lunes, 12 de febrero de 2007

Vivir un poco peor

Deberíamos vivir un poco peor. Prescindir de los vehículos particulares cuando no son absolutamente necesarios -es decir, casi siempre-, de la exagerada calefacción que te permite ir medio desnudo por casa cuando fuera arrecia el invierno, del aire acondicionado que marca temperaturas polares en plena canícula, de los viajes turísticos sin sentido, de tantos gastos en cosas que no nos aportan nada.
Nos irritan los inmigrantes aun cuando ya no podamos ni siquiera decir que vienen a quitarnos nuestros trabajos, desoímos los avisos de los expertos sobre los efectos destructivos que nuestra manera de concebir la civilización tiene sobre el planeta.
Y todos sabemos la forma de solucionar gran parte de estas cuestiones: vivir un poco peor. Sin demagogias. Quizá podamos ganar vida para todos.

1 comentario:

jg riobò dijo...

Totalmente de acuerdo.
Resume kilos y kilos de información alarmista con lo sencillo que es darse cuenta.