Como anuncié hace un año, se hace larga la espera de higos a brevas pero ya están aquí las brevas y las de este año llegan llenas de carne y piel fina, amorosas al tacto y jugosas al morderlas. Muerdo estas de hoy mismo y se me llena la boca de verano en este año que se me han descolocado todas las estaciones. Lo hago lentamente, sin retirar siquiera la piel, dejando que su carne se haga pulpa. Cierro los ojos: al morder la carne de forma amorosa siempre hay que cerrar los ojos.
5 comentarios:
Es más corto el trayecto de brevas a higos...
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Para disfrutar, hay que concentrarse.
dulzuras
¡Delicioso!
Besos
El cambio climático acaba con todo y sobre todo con el ritmo plácido de las estaciones y sus protocolos frutales
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