viernes, 6 de junio de 2014

Llenar de cuello la boca


Llenar de cuello la boca,
dientes si puede ser para alcanzarte,
beso a beso,
el misterio inaudito de tu aroma.

Morder con precisión
el mapa de tu vida hasta llegar
en carne a los presentes, pecho a pecho,
sin pretender mañana ni añorar
errores en el torrente de risa
de tu cama. Buscar la geografía
más dúctil de tu cuerpo
para saber que importa este momento.
Porque hoy no hay nada más
que tus ojos de labios
y mis dientes precisos
que recorren tus pechos,
la curva de sirena de tu sombra
y tu cuello entregado, amor, de uñas
en mi espalda.
© Pedro Ojeda Escudero

13 comentarios:

Manolo dijo...

Buena estocada al inicio de este duelo.

impersonem dijo...

Instintos haciendo instantes donde el roce de la pasión hace saltar chispas... Eros también inspira poesía...

Abrazo.

Marina dijo...

Ummmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm

Ummmmmmmmmmmmmmmmmmm

Ummmmmmmmmmmmmmm

Ummmmmmmmmm

Ummmmmm

Ummm

Um

No sé, no sé

;)

Los besos van igualmente.

:) Y la sonrisa tb.

Marina dijo...

Recuerda, corazón. Las Brujas... somos lo que somos ¿A qué ocultarlo?

Menos mal que te quiero... que si no... jajajajajajajaaja.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Coincido con el comentario primero: es una buena estocada para el inicio del que promete ser un gran "duelo"
=)

mojadopapel dijo...

Uauuuuu!...... anunciaste una entrada pasional y el que avisa no es traidor....se puede seducir con las palabras.

Myriam dijo...

¡hmmmmm... vampiro total! chupa, chupa, que la gata araña...

lichazul dijo...

precioso poema para coronar la semana
el sexo con amor es lo más hermoso y lo más saludable

buen fin de semana Pedro
bss

Joselu dijo...

Está bien.

DORCA´S LIBRARY dijo...

Hay que tener mucha pasión dentro para desnudarse como tú lo haces en este poema.
Lo "correcto" sería hacer un análisis profundo sobre el estilo, el lenguaje y la técnica utilizada en la composición de este poema. Pero, la verdad, nada de eso ocupa mi mente después de haberlo leído.
Ahora mismo lo único que tengo es un doble sentimiento: admiración hacia tí como poeta, y una envidia corrosiva de la persona que te lo ha inspirado.
Saludos, Pedro.

pancho dijo...


Este atragantón de cuello se me da un aire a este duelo de mordiscos que nos enseñaste:
Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,/
tigre y paloma, sobre tu cintura/
en duelo de mordiscos y azucenas.
Hay verdad en el poema.
Un abrazo

Campurriana dijo...

Pedro...por suerte, lo he comprendido perfectamente. Significa, digo yo, que he vivido.

Alimontero dijo...

Pedro querido....wouwwwwwwwww...vamos por ello!!
felicidades!!

besos,

Ali