sábado, 5 de diciembre de 2020

¿Cómo era el mundo sin ti?

 


¿Cómo era el mundo sin ti,
cómo era salir al tiempo
sin que abrieras la mañana
con tu gesto,
expulsándome amorosa
de tu cuerpo?
¿Cómo era el mundo sin ti?
¿Cómo era sin que tu voz amaneciera los cielos?

No recuerdo la nieve
antes de que llegaras

ni memoria de la risa,
ni si los árboles o los pájaros tenían nombres,
no recuerdo los caminos,
por donde estuve tan solo.

Y ahora salgo de casa
para encontrarte
en el olor a pan
reciente de mis manos,
en el fulgor del pecho,
de par en par al aire.

© Pedro Ojeda Escudero  (2020).



15 comentarios:

José A. García dijo...

Cambian tantas pequeñas cosas constantemente que, un día, miramos con atención y nos damos cuenta que todo ha cambiado sin más.

Saludos,

J.

JLO dijo...

El sentimiento a flor de piel, muy bueno. Saludos.

Sor Austringiliana dijo...

Es el amor que pasa.

Francesc Cornadó dijo...

Hay sentimientos cuya potencia borra los recuedos.
Caminamos poco a poco y los nuevos pasos son evocaciones.
Salud
Francesc Cornadó

Fackel dijo...

Qué poema tan agradecido; que dure.

Luis Antonio dijo...

El mundo no tiene sentido sin según quién...

São dijo...

O poema é belissimo e a foto linda.


Há quem tenha que encontrar o sentido das coisas em solidão...fico feliz por não seres uma dessas pessoas

Beso, querido Pedro, com voto de bom resto de domingo e excelente semana :)

Recomenzar dijo...

Muy bello y muy dolido
ya que sin ella
no entiendes al mundo en que vives

Doctor Krapp dijo...

Es muy hermoso. Gracias, Pedro por iluminar con tus palabras una tarde de domingo tan gris.

Ele Bergón dijo...

El mundo es distinto,desde que estás con ella.
Magnifico poema.

impersonem dijo...

Un antes y un después bellamente descritos en un poema escrito con el correr del corazón a pecho descubierto ("de par en par al aire")...

Me ha gustado.

Ya veo en la foto que estás pisando nieve en un bello paisaje...

Abrazo

LA ZARZAMORA dijo...

Sencilla-mente... es que ni era ;)
Ahora, ya solo te toca seguir am-ándo-lo, sintiéndolo, oliéndolo...tocarlo, oírlo...y sobre todo y antes que nada, anidarlo... y no dejarlo escapar.
Besos, Pedro.

andandos dijo...

Ya lo leí ayer. Pues todo sería peor, sin duda.

Un abrazo

mojadopapel dijo...

Qué bien te sienta la nieve!!!

Edurne dijo...

¡Por Dios, qué maravilla de poema!
Me descubro.
Un beso.
;)