viernes, 31 de marzo de 2023

Mirarse en un espejo y no verse

 


- Hace demasiado que no hablas de actualidad.
- Podemos estar buceando dentro de nosotros mismos unos días y al regresar todo estará igual para volver a hablar del estado de la cuestión. Por desgracia siempre hay una guerra en Crimea. El mapa entero del mundo está lleno de Crimeas. Todas iguales. Todas con los mismos muertos, aunque tengan diferentes uniformes o sean paisanos, aunque sean ortodoxos o católicos, cristianos o musulmanes, altos o bajos, rusos o ucranianos, hombres o mujeres, adultos o niños, zurdos o diestros, todos nuestros porque los muertos nunca son de ellos.

(Escribí este texto el 2 de marzo de 2014.)

Algunos cargan con su trampantojo hasta cuando están solos.

Una historia en la que alguien busca una puerta de salida y encuentra dos. En ambas muere. No puede renunciar a abrir alguna de ellas, es la vida.

Es tiempo ya de duraznos enloquecidos de amor. Abajo, en el valle, han florecido en gradación del blanco al rosa. En verano comeremos el fruto de su delirio. No hay poema que lo iguale.

Mirarse en un espejo y no verse. Estás ahí, sí, pero no eres tú.

9 comentarios:

whatgoesaround (अनत्ता 光 心) dijo...

Enseguida me ha llamado la atención el título. Qué fuerte, porque hace un rato le he comentado a Ana (OPINAR EN ESTOS TIEMPOS) lo siguiente:
"No tengo nada muy específico que decir o comentar, o al menos eso he pensado. Esos "tengo que" hay que desterrarlos, efectivamente. Esas autoexigencias, obligaciones, imposiciones, convencionalismos... En el fondo todo ello es esa imagen de nosotros/as mismos/a, ya no solo ante la sociedad o nuestros seres próximos o familiares, sino ante nosotros en la intimidad del espejo. Un rol, el personaje.
Me miro al espejo y ¿a quién veo? A nadie. No hay nadie, solo Inteligencia, Conciencia observando y experimentando. Ah, sí, veo un cuerpo, a un señor, ja ja ja.".
Pues no sé si lo decías en el mismo sentido, pero me suena que sí, me parece muy evidente, aunque hay otra interpretación: "ya no nos reconocemos a nosotros mismos".
Saludos.

Fackel dijo...

En efecto, no hay poema que iguale la armonía y la belleza de un fruto natural. Tal vez los poemas se pretenden a imagen y semejanza de los frutos y algunos también los saboreamos cuando están en su sazón.

Emilio Manuel dijo...

Has olvidado a unos, pero es normal, son negros, pelean en un continente que no existe, las guerras entre soldados negros en Africa no son guerras, son unos que se matan entre ellos, no molestan a nadie, es el quinto mundo.
En cuanto a lo del espejo, ¡¡joder!!, hace ya tiempo que no conozco la cara que refleja.

Myriam dijo...

Muy preocupante.

Besos

Sor Austringiliana dijo...

Hemos perdido la esperanza de un mundo sin Crimeas.

Sor Austringiliana dijo...

Mirarse en el espejo y contemplar un abismo.

José A. García dijo...

Mirarse y no reconocerse.

Saludos,
J.

Luis Antonio dijo...

Lamentablemente, siempre hay una guerra. Mientras no nos afecte directamente, dicen otros...

São dijo...

Tens razão . tristemente as guerra continuam existindo e causando sofrimento e mortes....

Grande abraço com voto de feliz Semana Santa, amigo mio.