Louis Armstrong está en el cielo con Ella Fitzgerald mientras te acercas y pones tu mano en mi pecho y me dices, en voz muy baja que me quieres. Heaven, i'm in heaven. El cielo en una verbena de domingo junto al puerto. Quizá todo debería ser así, una pareja girando en una pista de baile mientras Louis y Ella están en el cielo y a veces él solo toca la trompeta y los pies apenas rozan el suelo mientras el mundo queda al margen. Al menos durante unos minutos en los que todo parece perfecto y nada más existe que tu mejilla junto a mi oído. Y ya no hay invierno.
6 comentarios:
Buenas noches, profesor Ojeda:
Y como todo lo verdaderamente valioso, sentimiento compartido y gratis.
Saludos
Precioso retrato de interior.
No se quién de los dos me gusta más si Louis o Ella, pero lo que sí quiero es que se pare el tiempo tal y como nos lo cuentas y que ya no haya invierno...
Besos.
Y los ángeles se lo estarán pasando pipa con el son y el cante de la pareja.
Saludos
Sí, y Anita O'Day y, más joven, Amy Winehouse. Gente con talento, con ese talento.
Un abrazo
Pues que siga el baile y viva la adelantada primavera al calor de los sentimientos que se hacen presentes en la proximidad de dos cuerpos que bailan... pues nada, que haya muchas verbenas y que siga el baile y la primavera...
Abrazo
Sentir...
es lo que nos moviliza, en definitiva.
Precioso Pedro,
Ali
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