La entrada del club de lectura de hoy se publicará mañana viernes.
El hambre del monstruo que nos gobierna exige sacrificios para saciarse, pero llega un momento en el que no hay nada más que darle: negarle la propia vida es una salida. Saturno devoraba a sus hijos: pero a sus hijos les hubiera bastado con no creer en la existencia de los dioses para salvarse. Sin embargo, el monstruo tiene los pies de barro porque sin nosotros no existiría. El mago de Oz gobernaba su tierra hasta que se descubrió que su aterradora voz era producto de un truco de feria. No sé cuántos más deberán dirigir el cañón del arma contra sí mismos antes de darse cuenta de que el enemigo se encuentra en otra dirección y se combate con armas de ciudadano, no sé cuántos ciudadanos más desisistirán de serlo para convertirse en súbditos ante el temor de ejercer la libertad que tienen como principio natural. No sé cuántos más deberán rebuscar en los cubos de basura mientras miramos a otro lado porque aun no nos ha tocado hacerlo y nos parece imposible que llegue nuestro turno. ¿Nos pegaremos, entonces, un tiro uno a uno hasta despoblar la tierra y matar de inanición a Saturno o se lo pegaremos a quienes son como nosotros y con nosotros compiten al rebuscar en el mismo cubo de basura antes de afrontar los ojos de la bestia?
29 comentarios:
Querido Pedro, meu coração confrange-se ante este teu texto.
Penso que o monstro que actualmente devora a nossa vida pretende exactamente isso: levar-nos ao desespero e , evitando-lhe o trabalho, nos matarmos de angústia e impotência.
RECUSO_ME!!!!!
Temos sim é de pegar em todas as armas de cidadania e lutar sem tréguas contra esta sescumalha!!
Abrazos
Bien dicho: el monstruo que nos gobierna.
Pobre hombre el farmacéutico retitado...
Abrazo.
Antón.
A ese monstruo insaciable lo podríamos devorar sus víctimas si antes nos deshiciéramos de otro monstruo tan depredador o más que él: el miedo a perder lo poco que tenemos, el ansia de aferrarnos a nuestro pequeño mundo sin mirar a nuestro alrededor, la soberbia de creernos intocables. Si no nos deshacemos del miedo el monstruo devorador siempre lo va a tener fácil porque sabe que ese otro que llevamos dentro es su mejor aliado. Ojalá no suframos aquí la experiencia de un hombre, o mujer, quitándose la vida en las calles para reivindicar su miseria impuesta.
Que enajenación transitoria tuvo este pobre hombre, y como él: los otros anteriores que tambien se suicidaron nada más hacerse oficial lo del plan de ajustes.Como serían sus deudas,hasta llegar a tomar esta determinación tan drástica.Un farmacéutico con 77 años.-Esto esta tomando un cariz que no me gusta nada, se puede convertir en el efecto dominó.
Saludos.
Buenas noches, profesor Ojeda:
Triste, después de una vida de trabajo, encontrarse en una situación tan desesperada
El monstruo no está solo. Los ciudadanos son más en número, pero los canes que protegen al dios con los pies de barro, solo esperan un gesto para lanzarse a atacar -sin piedad- a sus hermanos. Reciben -a cambio- una mueca de sonrisa y unas viandas golosas que los arroja su benefactor, tan cruel para los demás.
Detrás de cada logro para el bien de todos, hay el sacrificio de muchos que se han rebelado contra el Saturno devorador, de cada momento.
Saludos.
Pegarse un tiro será siempre una estupidez, la última estupidez.
No voy a contribuir en la mitomanía de hacer un héroe a nadie por el hecho de suicidarse ... sino más bien por luchar durante toda la vida ... la última bala que sea para el monstruo.
Publiqué la nota de suicidio en Circo Iberia. Es un auténtico diagnóstico de la situación no solo en Grecia sino en la misma España. Ni me gustan los héroes ni los mártires. Este hombre decidió quitarse la vida y quiso justificarla. El palo, para su familia. En todo caso, descanse en paz. http://wp.me/p8sHI-Xs
muy feo lo que contaste,,,
besines pedro...
sau
Muy buen post, Pedro. Y muy buen comentario el de ISABEL HUETE, yo, como sabes, ya estoy harta de repetirme. Los ciudadanos tenemos la mejor arma en nuestras manos para vencer a la bestia pero tenemos que estar unidos, muy unidos. Es simple: no hacer la declaración de la renta (a eso de que no sea a devolver) y no pagar las subidas de los ya caros recibos de gas y luz hasta que el último corrupto y ladrón haya devuelto el último céntimo de lo robado al erario público y se liquiden los paraísos fiscales. Ahí les tendríamos contra las cuerdas. Besotes anárquicos, M.
¡Ah! y lo del pensionista griego me parece muy bien que si se ha querido quitar la vida lo hiciera delante del parlamento. Lástima que no se hubiera llevado a algunos politicastros por delante antes. No hay derecho que exista un 40% de suicidios "silenciosos" en Grecia. El que se quiera quitar la vida que lo haga públicamente para que por lo menos los "mercados" tomen nota.
No hacemos nada porque nos aferramos a la esperanza de que no nos va a tocar a nosotros. Mi esperanza es que todo esto que está pasando sirva para que abramos los ojos y tomemos conciencia del mundo en el que vivdimos y quienes mueven los hilos.
Saludos.
Digo como mi paisano: "la última bala que sea para el monstruo".
Besos, feliz viernes santo.
Ojeda. Una pregunta que urge ser respondida individual y colectivamente. No es un tema en la distancia, y aunque lo fuera pondría a juego nuestro sentido solidario, si queda. Pero aterrizará aquí antes o después. Por cierto, habrá quien diga que no hay que preocuparse. De lo último que me entero es de que el FMI se siente muy apenado y triste por el suicidio del jubilado. (Ver Público digital de hoy)
Ver también si se quiere:
http://machadoencollioure.blogspot.com.es/2012/04/el-ajusticiamiento-de-la-plaza-syntagma.html
Abrazo y fortaleza.
a lo que dices no tengo más que añadir, es gráfico, claro y demasiado triste.
biquiños,
¿Nos pegaremos, entonces, un tiro uno a uno hasta despoblar la tierra y matar de inanición a Saturno o se lo pegaremos a quienes son como nosotros y con nosotros compiten al rebuscar en el mismo cubo de basura antes de afrontar los ojos de la bestia?
Qué terrible paradoja, pero sí, si nos matamos o nos matan al final muertos todos inclido Saturno
creo no es la solución
acá hoy dicen que el país creció en un 4,8% según el INE, pero el chorreo no llega a los sectores medios y bajos, allí con suerte algunos siguen con subsidios y los otros (la gran mayoría) seguimos con los suicidios a crédito que las tarjetas de multitiendas y comercios asociados nos proveen .
Por lo visto, en todos lados, esta Macroeconomía es una avasalladora peste que dudo tenga cura , lamentablemente sus mitigaciones son parches curita para las tremendas llagas que en las personas quedan.
Besos
Que triste noticia, tan triste como el panorama que tenemos. Isabel.
Excelentes reflexiones, Pedro, coincido en un cien por cien.
Un abrazo
Una fisura en el estado del bienestar y de los derechos sociales, por la que todos colaremos sin más recomendación que la de un gobierno que solo mira su ombligo..... Esto es lo que tenemos para cuatro años al menos.... Besos Pedro
Mientras el monstruo vea que sigue consiguiendo su alimento, seguirá exigiéndolo, y cada vez con más ahínco.
Está claro que hay que dejar de alimentarlo antes de que nos devore a todos.
Besos
Quizás la solución no esté en matar a Saturno, sino en alimentar a Venus.
Qué llamada a la dignidad en el ser humano. Qué belleza de argumentación.
O miramos a la bestia o esta nos seguirá mirando a nosotros y será para cazarnos y devorarnos.
Todo mi dolor por este ciudadano griego, cuya muerte nos ha conmovido el alma.
Besazos.
Solo una dosis de templanza y sentido común impedirá que más de uno, ¡pobres hombres y mujeres desesperados! opte por soluciones trágicas.
Lo visto, y lo por ver, auténtica involución y descalabro.
Una pena, si no una vergüenza.
Abrazos de fin de Grande Santa (?) Semana
Creo que aun aferrados al clavo de la esperanza, si somos conscientes de lo que nos puede pasar.
En este mundo de contrastes desmedidos, en el que después de la época de las vacas gordas, del estado del bienestar, que resulta que era vivir por encima de nuestras posibilidades, y de querer medrar quien más y quien menos muchos más que menos. Nos tendremos que preguntar si ya tendremos que poner nuestras barbas en remojo y que lo del 15M se quede en una pequeña broma.
Mientras tanto esta semana ¿santa? por aquí parece que sólo nos interesa si va a llover o no, unos para irse a la playa y otros para pasear a las santas imágenes. Aparte de los lamentos hosteleros, que nunca están contentos con la manida "ocupación".
La actitud trágica del pensionista griego, mañana se nos habrá olvidado, por que todos los días pasan cosas terribles, por desgracia.
La hipocresía, los humanos la manejamos muy bien. El F.M.I. ya ha dado su pésame.
Saludos.
Es muy triste que una persona llegue a ese punto de desesperación. Pero estoy de acuerdo con lo que dice Espaguetti. Esa decisión es un error. En todo caso, si uno se va por los motivos que se ha ido este hombre, que después de todo los demonios de cada uno sólo los conoce cada uno y sabe hasta dónde puede controlarlos, si ha de quitarse la vida porque a él ya le han quitado hasta la dignidad, a alguien ha de llevarse por delante. A uno, al menos. Aunque sea solo uno de toda esa jauria de lobos que ignoran por completo lo que significa ser humano y no tienen sentimientos ni conciencia que se los reclame. Que alguno pague. Así al menos habrá servido para algo ese sacrificio y el dolor de su familia, pero de esta forma no tiene sentido.
De esta no se sale así. De esta saldríamos quizá si hubiera un lider capaz de arrastrar a las masas hacia un cambio de actidud, de forma de pensar; alguien que nos abriera los ojos. Pero no sé, la condición humana acaba siempre envileciendo las causas más nobles.
La Historia siempre se repite. Cuántas veces hemos oído y visto en pélículas y documentales cómo se suicidaba la gente en Estados Unidos cuando lo del crack del 29. Y aquí seguimos.
En fin, habrá que armarse de fortaleza, porque esto no pinta para mejor.
Saludos, Pedro.
La desesperación se viste de suicidio.
Por aquí la gente no deja de saltar por los balcones...
Nos extrañamos de qué?
No seré yo quien lo condene.
Besos, Pedro.
Encima, no se lo pongamos fácil. Nos tiene cogidos por la deuda, y está tan lejos que nuestros gritos no le llegan. Tampoco le llegarían nuestros sacrificios.
Sem palavras...
abraço
cvb
Nos dijeron una vez que eramos clase media... Que listos que eran y que ingenuos que fuimos.
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