martes, 28 de junio de 2011

Quien no se arriesga no pasa la mar


No dejes que la mentira te devore antes que los monstruos. Si has llegado hasta ellos, no te creas nada de lo que salga de su boca. Quien no se arriesga, no pasa la mar.

37 comentarios:

Manolo dijo...

La vida implica riesgo, sea verdad o mentira. Pasaremos por ella.

María dijo...

Hay que arriesgarse, forma parte de la vida, no queda más remedio.

Un beso.

Carlos Alberto dijo...

Si algo se quiere hay que arriesgarse ;) no temer al riesgo.

Un abrazo.

impersonem dijo...

Tema amplio y profundo donde los haya... la palabra riesgo lleva implícitas infinitas variables que precisan una ponderanción muy muy muy tranquila... hay quienes confunden, o confundimos, riesgo con temeridad; creo que el riesgo sólo hay que asumirlo cuando no hay ninguna otra alternativa "para cruzar la mar"...

Abrazo.

El cuaderno de la mesa camilla dijo...

La mentira es el mayor de los monstruos, y el riesgo, el más afable compañero de la vida.

Gelu dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Hay que medir muy bien las fuerzas propias antes de enfrentarse a los monstruos, que aunque suelen ser de pacotilla vistos de cerca, están colocados en lugares estratégicos, y carecen de corazón, como quienes los han situado y los utilizan para provocar temor hasta que consiguen que nos ahoguemos en un vaso de agua.

Pero, si queremos algo de verdad, que la mentira no consiga devorarnos sin lucha.

Saludos.

Alimontero dijo...

Querido Pedro....los monstruos están presentes a lo largo de nuestras vidas....la gracias o "sabiduría" es saber sortearlos....la mentira, es uno más de ellos....cuidado! que viene disfrazada de "caperucita"
;-)
Un abrazo y que tengas una linda semana!

Ali

Euphorbia dijo...

Hay que darle esquinazo al monstruo del miedo a arriesgarse.
Besos

Ulisa dijo...

Bocas llenas de otras cosas,menos hechos ciertos y en el medio de las aguas la voluntad de saltar y el miedo, tomandose la mano.

Sin riesgo, nada se gana, nada se aprende...


Saludos desde Bs As.

virgi dijo...

Pero este indeciso se lo está pensando.
Otro beso

Kety dijo...

Pedro, olvidemos los monstruos. Hoy es tu día.
¡¡Muchas felicidades!!
Un abrazo

jg riobò dijo...

Yo ahora comprendo que hay que aceptar el mínimo riesgo.

LA ZARZAMORA dijo...

Yo por la mar, arriesgaría cualquier cosa ;-)
Besos, Pedro.

Natàlia Tàrraco dijo...

Hay que nadar, aunque sea contra corriente. Procelosa mar, aventura imprescidible, ecomendémonos a Neptuno, para el canto de las sirenas, tapones como Odiseo.

Julita Fernández dijo...

Yo no tengo miedo al monstruo de la mentira, y tampoco a quienes le rodean disfrazando las intenciones y siendo cómplices de ello que a veces son más peligrosos porque le hacen más fuerte.
Un abrazo

Myriam dijo...

¡A arriesgarse, pués!, porque es propicio cruzar las grandes aguas.

El pez, como la mentira, por su propia boca muere.

Es del sabio saber el como, sin tragarse el pez.

Besos

Myriam dijo...

PD (el pez- monstruo)

matrioska_verde dijo...

si hemos llegado hasta los mosntruos quiere decir que nos hemos enfrentado a la mentira y eso ya de por sí es un triunfo, pase lo que pase después, pasemos o no pasemos la mar.

biquiños,

Gabiprog dijo...

Aunque a veces el enfado cuesta más de superar que cualquier miedo...

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Hace tiempo descubrí que las mentiras tienen patas cortas. Por eso opto siempre por decir la verdad, aún con la franquicia de endulzarla un poco, si es dolorosa. Sobre los mentirosos por vocación, creo que ya tengo los instintos bien agudizados.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

valla !!! que reflexion!!!!

motiva a pensar en ello....a querer pasar la mar sin tener que lidiar con el mar de las mentiras...

besines pedro!
:)sauvignona

Abejita de la Vega dijo...

Los más peligrosos son los monstruos que no lo parecen, cuando nos queremos dar cuenta nos han devorado.

Besos

lichazul dijo...

no me disminuyen los peligros y los retos, aunque salga trasquilada, la experiencia enseña y uno se curte la piel y el sentimiento se ahonda
vale la pena el riesgo aún más si es por amor.

un besito Pedro
buen miércoles

Delgado dijo...

Bueno algunos arriesgaron y los monstruos les devoraron finalmente, ¿cuántas veces hay que arriesgar?

Lola Fontecha dijo...

Pedro me siento identificada con tus palabras y no me tiro más porque todavía siento algo dentro de mi que me grita '''tranquila nena, vas muy deprisa'' Un beso

El Gaucho Santillán dijo...

Sì, para vivir, hay que arriesgar.

De lo contrario, se dura, nada mas.

Un abrazo.

omar enletrasarte dijo...

La fábrica de mentiras es la única que da réditos incalculables, ganancias significantes, garantía de sillones en las bancadas, tiraje de imponentes períodicos, etc.
Muchos se adaptan a convivir con ella, tolerantes...en todo caso prefiero ser su contrincante, absolutamente débil, minúsculo, generalmente perdidozo, pero libre al fin.
Un abrazo amigo

Silvi (reikijai) dijo...

Se dice que:La mentira es un fantasma que nunca te dejará en paz,mientras sólo tú sepas la verdad…y esto no significa que haya que decir la verdad sino hacer las cosas con honestidad.Besos.

Ningún riesgo dijo...

En la travesia con Brittany Ferries, Santander-Plymouth, de vuelta a casa.
En la distancia, al fondo y cubiertas por brumas, las montañas de Burgos

Txema dijo...

Querido profesor, en mi caso me he metido siempre en toda clase de charcos con resultados muchas veces catastróficos. Jeje.

un abrazo

Anónimo dijo...

Primero mi felicitación.
La mentira es detestable.El riesgo es a veces, necesario.

Gelu dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Casi no llego a felicitarle en el día de su santo. Le deseo lo mejor siempre.

Dejo un enlace, de otro homónimo ruso, y gran romántico, Piotr Tchaikovski y el Vals de El lago de los cisnes .

Se me ha ocurrido para acompañar al cisne de su Fuente, junto a la Pérgola de su querida Ciudad.

Un abrazo.

P.D.: He visto la estupenda foto de mi paisano Miguel Vivanco, y de su comentario deduzco que su casa ya no está en el lugar de sus raíces. ¿Dónde está nuestra casa?.

Asun dijo...

Los monstruos aparentan ser fuertes y grandes, pero sólo es apariencia. Es su forma de esconder un terrible complejo de inferioridad.

Así que, ni caso y a chapotear.

Besos

Merche Pallarés dijo...

No puedo añadir más de lo ya dicho. De arriesgar y cruzar el mar, se mucho porque ha sido el sino de mi vida... Besotes marineros y anti-monstruos, M.

Montserrat Sala dijo...

MI madre diría: quién no se arriesga no pasa el rio. luego añadiría. Hay que saber nadar y guardar la ropa.
Tu mismo. con dos refranes ya tienes donde elegir.
Un abrazo

Paco Cuesta dijo...

Somos los monstruos de nuestras mentiras.

Mariluz GH dijo...

Por mis tierras se dice que el que quiera peces que se moje el culo... vivir ya es un riesgo como para enredarnos con monstruos. Yo para no verlos siempre llevo una linterna en el bolso ;)

Un cálido abrazo desde Navarra, querido amigo