Este capítulo, ya lo sabemos, supone un giro en la narración.
Todo nos lleva a analizarlo así: cierra un tipo de aventuras reactualizando el motivo de los molinos/gigantes de la primera parte pero dándole un nuevo significado; Sancho ha estado a punto de abandonar a su amo y éste ha tenido que usar todos sus argumentos emotivos para impedirlo (de hecho, podríamos interpretar que el esfuerzo de imaginación que hace en la aventura del barco encantado es para seguir afirmando ante su escudero que el impulso inicial es válido todavía, aunque la tensión debe resolverse de otra manera, puesto que Sancho ya no es el mismo del comienzo). Pero, sobre todo, ha cambiado el paisaje: nos adentramos en tierras de Aragón.
Y estas nuevas tierras tienen un significado en la obra. Como sabemos, Cervantes, al enterarse de la continuación de la obra escrita por Avellaneda, decide cambiar el camino de sus héroes: ya no los llevará a Zaragoza, sino a Barcelona. Desde que pasan el río Ebro profundizan en los cambios que percibimos desde los primeros capítulos de la segunda parte. Entrar en Aragón hace que estos cambios sean más visibles en un nuevo paisaje. El mundo de la Corona de Aragón era distinto al de la Corona de Castilla: otras costumbres, otras gentes, otras leyes. Es curioso que sea aquí en donde la obra, sin dejar el juego con sus referencias literarias, abandone el costumbrismo tal y como se había planteado hasta este capítulo para reflejar con más contundencia elementos de la realidad peninsular del momento. Es cierto que muchas de estas cuestiones ya estaban apuntadas en la primera parte, pero entonces se tapaban demasiado en literatura. Lo comprenderemos capítulo a capítulo y sabremos apreciar cómo una obra, sin dejar de ser la misma, puede crecer y cambiar a lo largo de sus páginas.
Luis Felipe Comendador me envió hace unos días esta foto, a través de Facebook. Gracias a él y a mi amigo Javier García Riobó conocí este espacio, junto al Teatro Cervantes de Béjar. Podéis comprobar su estado anterior en esta foto de Pancho, que publiqué en su día. Me informa Luis Felipe, con tristeza, de que la lluvia y el viento se aliaron con lo que debió ser una mala intervención técnica cuando se hizo la remodelación de la zona y la degradación del material de construcción y el resultado es el que podemos apreciar en la imagen. Lo malo es que también, según me comenta, un anciano que vivía en ese inmueble falleció al ver cómo había quedado su casa. Duele que sucedan cosas así.
Os animo a mandarme imágenes que reflejen la iconografía cervantino-quijotesca o a que las publiquéis en vuestros blogs, para acumular toda la información posible sobre Cervantes y el Quijote. Sobre todo me gustaría publicar imágenes no usuales, aquellas de pequeños lugares.
También os pido que me remitáis autorretratos quijotescos. Recordad que debéis estar con un ejemplar del libro o en actitud quijotesca.
Noticias de nuestra lectura
Antonio Aguilera aprovecha el tirón y suma Cervantes y Navidad y nos felicita, en tal ocasión, las fiestas. Después, se saca la espina del retraso con un divertido y acertado análisis del capítulo de la semana. Por cierto, acierta en mi gusto por el de Rute, pero en dosis justas.
El Sanchico, vía Ele Bergón, según nos dice Abejita, nos felicita las fiestas de forma bien original y después se preocupa por su padre, pero se le nota que va mal en geografía, perdón, cono. Amenaza con ser un poco gamberro al no estar su padre, pero sé que es un buen chaval. Después, Abejita comenta el capítulo -aunque hace trampa en la foto- con la aventura, como ella dice, del barco de socorro para caballeros andantes. Lo termina con piojos y aceñas -qué foto más certera- y una sensación de tristeza.
Paco Cuesta analiza el capítulo a partir de lo que significa de cambio en el paisaje y la acción y lo vincula, con acierto, a lo que pasa en la actualidad.
Alatriste escribe una buena y documentada entrada sobre lo que significa la entrada en Aragón de nuestros protagonistas. Acierta en las motivaciones, en el objetivo y, por supuesto, en la documentación. No os la podéis perder: una gran aportación.
ACTUALIZACIÓN.
Cornelivs, en su entrada del viernes, comenta con acierto las diferencias entre esta aventura del barco encantado y las de la primera parte: Don Quijote ha evolucionado, ve la realidad y ésta le gana un pedazo a su aventura en cada capítulo.
Enlace con el índice de nuestra lectura, elaborado por Raúl Urbina : Primera parte y Segunda parte.
Paco Cuesta analiza el capítulo a partir de lo que significa de cambio en el paisaje y la acción y lo vincula, con acierto, a lo que pasa en la actualidad.
Manuel Tuccitano se fija en el paralelismo de esta aventura con la de los molinos y en la actitud de Sancho. Además, nos regala una ilustración y un enlace bien oportunos.
Jan Puerta señala, en su comentario del capítulo, la forma tan natural en la que Cervantes cierra la aventura. También comprende cómo tras el chantaje emocional del capítulo anterior, Sancho vuelve a caer en las redes de su amo, lo que ilustra con una excelente fotografía que aumenta nuestra iconografía quijotesca, que crece con tres ilustraciones sacadas de un ejemplar de la novela de 1719.
Jan Puerta señala, en su comentario del capítulo, la forma tan natural en la que Cervantes cierra la aventura. También comprende cómo tras el chantaje emocional del capítulo anterior, Sancho vuelve a caer en las redes de su amo, lo que ilustra con una excelente fotografía que aumenta nuestra iconografía quijotesca, que crece con tres ilustraciones sacadas de un ejemplar de la novela de 1719.
Pancho acierta en todo en su comentario. En especial en resaltar el truco técnico, que Cervantes toma del teatro, por el que los lectores saben más que los personajes. Aprovecha que el Ebro pasa por el Quijote para felicitarnos la Navidad. No os perdáis las imágenes.
Alatriste escribe una buena y documentada entrada sobre lo que significa la entrada en Aragón de nuestros protagonistas. Acierta en las motivaciones, en el objetivo y, por supuesto, en la documentación. No os la podéis perder: una gran aportación.
ACTUALIZACIÓN.
Cornelivs, en su entrada del viernes, comenta con acierto las diferencias entre esta aventura del barco encantado y las de la primera parte: Don Quijote ha evolucionado, ve la realidad y ésta le gana un pedazo a su aventura en cada capítulo.
Enlace con el índice de nuestra lectura, elaborado por Raúl Urbina : Primera parte y Segunda parte.
Enlace con el blog construido por Manuel Tuccitano expresamente para esta lectura y que puede considerarse un agregador con los enlaces de todos los blogs participantes de forma regular, aquí.
Enlace con el grupo en Facebook, aquí. (Este grupo no sustituye a la lectura en este blog y no estáis obligados a uniros: lo usamos sólo como complemento, para informarnos, preguntar y debatir.)
Enlace con la entrada en la que encontraréis sugerencias si os incorporáis con la lectura ya iniciada, aquí.
Si me he olvidado de alguien, hacédmelo saber y lo subsanaré. Recordad enlazar vuestras entradas con La Acequia, para poder encontrarlas.
Vale.
14 comentarios:
Si después de la mojadura Sancho no se vuelve a casa, aguanta todo lo que le echen.
Estaremos atentos a los cambios que nos apuntas, cuando pasen el Ebro de noche.
Luis Felipe tiene la cueva al lado del derrumbe, poco tardó en verlo, tomar nota y avisar. La pared ya estaba en muy malas condiciones, la tenían vallada desde hacía meses. No sabía que viviera nadie en la casa, mala suerte que pasen estas cosas.
Me queda por leer la entrada de Alatriste, tendrá que ser mañana, que hoy ya se cierran las persianas y veo que tiene enjundia.
Se aprecian tus palabras sobre la entrada.
Un abrazo y que el agua no nos llegue al cuello, que a nuestros amigos andaluces ya parece que les sobra.
¡Todo un crecimiento y cambio que la hace más sabrosa!
Qué pena lo del teatro, que pena...al menos queda el documento aquí.
Besos
Olvidaste referirte a mi comentario, amigo Pedro.
La entrada que dejé programada y que apareció el dia 25.
un abrazo.
Corregido en la actualización, querido Cornelivs. Gracias por advertírme el olvido.
Van cambiando acciones y actitudes de los personajes... ya no son tan espontáneos como al principio...ahora reflexionan antes de actuar y ven las cosas como son...saludos
Me quedan por visitar varios enlaces. Os pido disculpas a los afectados: es que entre el inventario...(excusas baratas), comprar los mantecados de Estepa, el anís de Rute, el chocolate de Priego¡claro, turrolate!, traje de fiesta, peluqúería, "esteticienne", comprar gorritos, matasuegras etc etc.....¡¡no doy para más!!!.
Abrazos Y besos generales...Y QUE SIGA LA FIESTA
Horrible el derrumbe de ese teatro y lástima que un pobre anciano muriese.
Estoy deseando llegar a casa para tener el tiempo suficiente de leeros y comentaros. Por ahora, sólo lo hago en mi blog y aquí, en mi segunda casa, en La Acequia. Disculpadme todos mis queridos colegas quijotescos. Muchos besotes, M.
he leido " en bronce..." " raspaduras"
y me han encantado..pero lo que mas llego a encantar....es la lecturacon papa noel.....eres un divinisimo pedro!
besines :)
SAUVIGNONA
¡pues vaya lástima, sobre todo lo del pobre anciano!
porque lo material siempre se puede restituir.
a mí el capítulo este me hizo mucha gracia y nos da muestras otra vez, cervantes, de la originalidad que tiene para resolver lo imposible, como por ejemplo el tema de los piojos.
Es un libro sorprendente.
biquiños,
En esta segunda parte, observo sino he observado mal, que para Sancho eso de ser gobernador de una ínsula, ya no le hace soñar, pues se habla muy poco, no será que ya se ha dado cuenta que su señor Don Quijote no puede cumplir con la palabra. Y Don Quijote tampoco hace mención de ella, es que nuestros protagonistas, en ésta segnda parte del Quijote son más realistas?
Entre el capítulo anterior y el de esta semana, vemos como ha cambiado el paisaje manchego, al paisaje aragonés, como protagonista el agua del Ebro, un río poco agradecido con la tierra donde nace pues nace en Cantabria y por proximidad en Castilla, y riega las tierras de La Rioja, Navarra, Aragón y Catalunya. (Esto no es mío, lo dice Fernán Caballero o lo que es lo mismo Cecilia Böel.)
¡Qué pena el derrumbe de ese teatro! Aunque mucho peor que el derrumbe el hecho de que le haya costado la vida a un ser humano.
Me había llamado la atención la rapidez con que saltan de la Mancha a Aragón. La cueva de Montesinos dista, por lo menos, sesenta leguas del Ebro. Emplean cuatro jornadas, cuando por lo menos debían haber empleado doce (según Fernández Álvarez). A Cervantes le tiene sin cuidado la precisión geográfica y cronológica...
Leyendo tu entrada, he caído en la cuenta de que Aragón formaba parte de la España señorial,diferente de la España de realengo. Como tú dices: otras gentes, otras costumbres, otras leyes. Es algo en lo que antes no había reparado. Esta lectura del Quijote es más que una lectura. Como diría Sanchico, es una superlectura con un superprofe.
Aprovecho para desearte un Feliz Año 2010, año en que acabaremos esta tarea.¿No? Me dará penita...
Los mismos deseos para todos los que pasáis por aquí y por mi "arañita".
María Ángeles Merino, Abejita de la Vega o...Sor Austringiliana.
Quiero aclarar que no es la fachada del teatro la que se ha venido abajo, sino la de una casa que está en el mismo espacio. Los informes técnicos aclararán si la intervención urbanística que se hizo en su día ha tenido algo que ver.
Quiero aclarar a Hernando que el Ebro es un rio MUY BURGALÉS.
En la foto los árboles no dejan ver el ....
Entristece que una persona haya fallecido ¡de pena!
Lo de este libro es sorprendente.
Estoy deseando ver cómo cambia el paisaje, las costumbres...
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