Ayer presentamos Viene la noche, la última novela de Óscar Esquivias, en la librería Rayuela de Valladolid. El autor, su editor y yo mismo, los encargados de su presentación, fuimos extraordinariamente bien acogidos por Charo, y se lo agradezco. Charo, además, leyó un divertido fragmento de la novela.
De Esquivias ya se ha dicho mucho aquí. No me gusta hablar de promesas de escritores, porque en donde se les debe medir es en la calidad de la obra no en un futuro no escrito. Además, Óscar ya no es una promesa si siquera coloquialmente, sino una auténtica realidad. Desde Jerjes conquista el mar (2001) está muy claro que nos encontramos ante un narrador que aporta cosas nuevas al aburrido panorama de la novela actual en España.
La trilogía dantesca sobre Burgos y la guerra civil (Inquietud en el Paraíso de 2005, La ciudad del Gran Rey de 2006 y ahora Viene la noche de 2007) es una idea arriesgada pero radicalmente actual y necesaria. Su visión de la Historia cambia en cada volumen para ajustarse a las diferentes épocas narradas: realista hasta el costumbrismo en la primera; delirantemente vanguardista, onírica y surreal en la segunda; realista en tonos postmodernos en la última. Este cambio le lleva, por necesidad, a modificar el estilo de cada uno de los títulos. Este último, como dije ayer, es una mirada cervantina a Dante en clave actual. Pienso que es, sin duda alguna, el mejor de los tres -y los dos anteriores eran muy buenos-, que, además, puede leerse de forma autónoma si alguien no se ha acercado a los dos primeros. Rompe, en un giro arriesgado pero excelente, con la trama argumental de Inquietud en el Paraíso y La ciudad del Gran Rey para situarse en el Madrid actual. Esquivias es un gran narrador de ciudades y personajes. No diré más para no estropear el disfrute al lector. En breve publicaré un artículo académico sobre esta trilogía y el interesado podrá leerlo.
La presentación fue todo un éxito y se prolongó en una cena amable y llena de palabras.
8 comentarios:
Tomo nota de este autor. Ojalá tenga éxito. Y coincido contigo en tu visión de la narrativa española actual.
un abrazo.
FERNANDO: merece la pena apoyar a los que pueden mover un poco el panorama actual. Un abrazo.
¿No te parece Pedro que muchos lectores de Óscar habíamos hecho principal y única (tras los dos primeros tomos de la trilogía) la trama de -La expedición al purgatorio- que acaba tras una puerta en la "Ciudad del gran Rey", y que anhelabamos la tercera entrega en el convencimiento de que ésta nos desentrañaría los misterios de tan inusual como bien narrada (en los dos géneros ficción con personajes reales en Inquietud, y Fantástico con -La ciudad...-) expedición que comenzo Don Cósme. Y que con la llegada de la tercera y lo que en ella, de forma magnífica, narra Óscar muchos lectores (y así lo hemos cotejado entre varios)nos sentimos algo defraudados por la no finalización o seguimiento de la trama principal y que prometia un desenlace que nadie acertabamos a atisbar, pero eso sí, siempre con la expedición como núcleo principal del desarrollo del final de la trilogía?. En cualquier caso, y pese a esta última decepcioncilla, Óscar es un grande de las letras, que hace con su narrativa grande a la ciudad donde nació. Gracias Pedro.
blogochentaburgos@yahoo.es
blogOchentaBurgos: en primer lugar, bienvenido a La Acequia. Me alegra que el autor de un blog tan ameno como el tuyo se pasee por aquí.
Tu pregunta es la primera que se va a hacer el lector del tercer volumen. Como voy a dedicarle a esta trilogía un artículo completo (del que daré cuenta aquí como resumen), no escondo que esta cuestión es una sobre la que girará.
Comprendo la decepción del que espera la continuación de la trama, pero Óscar, creo que con acierto, no ha hecho una triología en el sentido tradicional del término: al principio el lector estará confuso y algunos no se lo perdonarán, pero anticipio algunas claves.
Leamos la primera como la visión de la Historia -en este caso centrada en los momentos anteriores a la guerra civil- en el formato tradicional de la modernidad: conflicto entre ideologías enfrentadas, sin ningún tipo posible de conciliación, narrado con un realismo costumbrista.
Leamos la segunda como la visión de la Historia en conflicto bélico, en caos absoluto que desordena el mundo hasta la incoherencia, que descoyunta el tiempo y el espacio. La narración debe ser, por lo tanto, vanguardista y fantástica, como los símbolos.
Leamos la tercera como la visión actual de la Historia: supervivencia individual, mundo a la búsqueda de un nuevo equilibrio.
Sé que Óscar meditó la tercera parte mucho y que huyó de la facilidad de la continuación argumental apostando por otro tipo de trilogía.
No creo que la aventura expedicionaria hubiera podido tener otro final mejor que el revisionismo cervantino de Dante (el paraíso de las ideas, el purgatorio del conflicto, el infierno de cada uno en el presente).
Bueno, son unas pocas notas que os pueden ayudar a la lectura. Prometo más.
Él dijo en la presentación de Burgos que ese final de la trama principal lo tenía medio escrito, y que lo desechó en Roma. Su razón, esgrimida en el salón Rojo que da comienzo a la trilogía: No se podía dar un final a esos personajes iniciales más que el que ellos dejaron escritos: Véase -correo epistolar de Antonio José- -memorias de una burgalesa de Mari Cruz Ebro-
-Franco contra Batet- de un monje catalán benedictino. Pero si que es cierto que alguien le preguntó "por qué no publicaba también ese final", a lo que el respondió: - que lo daba por imposible.
La semana que viene en Blogochenta también introduciremos una entrada sobre Óscar y su periplo ochentero por el I.Felix Rodríguez de la Fuente, la revista calamar, y su tertulia en el Hostal "El castellano". Creo que está quedando muy "chulo", esperamos que te guste y, FELIZ AÑO.
En efecto. El giro ha sido muy sopesado por el autor. Como él lo ha declarado en varias ocasiones, puedo contarlo aquí: en principio, el proyecto inicial correspondía a un solo volumen que incluía las dos primeras partes de la actual trilogía. En un primer momento, el tercer volumen contaría la última noche de los protagonistas de la trama argumental, pero, en Roma, decidió girarlo. En mi opinión, con acierto. Convierte así lo que iba a ser una continuación del argumento en un guiño cervantino de gran interés teórico y de excelente premio al lector, a pesar de que algunos se queden frustrados con la continuación de la expedición. Pero, en efecto, ese final ya estaba contado desde un nivel histórico y podía ser demasiado fácil técnicamente.
En lo que cuentas de vuestro proyecto, lo espero, seguro que os quedará bien.
Un saludo.
Lo siento pero esto no es un giro argumental, ni nadatiene que ver con la historia de la trilogiia, es como querer hacer ver que el chorizo es una fruta.Como novela puede ser todo lo buena que se quiera, y de hecho para mi Oscar es un gran escritor,pero esto me parece una tomadura de pelo.Yo me siento engañado y defraudad. Un saludo a todos.
ANÓNIMO: demasiada indignación para no firmar con nombre.
Hay muchas formas de entender una trilogía. Si echas un vistazo a la Historia de la Literatura no todas son trilogías argumentales, como pareces demandar. Muchas no son más que temáticas, a partir de un mismo tratamiento simbólico. En este caso Óscar ha optado por una trilogía en la que se aborda la perspectiva del individuo y la historia. Comprendo la frustración de muchos lectores, acostumbrados a las meras continuaciones argumentales (las más fáciles, a mi juicio), pero la literatura también es otras cosas. Óscar ha optado por el camino más difícil. Y el más literario.
Además, esta tercera novela es la mejor de todas.
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