El libro de los gorriones no fue el primer intento de Bécquer por recopilar su obra. En 1868, poco antes de la Revolución de septiembre, había entregado un manuscrito con las rimas al ministro Luis González Bravo, que le había prometido publicarlo a su costa. Sin embargo, en los días en los que estalló el movimiento revolucionario la casa de González Bravo fue asaltada y quemados muchos de sus objetos y documentos. Entre ellos se perdió el primer manuscrito y se frustró el intento de publicar la obra poética becqueriana en vida del poeta, lo que nos hubiera ahorrado muchas de las incertidumbres que tenemos sobre ella. Venía a culminar así un año muy duro para el poeta: su mujer le abandonó dejándolo al cargo de los hijos; a consecuencia de la convulsa situación política su hermano, Valeriano, pierde la pensión que el gobierno le había asignado como pintor y Gustavo su empleo público como fiscal de novelas y la dirección del periódico en el que trabajaba. Hasta 1870 su situación económica no se regularizará, con su entrada en La Ilustración de Madrid.
La noticia debió llegarle a Bécquer cuando se encontraba planificando un empeño mucho mayor, la recopilación de todos sus proyectos artísticos, quizá pensando en unas obras completas, quizá solo con la idea de tenerlas agrupadas. Lo copiaba todo Bécquer en un libro de cuentas. La disposición del manuscrito, en sí misma, da que pensar: se inicia con la Introducción sinfónica que muchos editores han tomado como introducción de las rimas, cuando debe ser entendida como una poética general del autor y la leyenda titulada La mujer de piedra. Bécquer deja muchas páginas en blanco y escribe un epígrafe a modo de título: Rimas. Poesías que recuerdo del libro perdido. Dejando al margen la frustración que para el poeta debió suponer la pérdida del manuscrito entregado a González Bravo, no debe pensarse que reprodujera de memoria las rimas en El libro de los gorriones puesto que debió trabajar con las mismas fuentes que para el primer manuscrito. Sin embargo, cabe suponer que el manuscrito perdido contuviera variantes de las que no se acordara ya el autor. El título puede sugerir que también contuviera algún poema del que no tuviera copia puesto que se escibiera expresamente para aquella pensada publicación.
Sea como sea, las circunstancias han deparado a Bécquer otra ocasión para repensar su obra: hemos de entender, por lo tanto, que las rimas tal y como se contienen en El libro de los gorriones es la versión última que el poeta quiso dejar de su producción en verso. Este fue el legado que dejó a sus amigos, con el encargo expreso de quemar sus cartas personales y publicar sus poemas. Lo que hicieran después estos con las rimas es otra cuestión que ha incidido notablemente en la trasmisión de la obra becqueriana y su lugar en la historia de la literatura en español.
Como alguno de vosotros habéis demandado una ordenación en la lectura, os propongo que sigamos el orden del Libro de los gorriones (es decir, la ordenación en números árabes). Si habéis seguido las entradas anteriores, no os sorprenderá esta propuesta: en primer lugar, nos remonta a la última voluntad de Bécquer; en segundo lugar, rompe con la edición convencional de las rimas y nos fuerza a olvidarnos de la lectura argumental a la que obligó la primera edición (que se puede seguir con la ordenación en números romanos). El próximo jueves, comentaré algo sobre la poética becqueriana y después abordaremos las primeras rimas.
Como alguno de vosotros habéis demandado una ordenación en la lectura, os propongo que sigamos el orden del Libro de los gorriones (es decir, la ordenación en números árabes). Si habéis seguido las entradas anteriores, no os sorprenderá esta propuesta: en primer lugar, nos remonta a la última voluntad de Bécquer; en segundo lugar, rompe con la edición convencional de las rimas y nos fuerza a olvidarnos de la lectura argumental a la que obligó la primera edición (que se puede seguir con la ordenación en números romanos). El próximo jueves, comentaré algo sobre la poética becqueriana y después abordaremos las primeras rimas.
Noticias de Bécquer
Pancho llega, a través de sus investigaciones sobre el salmantino Alejo Hernández Esteve, al planteamiento de un interesante tema a debate entre los especialistas: la influencia de Heine en Bécquer. No os lo perdáis.
Merche Pallarés comienza sus aportaciones a la lectura comentando los avatares biográficos del poeta, que fueron muchas.
Ele Bergón continúa su diálogo poético con Bécquer, que tan buenos resultados le da: tensión poética acertada, sin duda. Esta vez, con la rima VIII.
Mª Ángeles Merio, Abejita de la Vega, nos sorprende con una excelente selección comentada e ilustrada con las flores becquerianas. No os lo perdáis.
En este enlace podrás encontrar las instrucciones para seguir la lectura de la obra de Bécquer en La Acequia, con los índices de las entradas.
Mª Ángeles Merino, Abejita de la Vega, comenta los capítulos 21 a 23 de Viene la noche, con la inminencia de la noche que se acerca para el protagonista.
Os invito a participar en esta lectura colectiva y virtual de la trilogía dantesca de Óscar Esquivias, continuando la variedad de estilos, propósitos y miradas que nos han enriquecido la lectura del texto cervantino en los dos últimos años.
17 comentarios:
Acabo de llegar a casa. Prometo ponerme al día y ahora: zzzzzz buenas noches zzzzzzzzz.
(no sé si el libro que tengo es un gorrión o una torcaza, trataré de afinar si es un canario aunque no pueda igualar el canto de un jiguero y deba seguir a los gorriones)
Está claro, mi querido 'profe', esperaremos ansiosos la próxima entrega.
Esto es un deleite, resulta que ahora me he vuelto un estudiante.
Un abrazo
Buenas noches, profesor Ojeda:
No sabía cual iba a ser el orden.
Mañana volveré con la lección aprendida y los deberes hechos, aunque he visto la entrada de pancho y habrá que pensar para poder añadir algo más.
Saludos.
Y ¿dónde consigo yo "El libro de los gorriones"? Espero que lo tengan en "La casa del libro"... Si no, seguiré la lectura a mi aire con el libro que tengo. Besotes becquerianos, M.
MERCHE: el orden que tiene El libro de los gorriones está en casi cualquier edición de las Rimas: basta con leerlas en el orden de los números arábigos. También hay ediciones modernas que apuestan por este orden (Pilar Palomo o Luis García Montero, por ejemplo) o lo tienes en la dirección de Internet:
http://cvc.cervantes.es/obref/rimas/
"Quema esto porque sería mi deshonra" dijo a Ferrán un 22 de diciembre antes de morir. Y Bécquer nació a la poesía.
no me quiero imaginar si yo perdiese todo lo que llevo escrito... ¡que tragedia! y eso que no se puede comparar mi bora [je je]con las rimas de Bécquer.
biquiños.
intentaré conseguirlo, aunque por este lado del mapa a veces hay autores que dejan de ser convenientes para ciertas editoriales, y solo publican los más vendidos y sus títulos populares
Besos Pedro
La poesía es muchas veces producto del instante; y cuando uno escribe varios poemas y los pierde, es muy difícil volver a recuperarlos a menos que se los sepa de memoria.
HOLA PEDRO QUERIDO ...
paso a dejarte saludos besines y abrazos...
espero que es este muy bine disfrutando del calorcito yo aqui muriendo de frio...
adios y besines!
:)SAUVIGNONA TU AMIGA
He ido al link que has puesto pero me he mareado con todas las interrogaciones entre las palabras y..., no he visto ninguna rima. Solo quería que lo supieses. Creo que seguiré con mi "Vicens Vives" y que sea lo que los dioses quieran. Besotes mareados, M.
En mi edición solo figuran con números romanos, así que echaré mano de la lectura online.
A ver si este fin de semana empiezo, que estoy de un perezoso...
Un beso
MERCHE, En el link que ha puesto Pedro, si pinchas sobre la palabra "Rimas", y en la siguiente ventana de nuevo sobre la palabra "Rimas" llegas al índice completo de las rimas. Solo tienes ya que ir pinchando en el número que quieras. Este es el enlace directo.
Besos
La muerte le llegó sin ni siquiera haber puesto orden en su creación artística. También yo creo que alguna rima se perdiera con "La Gloriosa", resultaría difícil acordase de todas, aunque luego resultaran mejores, más perfeccionadas. En todos los tiempos ha habido virus que estropean los discos duros. Me pregunto si no tendrían ya papeles de calco ...
Seguiremos tus indicaciones aunque haya que andar saltando de unas rimas a otras.
Gracias por lo de "investigaciones", pero no creo que pase de perder el tiempo buscando en las hemerotecas de los periódicos antiguos en Internet. Con este invento se le puede seguir el rastro a personajes que de otra forma ni repararíamos en ellos.
Tengo una edición de las "Rimas", de Cátedra. La saqué de la biblioteca de mi centro, pensando que era mejor que la de Kapelusz. Pero viene ordenada con números romanos y está menos comentada. Seguiré con CVC y con mi viejo librillo de mis tiempos de estudiante.
Como soy casi tan desastre como Bécquer, he perdido las Leyendas. Seguiré tus consejos para comprarlas o buscarlas en Internet.
Bécquer sorprende. Lo pasé muy bien buscando ´las flores de Bécquer, melancólico jardín.
Acabé con Benjamín, no lo maté porque Esquivias no lo mata...He tenido que poner dos entradas porque la nueva configuración no me ha dejado ponerla en una sola tirada.
Besos, Pedro.
Pancho: muy bueno lo del papel de calco.
Y acabo de darme cuenta: la edición de Cátedra tiene ´números árabes, al lado de los romanos; pero como son muy chiquinines no los había visto. Rectifico.
Besos
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