¿Es el mismo cielo, sky? ¡Cuántas cosas comienzan en el Diario de un poeta reciencasado (1916) de Juan Ramón Jiménez! Todo nuevo, como si se estrenara. En 1917 se publicaron dos libros fundacionales para la poesía en España: la primera edición de las Poesías completas de Antonio Machado y este Diario de un poeta reciencasado (1916). Año fecundo donde los haya: desde ese momento la poesía española se preparaba para una época de esplendor. Mucho de lo que hoy pasa por innovador, por riesgo formal y por rupturista no llega ni de lejos a lo que supuso aquel año. Por eso me sonrío cuando leo o escucho estas afirmaciones entre poetas de hoy que ni siquiera conocen que hace cien años alguien se les adelantó y ellos no van más que al rebufo pero las usan alocadamente para refutarse unos a otros -es tanta la ignorancia soberbia- como los que se agreden con las palabras democracia o libertad en política. De estos dos libros derivan las mejores cotas de la poesía española hasta el presente.
¿Es el mismo cielo, sky? Juan Ramón Jiménez se había embarcado en un viaje físico para encontrarse con su esposa, Zenobia Camprubí, que se encontraba en los EE.UU., pero también -y sobre todo- en un viaje artístico. Dispuesto a profundizar en los elementos de la poesía de vanguardia busca su nueva voz poética y la halla precisamente en la misma búsqueda. Y llega a América y encuentra que el cielo ya no es cielo, sino sky. Los textos del Diario en los que juega con las palabras inglesas entre divertido y satírico, con los diferentes hábitos y paisajes -sobre todo con el urbano- son sustanciales para comprenderlo. Despojado del idioma, debe reiniciar la búsqueda porque es consciente de que es el lenguaje el que propicia el poema. A esta cuestión dedica el poema LX:
Como tu nombre es otro,
cielo, y su sentimiento
no es mío aún, aún no eres cielo.
El lenguaje y el sentimiento van unidos en el quehacer poético y arrastran al mismo objeto. Hasta el punto de que debe hacerse de nuevo el poema:
pues estoy aprendiendo
tu nombre, todavía...
Somos lenguaje. El idioma en el que hablamos configura nuestro pensamiento. No solo la manera de decirlo o de expresar nuestro sentimiento, sino el mismo pensamiento o lo que sentimos. Mayor labor aún para el poeta al que le costó hacerse con el cielo y ahora debe llegar a sky. El poema no es la poesía, sino su expresión o, mejor, la forma en la que la cercamos, sin llegar nunca a vencerla. De ahí que Bécquer hablará del lenguaje insuficiente o que Juan Ramón concibiera su obra como Obra en marcha.
5 comentarios:
Gracias por recordarme a ese gran poeta y escritor.
besicos
Mavi
Querida Pedro, aunque no lo creas, te sigo en tu curso sobre Las Vanguardias a través de Mª Ángeles y ahora sé que estáis con el poeta que siempre me gustó y me gusta: Juan Ramón Jiménez.
A pesar de andar un poco liada, tengo tiempo para volver a leer Diario de un poeta recién casado.Siempre me encantó, pero con tus aportaciones en diferido, aún le saco más jugo. Esta mañana acabo de leer el poema que comentas Skay, magnifico, al igual que el del SILENCIO.
Nos vemos en Valladolid.
Besos
Tal vez uno de los mayores esfuerzos en literatura fue, para mí, acercarme a "Diario de un poeta reciencasado". Sin la mejor de las ayudas -y tu lo sabes- nuca lo hubiera conseguido.
Gracias
Aunque la Julieta de Romeo dijera que lo que llamamos rosa exhalaría el mismo perfume con cualquier otra denominación...le doy la razón a Juan ramón Jiménez, no se pueden hacer los mismos versos con un cielo que con un sky. Voy leyendo el "Diario de un poeta reciencasado (1916)". Iré entrando. Me gusta mucho el del anillo de boda, mas no sé, a lo mejor habla de otra cosa, esta vanguardia...Con la ayuda de un buen profesor y la de una buena amiga poeta...
Ya ves qué lejos llega la abierta...
Besos
Cansado del "procés" he vuelto a los podcast, realmente programas de radio, ya ves tú. Uno de ellos es sobre JR Jiménez y sí, sobre su libro "Diario de un poeta reciéncasado". De Machado no digo nada hoy.
Un abrazo
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