jueves, 24 de mayo de 2012

Juego de seducción y noticias de nuestras lecturas




La viuda valenciana es un buen ejemplo de la primera etapa de la fórmula de comedia fabricada por Lope a partir de los materiales previos ya conocidos (la influencia de la comedia del arte italiana en su vertiente convencional exportada a España en el XVI; los autores que, a partir de ella, dieron predominio al texto con intrigas más novelescas; las novedades introducidas desde los años ochenta por los dramaturgos españoles, especialmente en Madrid, Valencia y Sevilla y que contribuyeron a nacionalizar definitivamente la propuesta teatral italiana, etc.). La obra data, casi con toda seguridad, de los últimos años del siglo XVI. Lope, recién regresado a Madrid tras su destierro, comienza a dominar la escena de la Corte con un tipo de producción que logra entusiasmar al público heterogéneo de los corrales de comedias hasta un punto en el que consigue barrer de la programación cualquier obra que no se adecue a la fórmula de la comedia nueva. En este caso, además, utiliza su propia experiencia biográfica como materia dramática. Recrodemos la convulsa vida amorosa de Lope en su juventud.

Y aquí tenemos los ingredientes: juegos galantes de seducción en los que se mezclan una acción trepidante, un diálogo vivo expresado en unos magníficos versos, unos personajes caracterizados sin alardes de profundidad pero suficientemente reconocibles para que puedan ser encarnados y provocar la empatía del espectador, intrigas y equívocos que despiertan la curiosidad no tanto sobre el previsible final sino sobre la forma ingeniosa de conseguirlo, disposición del conflicto de tal manera que nos encontremos arrastrados por la acción y sin posibilidad de distraernos. A ello se suma la habilidad dramática para disponer las situaciones. Por ejemplo, en La viuda valenciana, observamos que Leonarda tiene tres pretendientes pero ella los rechaza todos para buscar otro, complicando la trama. Por lo tanto, Leonarda pasa de objeto a sujeto de la acción. Este personaje femenino es típico de una de las variantes del género creado por Lope y uno de los mayores actractivos para el espectador de la época, como ya dijimos: la mujer toma las riendas de su vida y quiere decidir ella misma sobre su vida amorosa y sexual. No olvidemos que, para dar verosimilitud a esta propuesta en una época como la suya, Lope debe hacer que la mujer sea viuda -sería impensable en una soltera la actitud de Leonarda y, además, retrata un tipo social bien definido de mujeres obligadas a casarse jóvenes con hombres mayores y que enviudan pronto-, que todo suceda en un ambiente de Carnaval -época en la que se permiten más libertades- y en Valencia -ciudad más liberal en las relaciones sociales que Madrid, por ejemplo-. Leonarda se encapricha de Camilo y lo seduce usando para ello todas las estrategias que puedan despertar la curiosidad del galán que, inevitablemente, debe rendirse ante la superior inteligencia de la dama. Pero Lope evita el riesgo de su propuesta y hace que todo termine en boda. Todo es un juego de ingenio, puesto que así se concibe también el amor en la literatura de la época y en las convenciones amatorias del siglo: Lope lleva al extremo la fórmula, complicando la propuesta porque es la raíz de la comedia nueva que ha fabricado. No faltará, tampoco, el paralelo del amor de los amos en los criados.

Este alarde de ingenio -rebajado en el montaje televisivo para simplificar la acción y encajarla tanto en el tiempo de una representación teatral típica hoy como en el gusto del público actual- solo es posible cuando se dominan los resortes dramáticos como lo hacía Lope, por supuesto.


Noticias de La viuda valenciana

Pancho nos regala tres entradas en una: comentario del núcleo amoroso en la obra de Lope, comparativa con El médico de su honra, de Calderón y contexto histórico. No podemos pedir más.

Myriam termina su análisis de La viuda valenciana con el comentario de la resolución del conflicto y, especialmente, con una brillante exposición de la comparativa entre el original de Lope y la adaptación televisiva.

Mª Ángeles Merino, tras convertirse en confidente de Leonarda, nos traslada ahora sus palabras para mostrarnos lo que puede hacer una mujer cuando quiere algo con fuerza. Excelente propuesta de análisis desde dentro.

7 comentarios:

lichazul dijo...

excelente trabajo Pedro
siempre dejas enseñanza en nosotros

Myriam dijo...

Analicé solo la obra tal como la muestra la adaptación para TV porque hacer una comparativa exhaustiva entre la adaptación y el original, te digo la verdad, me parecieron palabras mayores. Por eso, apenitas expongo al final esa comparativa que mencionas, con lo que me has estimulado para echar un ojo un poco más detenidamente sobre el juego de duplicidad que se establece con los criados en Lope y veré si puedo escribir una entrada complementaria para la semana que viene, aunque no lo prometo, pero lo intentaré.

Un beso

Luis Antonio dijo...

Reitero lo que ha expuesto "lichazul"

pancho dijo...

En esta obra las escenas se suceden unas a otras con rapidez. De esa forma el espectador no tiene tiempo de comentarios en las transiciones a menos que quiera perder el hilo de lo que sucede en escena. Esa es una de las muchas habilidades de Lope: el ritmo dramático intenso que imprime a sus comedias.

Una mujer que prefiriera vivir sola después de enviudar no era bien considerada, menos si era tan atractiva como la valenciana.

Excelente explicación, de mucho nivel y bien adaptada para que se entienda.

lichazul dijo...

BUEN FIN DE SEMANA PEDRO
besitos

Abejita de la Vega dijo...

"La lozana andaluza" me atrapó desde la primera escena. Creo que la versión de Estudio 1, aunque simplificada, hace mucho más atractiva la obra. Pinché en un pequeño vídeo, en You Tube, con un fragmento de otra versión, más a palo seco, y me pareció... insoportable.

Disfruté con la música, que no es de la época pero como si lo fuera. Y con la música de los versos, una caricia para los oídos. Aitana y Fran están muy bien, pero ¿qué me decís de los actores que hacen de Julia y Urbán? Urbán es un actor bien conocido en el medio televisivo, pero no he dado con el nombre de la simpática y picarona Julia.

"Juego de ingenio","alarde de ingenio", algo forzado al final, con situaciones inverosímiles como la de Camilo hablando de su dama a una desconocida, pero nos hacemos cargo...Bueno, lo más inverosímil es que alguien se deje conducir con los ojos tapados hasta un lugar desconocido, para ver a una mujer desconocida.

Las lecturas colectivas se toman un descanso, nos has dicho, hasta septiembre. Es un buen momento para agradecerte tu excelente trabajo, enorme trabajo. ¡Lo que llevo aprendido y disfrutado desde septiembre de 2008 hasta ahora! Un manera distinta de abordar las obras de nuestra literatura. Cervantes, Esquivias, Bécquer, Mendoza, Valle Inclán,Cavestany y Lope de Vega. Buen currículum.

Besos

Señor De la Vega dijo...

Mi Señor Ojeda, como siempre a su servicio, realizando mis deberes de lectura y compañero.

En destierro asumió nuestro de Vega
que la farsa se goza y siempre embarga,
así en Valencia viste de Bottarga
y Commedia dell’arte se le pega.

Construirá una Viuda que nos ciega
y en cuento de Apuleyo al asno encarga,
que rol invierta en Carnaval su carga
con buen morbo y astucia mujeriega.

es Tirante hembra y Plazer de mi Vida
sensualidad y goce bien narrado,
entre doncella y Viuda la medida,

que en ver sin ver será el noble ocultado,
dando el autor a espectador cabida
que al ser voyeur se siente regalado.


Suyo, Z+-----

Nota: Porque me excedí escribiendo simpleces ya de largo, le dejo solo el soneto, pero he creado una entrada de la Viuda Valenciana allí en mi Cueva donde me extiendo y donde añadí pasados y versados comentarios.