los vencejos, y espero me disculpen quienes te visitan. Y al descubrirlo, que hermosa ave Pedro!!Aves migratorias que llegan en primavera y verano en Europa y en invierno migran al Sahara....
Siempre aprendiendo contigo!
beso,
Ali
Me conformo con lo que veo fuera de mí, intento ampliar la visión, pensar libremente y en silencio y dejar que los vencejos también vuelen libremente.
Saludos
Es una buena reflexión, y me gusta mucho el comentario que ha hecho de la misma Sor Austringiliana.
Conversar con los que caminan es una buena forma de emplear el tiempo...
Para mirarnos bien hacia dentro, se debería comenzar poniendo el ojo en los demás, en lo que nos rodea. De otro modo corremos el riesgo de quedarnos en la mirada superficial.Un abrazo
Cuando se oye el trisar de los vencejos en el cielo azul, podemos decir , que el buen tiempo viene a visitarnos
Besos
El tiempo, nos lleva, nos trae...en ese pasar que nunca descansa. A veces es rápido y alegre y otras...lento en su propia trsteza, pero su certeza es que nunca se para.
Besos
La "resignación" es inevitable, pero me gusta más lo de "rebeldía"
Saludos cordiales
Me gusta tu reflexión, es leerte, y respirar paz en el interior, además estás un lugar precioso.
Un beso.
Eso, simplemente reponerse en el camino y observar esas maravillas que la naturaleza nos regala.Sobre todo no alterar ese vuelo y no alterarnos con simplezas, que la vida solo son pequeños momentos.
Un abrazo y espero que el marte "Día del Libro" lo disfrutes:)
Hay días en los que encontrar algo positivo es un deporte extremo, sin lugar a dudas.
Saludos,
J.
Me gusta tu retrato, Pedro. El de la fotografía y el interior.
Evita pasar por un lugar o por una persona y dejarlo/a peor. A veces, casi es inevitable... Pero debemos intentarlo al menos.
Un abrazo fuerte.
Contemporizo con tus líneas.
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