martes, 22 de mayo de 2012

Problemas de la educación es España. Reflexiones al calor de la huelga general de la enseñanza

Hoy, en España, se ha vivido la primera huelga en la enseñanza pública convocada para todos los niveles, desde la educación infantil hasta la universitaria, en protesta por los recientes recortes decididos por el Gobierno del Partido Popular. Independientemente de la guerra de cifras habitual y de la acostumbrada y monótona batalla de consignas y valoraciones establecidas con anterioridad a los resultados en la que se hurta el diálogo fructífero, caben algunas reflexiones.

Es evidente que en España se ha mejorado mucho la educación pública en las últimas décadas. En contra de algunos fáciles reproches que se suelen usar para justificar determinados cambios legislativos, en innegable que el sector público dedicado a la enseñanza ha absorbido una creciente demanda y ha dado soluciones a cuestiones que se presentaron con poco tiempo de reacción (casi siempre debido a la falta de previsión de los políticos que tomaban las decisiones), como la numerosa presencia de hijos de inmigrantes que vinieron en la época de crecimiento económico, muchos de ellos desconocedores del español no solo como instrumento de aprendizaje sino casi como herramienta de comunicación paras las cuestiones básicas. Se ha invertido dinero especialmente en la construcción de edificios, en su dotación, en la convocatoria de oposiciones para profesores de todos los niveles, en la informatización de las aulas, etc. La Universidades públicas españolas han visto levantar campus nuevos con cientos de edificios y se han llenado de estudiantes en un porcentaje muy elevado con respecto a países similares. Es cierto que la mayor parte de esta inversión en enseñanza se ha ido hacia el lado más habitual en la España de los últimos años: el ladrillo. Pero estos edificios están en uso y, puestos a cuestionar, siempre lo haré antes la oportunidad de un aeropuerto sin aviones o con escasos vuelos, que el hecho de que se haya edificiado un instituto de enseñanza media. También es cierto que gran parte de la labor se ha dejado en manos de la vocación del profesorado, al que no se le ha formado suficientemente para las nuevas realidades ni se le ha apoyado en su trabajo como merece.

Por otra parte, es innegable también uno de los éxitos del sistema de educación pública española de las últimas décadas: se consiguió una educación universal y gratuita de tal manera que se puede afirmar que España cualquier persona podía estudiar, sin grandes esfuerzos económicos, todo el recorrido que va desde la educación primaria a la universitaria.

Evidentemente, están los lados con menos luces. La incompetencia, el dogmatismo y el electoralismo ha hecho que nunca se haya podido llegar a un gran pacto por la educación pública, con lo que se ha vivido una continua noria de cambios legislativos que han alterado en demasía los claustros y, especialmente, han puesto el foco de la atención pública en unos pocos aspectos y no en lo esencial. Curiosamente, los docentes sabemos que el camino iba siempre, estructuralmente, en una única dirección y que eran los matices -a veces muy importantes puesto que afectaban a la definición ideológica del estado español- y la apuesta en los presupuestos del estado, lo que cambiaban. Es singular que, incluso en las épocas de mayor crecimiento económico del país, no se haya invertido tanto como los países a los que imitábamos en lo que se hacía dentro de esos edificios que se habían construido.

Si nuestros políticos no han sabido coordinarse, la sociedad también es culpable de no haber sabido aprovechar, suficientemente estas posibilidades de la educación pública española puesto que los resultados medidos con parámetros internacionales no siempre dejan España en una buena posición. Nuestros políticos eran el reflejo de nuestra sociedad: a pocos importaba de verdad la educación más que como una forma de obtener un título. España ha trabajado, en las épocas de bonanza, en el descrédito de la figura del profesor, al que ni se le ha pagado como merece ni se le ha reconocido su trabajo; se ha profundizado en la falta de esfuerzo para obtener resultados académicos; se ha aceptado sin escándalo una cifra de fracaso escolar y de abandono de los estudios que debería hacernos sonrojar; no se ha aumentado el presupuesto en educación en consonancia con lo que debe representar este sector en un país, etc.

En España nunca se ha terminado de desarrollar completamente un cambio legislativo sobre la educación y a nadie le ha importado.

En épocas de crisis un país se mide por la apuesta en su educación pública, por el respeto a la labor del docente y su consideración social y profesional y por la dedicación del estudiante a su trabajo primero, los estudios. Todo esto se mide, en primer lugar, desde los presupuestos generales del Estado y las medidas que se tomen a través de la legislación. Las primera medidas tomadas por el Gobierno del Partido Popular, en este sentido, van en contra de la dirección correcta y se deben, exclusivamente, a razones económicas y no estructurales. Ni siquiera es seguro que garanticen un ahorro económico como el buscado más que en las plantillas de profesorado, que se verán recortadas de forma brusca.

Un país que no cuida la educación pública es un país sin futuro.

29 comentarios:

Julita Fernández dijo...

Siento verdadera tristeza al ver cómo se trata a la Educación Pública.
Estoy triste cuando oigo a un ministro decir que los hijos de familias con pocos recursos no podrán ir a la Universidad porque se gastan el dinero en otras cosas.
Estoy triste al ver cómo se planifican ahorros y recortes a costa de la reducción de plantillas, del aumento del número de alumnos por aula.
Estoy triste por tantas cosas... que se haría muy pesado leer el comentario.
¡Hoy, todos me entendéis! Soy maestra en activo.

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, Pedro. Yo no entiendo que en el resto de países, como EEUU, Alemania, Francia o Inglaterra se vaya a invertir en la educación, para crear nuevos puestos para profesores, para ayudar a la investigación y aquí se haga todo lo contrario...

Pero como bien dijo el señor griego "¿No queríais cambio? Pues toma cambio!"

lichazul dijo...

qué terrible realidad!!!
esto es desastroso Pedro, tantos logros conseguidos, tantos peldaños construidos para que unos pocos especuladores quieran derribarlos , me parece monstruoso...la banca y sus esbirros del poder nos tienen en el filo

lamentablemente esto es mundial,acá también estamos en marchas y reivindicaciones en educación , en salud, en equidad, en trabajo, en muchas cosas que pendientes están.

Besos Pedro, y mucha energía para los tiempos que vendrán, sin duda serán turbulentos

dafd dijo...

Es verdad. Más allá de la actual coyuntura, los políticos no han trabajado por el consenso. A ese constante mareo de legislaciones, se suman ahora los recortes. Qué será lo que obtengamos.

Campurriana dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Campurriana dijo...

Pedro, quiero pensar que se seguirán pagando becas a los estudiantes buenos. Creo que eso sí se mantiene. También quiero pensar que se pensará en otras salidas que a mí me parecen interesantes. Por ejemplo, el préstamo a devolver por los estudiantes cuando trabajen...es el utilizado en algunas universidades americanas y parece que funciona...pero claro, tal y como está el futuro del mercado laboral por estos lares a lo mejor se nos fastidia el invento...

También quiero pensar que la Universidad mirará más hacia la empresa. ¿Por qué demonios no se acerca ésta a la empresa para ofrecer la formación necesaria y REAL impartida por gente de empresa?...

Yo he sido estudiante universitaria y he sufrido miles de alejamientos de esa realidad que no conocemos ni un ápice al salir de estos edificios llenos de teorías inútiles en muchas ocasiones...

Critico al 85% de los profesores que he tenido y, sobre todo, al sistema que me ha formado. No quiero ser dura pero deja mucho que desear la organización de todo este mundillo muchas veces lleno de teóricos que no han pisado la calle, el mercado.

También quisiera añadir, aunque a día de hoy ya lo sabemos todos, que no todo es ser universitario en esta vida. No todo el mundo vale para lo mismo y todo tipo de formación aporta algo a la sociedad o debiera aportarlo si queremos adelantar algo. En mi época la Formación Profesional era totalmente menospreciada, por poner un ejemplo....Hoy en día, veo que a los compañeros que optaron por esta alternativa en su momento no les va tan mal...

¿Qué salidas tendrán unas y otras opciones formativas en el futuro?...
¿En qué sectores quiere invertir España? ¿por qué sectores quieren nuestros maravillosos gobernantes apostar?...
Si se dedicasen a pensar en estas cosas y no en tanto recorte, mejor nos iría.

Recortar sabemos todos. Recortar es muy fácil. Necesitamos algo más...

Spaghetti dijo...

Es un tema duro para debatir por escrito.
Quizás haya cambiado mucho el profesorado, porque era unánime el sentimiento de los estudiantes sobre la incompetencia general de los profesores que salvando raras excepciones impartía las clases en la universidad de mis tiempos, pasaron 20 años y regresé a la universidad y quedé sorprendido de ver que seguían dando clases un gran número de aquellos incompetentes de entonces...si dices que los presupuestos se fueron en ladrillo en vez de en formar y actualizar al profesorado ... la universidad no podrá mejorar con semejante lastre.

Isabel Huete dijo...

Comparto totalmente todas esas luces y sombras que señalas, Pedro. Se ha mejorado mucho, se han abierto las aulas a toda la ciudadanía, se han generalizado las posibilidades de estudiar, se ha encauzado el camino de libertad que da el conocimiento. Frente a ello, han habido errores de calado como el no haber previsto muchas situaciones ni una vez se han hecho ineludibles se les ha puesto el remedio que requerían con el interés necesario. El presupuesto nunca ha cubierto todas las necesidades ni se ha hecho un seguimiento de su aplicación y, lo que es peor, de los niveles de calidad de la enseñanza que se imparte. Todo ha quedado en general a la decisión de los directores de los centros que han sido los que han marcado las líneas de trabajo. Cada Autonomía, además, ha hecho de la educación un justificante político e ideológico, dejando en segundo lugar el cometido principal que es impartir una enseñanza en las mejores condiciones de calidad y eficiencia. La desmotivación del profesorado por la falta de reconocimiento, medios y de incentivos no ha contribuido tampoco a mejorar las cosas. Pero nada de todo esto, que son las sombras, se va a corregir aumentando los ratios de alumnos y las horas lectivas. Antes podía haber deficiencias pero, se hizo un enorme esfuerzo en mejorar la atención a los alumnos con dificultades, la dedicación que requerían. Ahora eso desaparecerá porque será imposible. El único ahorro eficaz va a ser el de la merma del conocimiento.

Señor De la Vega dijo...

Mi querido Señor Ojeda,

Yo no soy maestro, ¡qué gran responsabilidad! y ¡qué orgullo sería serlo y bueno!

Tampoco soy alumno, aunque a veces lo intenté, ni siquiera aprendiz, para eso debe existir la premisa de desear ganarse la maestría, mucha vanidad la mía, para iniciación tan humilde.

Sin embargo, hoy estuve manifestándome una vez más en Madrid con la marea Verde; fuimos muchos (todavía no todos, nunca seremos todas)

Mientras los sindicatos iniciaban su discurso ordenado por siglas en orden alfabético, yo seguí el camino de Gran Vía, luego a Génova, después vuelta por Fuencarral con los estudiantes (podrían ser mis hijos o yo su padre) y a la altura de la Calle de Montera (la calle de las prostitutas) se realizó una sentada, buena parada en una educación prostituida al capital.

Tuvimos policía y sus UIP, calentando la protesta, y los jóvenes forzándola (pacíficamente), al sentirse forzados (con violencia), y mucha consigna coreada y manos alzadas y gritos, frente a eso (peligrosísimo) más lecheras y porras y carreras y 2 detenciones, luego en Sol cientos de policías e inicio de identificación y multas (nueva estrategia administrativa de hasta 30.000 €).

Todo acabó bien, a pesar de las presiones del miedo, del acoso al que grita INJUSTO, de la criminalización del que no se resigna a acatar lo ilegítimo.

Es un placer dialogar con los estudiantes de la calle, tienen las cosas claras, la mente revolucionada y el corazón poético; algunos tenían examen hoy; espero que no suspendan, la matrícula podría ser mucho más cara y quitarles la beca...

Espero que no se rindan nunca, la matrícula podría ser la exclusión de muchos y la beca una entelequía del presente.

No temo por la Educación, confío en una juventud que demostrará una excelencia prodigiosa por el continuo aprendizaje; ese modelo ya lo palpo lo siento; el conocimiento inundará sus cerebros y sus dificultades serán acicate, incluso imagino un nuevo siglo de Oro de las letras y las ciencias.

No ayudará en ello el Sistema y el gobierno de este País, es más, serán un lastre absolutamente prescindible; y todavía harán falta muchos años para una regeneración democrática (la endogamia política es como la universitaria).

Temo la exclusión, el hambre, la precariedad vital, la enfermedad si eres clase humilde, temo la incomprensión, la insolidaridad, el conformismo y la dejadez de una clase acomodada que se vio superada por los acontecimientos de su propia decadencia y que está absorta en el pasado, reclamando Circo y que otros les devuelvan su burbuja.

Lo público no es un derecho, lo público es una opción que se lucha,´si creemos en ello. El futuro nos pedirá posicionarnos muchas más veces en esa lucha; ojalá cada día seamos más, aunque nunca seamos todas.

Lo ideal, desde mi posición casi literaria, sería una huelga indefinida y que no acabase este curso 2011-2012, eso marcaría la delgada línea roja.

Suyo, Z+-----

virgi dijo...

Ahora mismo escribo después de desvelarme pensando en la mejor forma de explicarles a mi clase de 6º de primaria las épocas históricas de forma que lo vean claro y no se formen un lío. Y así ha sido desde hace décadas que doy clase: una dedicación exclusiva a mi trabajo, siempre en pos de un mejor aprendizaje.
Y ya ves, vamos a retroceder ahora casi a los años en que empecé, cuando precisamente, y eso deberían de tenerlo claro los gobernantes, la enseñanza es el futuro de un país.

Como ya dijo alguien más arriba, en un comentario no cabe todo lo que da de si esta entrada.
Un abrazo, Pedro.

Txema dijo...

Creo que en realidad es un problema de filosofía política. La derecha ve con desconfianza ese derecho porque no cree en la necesidad de que llegue a todo el mundo, aunque no lo quiere reconocer, hace todo lo posible para dificultar el acceso generalizado.

saludos

Juan Luis Garcia dijo...

Una educación de calidad es la única esperanza de que nuestros hijos tengan unas armas con las que defenderse del futuro que les vamos a dejar.

Abejita de la Vega dijo...

Desmantelamiento de lo público, entrega a manos privadas, el liberalismo salvaje lleva años con esto; pero ahora pueden hacer lo que no se atrevieron.

Una maestra

José Núñez de Cela dijo...

De estas medidas nos arrepentiremos todos, antes de lo que pensamos.
Estoy absolutamente de acuerdo en todo cuanto planteas.
Yo añadiría un detalle más. Aunque no esté en el sistema público (reglado) de educación, también se han recortado (prácticamente extinguido) las políticas activas de empleo, en las que se incluyen los proyectos de formación para el empleo.

Atención Pregunta: ¿Cómo se puede mejorar el empleo restringiendo las medidas de apoyo al empleo?
De la misma forma, ¿cómo puede prosperar un país (o una región, pueblo, ...) rebajando su nivel educativo?
Son preguntas sin respuesta que sólo pensarlas o escribirlas, ya duelen.

Bertha dijo...

Cuando un profesor opta por una plaza tiene que opositar o presentar unos datos académicos etc.Sea para la pública, la privada, la concertada...Cito las tres para que no me digan que soy una posesa indignada...

-Que se le exige a un político para ejercer su ministerio?.Ya esta bien de tantos mitos y mentiras...

Y se suele decir que el que no quiere caldo se le da en dos tazas.-Esto estaría bien aplicarselo a los políticos. Prohibirles que sus servicios sean privados y personalizados; entonces la reacción no se haría esperar.Cuando vean lo que les aprieta la horma del zapato(sanidad y educación).Que comiencen a ser un ejemplo con sus austeridades para que sean un modelo a seguir.

Saludos Pedro.

orma del zapato(sanidad y educación)

matrioska_verde dijo...

He leído tu entrada y todos los comentarios con lo cual poco me queda por decir que no hayan expresado tus otros comentaristas - que conocen la situación algunos de primera mano- mejor que yo.

La eduación siempre es el futuro, en todos los ámbitos, en el seno de la familia, en la escuela, luego en la universidad, en el trabajo.

La educación es construcción.

biquiños,

Asun dijo...

Y lo peor de todo es que tienen la sartén por el mango y una profunda sordera que les impide hacer caso al clamor popular.
Esto no ha hecho más que empezar. Tendremos que seguir luchando.

Besos

Drago dijo...

La táctica de echar la culpa al profesorado siempre ha funcionado bien para todos los gobiernos cuando lo que quieren es recortar y sacar dinero. El profesorado tiene una imagen social tan deteriorada que le ha dejado sin margen para ser aceptada su reivindicación de una enseñanza púbica de calidad.
No es un problema de profesorado es un problema social, empezando por los políticos y de quienes votan a esos políticos.

Montserrat Sala dijo...

Hola profesor: ante las opiniones, tan acertadas de tus comentaristas, seria, presunción por mi parte, intentar siquiera, dar una opinión,
mejor que las que se han escrito y con las que estoy completamente de acuerdo.También suscribo, por entero tus razones, que como siempre, muy bien hiladas.
Solo una cosa quisiera apostillar: Sin educación, no hay verdadero progreso. La incultura solo genera miseria, y falsas espectativas de
bien estar.
Te mando un abrazo y mi admiración.

Myriam dijo...

¡Que triste!. Imagino como tú y el resto de docentes se sienten cuando en lugar de que el Estado invierta en Educación -dignificando tanto los todos los Centros Públicos como la profesión del enseñante- hace todo lo contrario.

Como bien dices, un país que no cuida la educación pública es un país sin futuro.

La "crisis" no es ninguna excusa válida, porque si hay otras cosas que pueden recortase.

Besos

El Gaucho Santillán dijo...

Un pueblo sin educaciòn, es mas manejable.

Pasa por ahì.


(Entre nosotros: escuchè que los politicos españoles han desmentido lo del "corralito". Bueno, Don Ojeda Escudero, le sugiero fuertemente que vaya corriendo al banco y meta sus ahorros bajo el colchon!! Yo todavìa tengo bonos del 2001. Por suerte, vienen enrrollados y con vaselina. Asì resulta fàcil metèrselos en la parte posterior!)

Un abrazo.

Luis Antonio dijo...

Si los políticos reflejan a la sociedad y nosotros formamos parte de la misma, todos somos CULPABLES en mayor o menor medida...

Nos lo tendremos que mirar...

Isabel dijo...

Hay que hacer una fuerte defensa de la enseñanza pública e igualmente de la sanidad porque son dos pilares muy necesarios e importantes para la sociedad. También creo que profesores y médicos son dos profesiones que tienen que ser
muy vocacionales. No creo en eso que se insiste en decir que muchos profesores están desmotivados porque no se les reconoce su labor. Un buen profesor siempre es reconocido por todos, pero para ello solo hace falta que le guste mucho su profesión y ponga interés en ello. Isabel.

Campurriana dijo...

Un buen profesor siempre es reconocido por todos, pero para ello solo hace falta que le guste mucho su profesión y ponga interés en ello.

Totalmente de acuerdo, Isabel.

amelche dijo...

Mi bisabuela no sabía leer ni escribir. Mis abuelos, apenas "las cuatro reglas" y algo de leer y escribir. Mis padres se sacaron el graduado y yo fui la primera de la familia en tener una carrera universitaria. Si no hubiera sido por la eduación pública no lo habría podido conseguir. Y por eso hice huelga ayer, ahora que trabajo en la educación pública y le doy a la vida lo que la vida me dio.

Lo de los préstamos como en EEUU y en GB, que alguien mencionaba, creo que no deberíamos consentirlo nunca en este país. Bastante hipotecados estamos ya toda la vida con préstamos de todo tipo: para vivir en una casa digna, para tener coche, para tener electrodomésticos, etc. como para encima estar pagando también el resto de tu vida o una buena parte por haber ido a la universidad.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

En efecto, AMELCHE: El gran problema es el cambio cultural que supone todo esto sin que haya habido debate. Se nos ha hurtado la capacidad de decidir qué tipo de educación pretendemos en España. Si para los estudios no obligatorios debemos pedir préstamos en contra de lo que ha sucedido en las últimas décadas, con una educación gratuita en la práctica, se nos pide que pasemos en unos meses de ser españoles a ser norteamericanos. Imposible: en primer lugar, porque son diferentes culturas sociales; en segundo lugar, porque en España no existen los niveles correctores que tiene este sistema en norteamerica. ¿Dónde están los mecenazgos en España? ¿Dónde está el apoyo decidido de las instituciones a la persona de mérito?
¿De verdad queremos ese sistema? ¿Cuándo lo hemos votado?
Gracias a todos por vuestras opiniones.

Campurriana dijo...

El problema que veo yo es que en la sociedad en la que vivimos lo que no cuesta nada no vale nada. Todo tiene que tener un precio para que lo valoremos realmente. Los humanos, por suerte o por desgracia, somos así.

Yo quiero un sistema en el que todo el que vale pueda estudiar y prepararse para lo que vale. Y no todos valemos para todo.

Respecto a tus preguntas, Pedro, tienes toda la razón. Esas democracias-dictaduras...

Humberto Dib dijo...

Me duele leer esta entrada, Pedro, pues caigo en la cuenta de que estas problemáticas ya no respetan fronteras.
Te dejo un abrazo.
HD

Campurriana dijo...

¿Sabes lo que más me duele a mí, Pedro?. El despilfarro del dinero público.