martes, 21 de febrero de 2012

Conversación


La conversación es un espacio: construye las paredes y las ventanas del local en el que se desarrolla o abre un vano al horizonte si es necesario. En momentos en los que parece que solo puede existir una conversación si todos los interlocutores están de acuerdo, uno añora aquellos espacios en los que se podía reunir gente muy diversa bajo el respeto al otro. Para hacerlo hay que tener una pizca de empatía, mucha educación y comprender que el diálogo se construye siempre a partir de lo que dice el otro, no de los propios monólogos. Si conversáramos más el mundo, sin duda, sería mejor. Por eso, hallar un lugar en el que poder mantener una tertulia habitual con personas que pueden ayudarte a crecer por dentro, es todo un regalo.

30 comentarios:

Delgado dijo...

Amigo Pedro siempre he admirado la vieja costumbre de las tertulias de café, donde literatos consagrados compartían experiencia con acólitos anónimos.

Al final todo se resume en algo tan sencillo como saber escuchar, pues esto es un primer paso para alcanzar la sabiduría que alimenta nuestro espíritu.

Saludos empáticos ;D

Jesús Garrido dijo...

No escuchamos casi nunca al resto al no ser que nos interese para nuestro propio ego, preferimos oírnos a nosotros mismos al contar las cosas a ese resto.

Crisandbar dijo...

Creo que Granada, la ciudad en la que estudio, es el lugar en el que más conversaciones interesantes he podido tener y espero seguir enriqueciéndome de ellas. Tiene lugares mágicos con gente mágica que te pillan por sorpresa y hacen que el habla humana cobre sentido =)

virgi dijo...

Un regalo, un placer, un crecimiento.
Y un beso para ti, apreciado Pedro.

Julita Fernández dijo...

Saber escuchar al otro... ¡qué difícil es hacérselo ver a los alumnos/as con lo importante que es!

Isabel Huete dijo...

Uff, qué difícil! Depende de tantas cosas... A mí me puede la vehemencia en según qué temas, en otras soy un corderito. Creo que, como casi todo, es relativo.

Lola Fontecha dijo...

Me gusta escuchar y hablar cuando tengo algo que decir, no suelo adornar para ser escuchada sino argumentar para ser parte de la conversación. Un beso Pedro

Asun dijo...

Es que si no hay empatía y respeto por el otro, no existe el diálogo.

Lo que pasa es que cada vez más se oye al otro, pero no se le escucha.

Yo cada vez agradezco y valoro más el rodearme de gente con la que sé que puede haber un intercambio de pensamientos, de ideas, de emociones... y todo desde la escucha y desde el respeto.

Un beso, Pedro.

MIMOSA dijo...

En este sentido me siento gratamente afortunada, aunque ahora, con los fríos y otras razones, hace tiempo que no se reúne el grupo al completo, y sí que se les echa en falta. Es francamente enriquecedor, no tengo palabras para expresar todo cuanto se comparte, espero nos dure muchos años más. Cualquier lugar es aceptable, porque los que conforman el espacio, es lo realmente importante. Es ciertamente, un hermoso regalo.

Besos Pedro.

Fe r dijo...

Muy cierto.

Todo un arte el de conversar procurando construir en base a la escucha empática y salirse del yoismo. Para mí, la lucha de una vida entera con ciertas personas muy centrales en mi vida familiar, y no se logra. Y produce mucha tristeza y frustración, porque es como no ser registrado, no existir, no valer para esa persona.

Tal vez por eso mi fascinación por esto de comentar en lugares propicios donde se es escuchado, como este, y llevar un blog comentado. Un regalo, Pedro.

Gracias y un cordial saludo para un buen intelocutor.

Spaghetti dijo...

Estos de la foto no parecen muy propensos al diálogo ... jeje

gaia56 dijo...

La comunicación siempre me parece un regalo y esos encuentros imprevistos y esas charlas en un bar suelen ser deliciosas.
Un beso.

Merche Pallarés dijo...

Últimamente mis "conversaciones" son en los blogs, en FB o por e-mail... Echo de menos esas reuniones parlanchinas de antaño. Besotes oyentes, M.

XuanRata dijo...

Sin duda, Pedro, lo que dice el otro ayuda a pensar lo propio. El lugar de la foto tiene muy buena pinta, con toda esa madera, promesa de calidez.

Myriam dijo...

Vale, abramos vano al horizonte, aquí traigo el café para los tertulianos de la Acequia.

Besos a ti y saludos a todos

Myriam dijo...

El lugar de la foto parece cálido pero los personajes dan la impresión de estar a miles de km de distancia, cada uno enrollado en su universo propio: una muestra fehaciente de que la cercanía física no es sinónimo de cercanía emocional.

Por eso creo que las distancias físicas no cuentan a la hora de estar cerca emocionalmente del otro.

Hernando dijo...

Cuánto echo a faltar esas tertulias entre los vecinos una noche de verano que se llamaba tomar la fresca, los que tenemos cierta edad, podemos recordar las comidas y cenas sin televisión, únicamente teníamos la conversación familiar........los nuevos medios de comunicación...internet...etc, nos han individualizado tanto que lo raro es que haya una buena conversación.

LA ZARZAMORA dijo...

Nunca he dejado de creer en el poder físico de la palabra.
Besos, Pedro.

Ele Bergón dijo...

Después de varios años perdida sin tertulias, la semana pasada comencé a ir a la tertulia poética que hay en el Bellas Artes de Madrid. Lo pasé muy bien, leyendo y escuchando poesía. El ambiente fue muy agradable y hoy miércoles vuelvo porque además hay un recital.

Es verdad que a veces te saturas de algo, pero después, añoras lo que un día tenías y quizá no valorabas tanto.

"Si conversáramos más el mundo, sin duda, sería mejor". Yo no puedo vivir sin una conversación, lo confieso

Por cierto, ahora en estos tiempos, hay que tener cuidado, pues a veces me reuno con los del 15-M en Velilla y me han dicho que si somos más de 20 viene la poli a disolvernos, claro que nunca llegamos a ese número.

Un abrazo y seguimos conversando aunque sea por escrito

Luz

São dijo...

Concordo de todo: o diálogo faz-nos crescer por dentro e abre-nos horizontes, Tal com as viagens.

Pena que não se pratique tanto assim, até porque as tecnologias , muitas veses, acabam por isolar as pessoas

Um abraço forte, querido amigo mio.

lichazul dijo...

que pena que entre las parejas muchas veces esta instancia se deje de lado , se diluya con la rutina y la modorra
el que uno crea que el otro ya sabe y se de por sobreentendido lo que al otro le pasa

he visto muchas parejas cumpliendo años de convivencia, pero lejos de cumplirvida


BESOS PEDRO

las palabras son el mejor puente que entre dos se construya

Alimontero dijo...

Ay Pedro....qué haríamos sin la presencia del otro? qué sería de "nuestro pequeño mundo" sin com-partir lo que pensamos de las cosas, y enriquecerme con lo que tú piensas sobre eso, no? la diversidad amigo, la tolerancia obviamente, aunque yo agregaría, si me lo permites, la humildad...ahhhhh! es que los egos nos tropiezan, nos obstaculizan, etc...
hablar debiendo callar, es necedad;
sin embargo, hablar oportunamente...es acierto....;-)

Que regalo al espíritu son las instancias de encuentro para conocer-se; aceptar-se; tolerar-se y regalar lo más preciado en una conversación: el oportuno silencio!

como siempre Maestro, ud me de pronto hace que "hable de más"...
;-)

mi abrazo grande!

Ali

María dijo...

Tienes razón, es un regalo tener la compañía de una buena tertulia para construir diálogos y estrechar pensamientos y manos.

Un beso.

jg riobò dijo...

No parece para nada lo que decías.

Valle-Inclán, el Ateneo dijo...

Valle-Inclán habla de fútbol, el Ateneo y la furia española
¿Un partido de fútbol en el salón de actos del Ateneo de Madrid?

matrioska_verde dijo...

y mira que es difícil encontrar esos lugares, sobre todo físicamente porque en muchos bares y cafeterías de hoy en día sólo hay ruido y música machacona en los que se hace casi imposible iniciar siquiera una conversación, no digo ya dialogar en profundidad para crear por dentro, como tú dices.

biquiños,

gabiprog2 dijo...

No sé si a tu texto habría que ponerle la etiqueta de ‘Historia’ o más bien la de ‘Ciencia Ficción’...

Gabiprog dijo...

Ay... Que he estado comentando con una cuenta en desarrollo...

Mil disculpas!

Paco Cuesta dijo...

Cierto pero cada vez hay menos de esos lugares. Tal vez no sea el continente, sino el contenido.

OceanoAzul.Sonhos dijo...

As palavras confortam, fazem-nos felizes, bem como os olhares e as trocas de vivencias. A conversação pode existir de varias formas, mesmo sendo virtual, é sempre louvável, pois acredito também, que os sentires, as experiencias e as partilhas nos ajudam a crescer como seres humanos.

Um forte abraço Pedro
cvb