Sucede que los bárbaros están dentro. Las nuevas formas de vida que protagonizarán el mundo tras la salida de la crisis, ya estan aquí y han sido miradas como valores positivos desde hace tiempo, pero en una especie de estado ilusorio parecieron poder combinar con las formas tradicionales de vida del mundo latino
España fue el ejemplo, una especie de estado milagroso por el cual se podría ser alemán sin dejar de ser español. Todo esa ilusión -una verdadera cultura de parque temático que cegó a la población entera- funcionó mientras se movió el dinero sin que nada pareciera poder frenar una espiral de crecimiento que ya se había ensayado en otros lugares con fracaso final. En tierra de nadie, los valores tradicionales del mundo latino abrazaron el culto del dinero y el progreso material sin que se mejorara ni la productividad que puede mantener la espiral de crecimiento ni el control de los gastos ni el control de la corrupción moral, financiera y política que trajo el abono de la cultura basada en el ladrillo. Y esto sucedió por inundación, puesto que anegó por igual las más altas instancias de las administraciones públicas y la economía familiar más humilde, cada uno con su parte de responsabilidad en el asunto. El resultado es el que vemos, una sociedad que no puede mantener para todos -he aquí la clave del futuro- el tipo de vida por el que ha optado puesto que el nivel de consumo es superior al de la producción. Además, quiso ser halagada con la fantasía de la pulsera del todo gratis, sin pensar que al final la cuenta repercutía en la libreta de ahorros. De ahí que las promociones de políticos de los últimos veinte años -que son los mismos, paradójicamente, que ahora quieren protagonizar la regeneración- se dedicaran a un desenfranado nivel de gastos para satisfacer esa apetencia de vida fácil de los ciudadanos. Toda una cadena de retroalimentación: los ciudadanos demandaban esos gastos y los políticos se los daban sin que ninguno de los lados se preguntara de dónde salía realmente el dinero y si aquello era sostenible. Nadie hizo caso de las pocas voces que advirtieron de la sinrazón y desde los partidos políticos se apartó a los disidentes. Significativamente, las comunidades autónomas y ciudades que eran puestas como ejemplo de modernidad hace una década son las que encabezan ahora las listas de endeudamiento. Tozudamente, sus ciudadanos se han empeñado en votar a quien les conducía hacia la situación actual.
La salida de la crisis ya no estará en una situación intermedia: no se podrá ser alemán sin dejar de ser español, al menos tal y como ha venido ocurriendo hasta ahora. Y de la resolución a este conflicto dependerá la posición de España en el nuevo contexto mundial que surja dentro de unos años.
16 comentarios:
Y de la resolución a este conflicto dependerá la posición de España... ¿es posible que este conflicto tenga solución algún día? ¿No estaremos en el camino del no retorno? :(
Cariñosos saludos
lo mejor es declararse Terrícola
y asunto terminado
;)
acá en Chile, hay tanta mezcla de etnias europeas conviviendo
que da lo mismo , al final eres chileno antes que toó
besitos
por lo demás, originariamente todos venimos de África
así que el resto es mera cirscunstancia
Es epoca de revisión...a veces hay que pararse un poco y meditar esta situación para posicionarse y sacar consecuencia y aprendizaje de todo ello.
complicado,muy complicado profesor.
Y tengo la sospecha que va a ir a mas. osea "in crescendo"
¿Sabes algo de música? Pues eso.
Buenos dias.
Pero ellos, los alemanes y los otros del norte, son luteranos y tienen muy asumido que la ostentación no es un buen consejo......además la socialdemocracia, o para decirlo asi, los "socialistas", nos han enseñado la parte más oculta de la "ostentación", ya que si no recuerdo mal fué "carlos solchaga", que digo: haceros ricos que todo esta aqui.
Claro que Aznar y sus chicos, hicieron de este país llamado "España", el mayor despilfarro de Europa.
Der Spiegel asombrado relata una historia que ilustra perfectamente lo escandaloso de nuestra situación. Se refería a la Alcaldesa de Madrid, cuyo único “mérito” es ser la señora de Aznar.
El semanario no daba crédito, “el ayuntamiento es un palacio cuya remodelación ha costado 500 millones de euros!!!”, “su despacho es mayor que el del Presidente de los Estados Unidos”, tiene “un mayordomo cuya única función es servirla el café”, y 260 asesores personales y altos cargos que cobran de media 60.000 euros.
El Ayuntamiento posee, además, 267 coches oficiales de uso personal, más que todas la capitales de la eurozona juntas. Es una dministración sin medida, la ostentación suntuaria más indecente en medio de una penuria extrema, donde Cáritas ha tenido que atender a mas de un millón de personas y un 26% de los niños vive por debajo del umbral de la pobreza. Y el pais en situación de rescate. ¿Cómo se atreve a ir a misa y a salir a la calle? Y este es el problema, porque no es la excepción, es la regla.
(de Roberto Centeno)
Sería muy conveniente que los políticos que tienen que conducir la regeneración política española hubiesen cotizado antes a la Seguridad Social. Y que los ciudadanos nos comportásemos como tal.
Efectivamente, nada es gratis, todo se paga.
De la misma forma que en España existen regiones ricas y regiones pobres, en gran parte debido al desplazamiento de la población activa de unos lugares a otros huyendo de la pobreza. Similar diferencia existe entre los países ricos del norte y los pobres del sur. La Unión europea ha permitido una disminución de las diferencias con el reparto de los fondos de cohesión, que aunque muchos califican del chocolate del loro porque apenas supone el 1% del PIB, nadie los ha rechazado y bien que nos acordaremos de ellos cuando desaparezcan, sobre todo desde las regiones por encima de los índices de la media europea.
La gente empezará a creer en los dirigentes cuando observe que las organizaciones a las que representan dejan de ser oficinas de colocación de afines y nidos de corrupción. Es decir; que se vuelva a instalar la igualdad de oportunidades para todos los ciudadanos, paso previo a una solidaridad transversal más fructífera de unas clases sociales a otras, entre regiones y países.
Me pongo a pensar en lo que acabo de leer y se me ponen los pelos como escarpias.
Definitivamente nada es gratis, a la vista esta, el precio que ahora mismo estamos pagando.
Rita.
Lo más trsite es que todos sabiamos que nada es gratis...pero hicimos oidos sordos...
Te dejo este manojo de letras en el umbral de la esperanza,
para que te saluden con la voz del trovador
acompañando tus anhelos, que vuelan hacia las estrellas
en busca de quimeras…
¡¡Un feliz fin de semana
Alimentando satisfacciones!!
Atte.
María Del Carmen
Yo es que me pongo enferma, no lo puedo remediar!
:(
Genial el título, tienes el poder de la síntesis.
¡Ay, qué tiempos, Pedro!
Un abrazo
Poder, todo se puede...
pero ya estamos viendo a qué precio.
Besos, Pedro.
Un certero análisis, pero tampoco parece que es tan idílico ser alemán. Todo tiene su tiempo y veremos dónde acaba esta crisis, porque supongo tarde o temprano tendrá un final.
A veces pienso que hay un "alguien" con un botón que aprieta y dice: ahora vais a ser ricos, después se cansa y dice: ahora vais a ser pobres y así sucede
Besos
Luz
Cuando veo a España en relación a Alemania, solo veo prima. Una diferencia abismal entre el interés que le exigen a uno y otro país. Pero nosotros pagamos, y no necesito un telescopio para verlo.
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