Estos días seguimos a la espera de la lluvia, así que hasta la melancolía anda con pocas ganas de engancharse a la camisa. Es lo que tiene un otoño que no lo parece. Andan los poetas de la tristeza un tanto descolocados, los del sarcasmo con poco nuevo que decir y los de alegría agotados de tanta luz y tanto verano. La mayor parte de la literatura española anda en estos tiempos en círculos, como la política. A mí, por si acaso, ya me ha agarrado un virus y ando con la garganta mal y la cabeza espesa. Así voy haciendo las tareas para el invierno...
14 comentarios:
Que te mejores.
Besos.
Así es, querido amigo.
A mí los virus me pillaron con el paso cambiado, y creo que fueron legión. He estado una semana de baja, y tres días me los he pasado en cama, moribunda total, ¡la fiebre no me bajaba ni a tiros!
De vuelta desde ayer en clase, ay, es como que la gorge me reclama un poquito más de tranquilidad. Imposible, ya estamos en el lío de nuevo.
¡Aguante usted!
El otoño de verdad ya llegará, ¡no le queda otra!
Besos y ánimos.
;)
Un otoño que parece más bien primavera, pero yo lo prefiero así que tarde en irse el calor.
Espero te recuperes pronto, Pedro.
Un beso.
Llegará para renovar y cambiar los colores.....no lo dudes!
Ya llegarán los fríos y me temo que serán intensos.
Saludos
Están echando en los cines una biografía de una singular cantante amateur de ópera de los años 40, que conmueve por su disposición. A ver si nos atrae la lluvia su canto.
No añoro, para nada, los rigores del verano y procuro apreciar lo mucho y bueno que nos depara el otoño. Los virus son asumibles, salvo algunos que no vienen a cuento...por ser más que conocidos.
Esa ventana es como una especie de rompecabezas que se resuelve desmontándolo. A lo mejor hay que hacer lo mismo con el verano para que llegue por fin el otoño. Y con otras muchas cosas.
Un abrazo.
No nos libramos del veranillo de San Miguel.
Cuídate.
Un abrazo
A Ibéria anda malzinha, anda...
Nó aqui tivemos , pelo menos, a enorme alegria de saber que a ONU ainda não está sob o mando alemão e assim escolheu António Guterres para seu Secretário - Geral.
Besos e as tuas melhoras, querido amigo
Será que necesitabas un descanso. Recupérate, te va un abrazo.
Yo ando espesa también, Pedro. Mi virus es de otras formas y colores estos últimos tiempos. Ésos que hacen que uno se desconcentre más de lo que debería.
Pero bueno, aquí estoy intentando hacer algo positivo. Y esta tarde ha sido medianamente fructífera, viendo a lo que me tenía acostumbrada mi cabecita de chorlito...
Me alegro de regresar a tu rincón. Acogedor, como siempre.
A mí la melancolía me pilla siempre cuando septiembre se hace presente, mis biorritmos le meten al verano unos cuantos días de animus otoñal; y la garganta la tengo como tú hace un día o dos...
Abrazo
Las ventanas, pese a los catarros, hay que abrirlas...
;)
Besos, Pedro.
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