viernes, 20 de febrero de 2009

Un regusto metálico


A veces, un regusto metálico en la boca. Como cuando un cuchillo penetra en la carne, descosiéndola, para hallar el exacto lugar de la primera puntada.

30 comentarios:

MAMEN ANZUÉ... dijo...

Algunos sabores son auténticos placeres, que pueden llevarte al éxtasis más absoluto¡¡;)

UN BESOOOO Y BUEN FINDEE GUAPOOOO¡¡¡

Silvi (reikijai) dijo...

La inoperancia… la decidía, el desamor… lacera el alma y deja ese gusto tan extraño… al igual que la sacarina… Pedro,que tengas un lindo fin de semana. Te dejo Un Beso. Silvi.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Sádico te veo...el placer por lo desconocido no tiene límites...más cuando no se ha probado...de todos formas mejor lavarse la boca y hacer gárgaras...esque algunos sabores son peligrosos. Saludos

impersonem dijo...

Extraña sensación... más aún en la explicación comparada. Vigila la Sacarina en el café.

Saludos.

Gabiprog dijo...

Es curioso como suena el verbo cercenar los días que salpican penumbra...

;-)

Nome Andrés dijo...

Pedro, eso pasa por meter el lápiz en la boca: produce efectos secundarios; deja un sabor extraño, muy rudo, entre metálico y a madera. La foto de abajo genial: transparente; y la de arriba: bendito aburrimiento. Buen finde, como si fueramos jóvenes. Un abrazo.

María dijo...

Mira que a mí este post me ha producido una sensación extraña, tanto la imagen como las palabras, esas que dices de regusto metálico, cuchillo... ¿tal vez agrio o quizá ácido o tal vez frío? ¿te ha sucedido algo? ¿un disgusto?

Un beso.

lichazul dijo...

hay sabores y olores muy partículares
tanto como la subjetividad a concho:)

FELIZ FIN DE SEMANITA PROFE;-)

Meri Pas Blanquer (Carmen Pascual) dijo...

Y tanto que llega...al lugar exacto...sin error, directo...brutal!!!

Besiños

Borja Santos Porras dijo...

¡¡Pedrroooo!! Madre mía, me ha entrado un mal gusto en la boca ahora mismo. Me has aco...nado ;)
Saludos,

Merche Pallarés dijo...

No voy a comentar esta entrada porque es muy tétrica para mi gusto... Ahora, te leo muy desaparecido últimamente... Vale que no hagas comentarios en algunos de tus posts pero ¡¿qué no lo hagas en El Quijote?! Muy extraño... Espero que sea por motivos de trabajo y viajes y no por salud, mi querido Pedro.
Yo sigo pachucha (catarro) pero NO pienso ir al médico. Besotes, M.

Myriam dijo...

aqui.....

Antonio Aguilera dijo...

Querido Pedro:

Ese regusto que dices tener en la boca,¿no será por la medicación a base de ampollas de hierro dextrano con vitamina B12 para tratar tu anemia ??.

Piénsalo, es posible......jajaja

Un abrazo

Pedro J. Sabalete Gil dijo...

Me gustó, ideal para insertarlo en un texto de género negro

Me divierto con algunos comentarios.

Saludos.

Cuspedepita dijo...

Entré a ler el texto con mucha curiosidad porque el título me provocó automáticamente una sonrisa.
Ya imaginaba que el regusto metálico no iba a ser lo mismo para ti, porque para mi fué el primer síntoma en mis dos embarazos ;-)(más seguro que los test ;-)) jajaja.
Sin embargo, hay un punto común entre la vida y la muerte...o quizá dos, si añadimos el regusto metálico.

Pilar_Cordoba dijo...

Ainss, Pedro, ¿te ha pasado algo? No me han sonado nada bien estas palabras.
¿Quizá una mala jugada por parte de alguién?
Cachisss, bueno te envío un besote a ver si animas, ehhh? Muacksssss.

Anónimo dijo...

Como cuando vas al dentista ¿no?
Tranquilo, pasará. Es lo que tienen éstas cosas. Besos Isabel.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Un abrazo y feliz fin de semana...!

Martine dijo...

Igual me equivoco, pero esta luz es la que se ve desde el sillón de un dentista.. ¿No? Uyyyy!
Me gusta más tus masajes de chocolate con menta... y a tí tambien.. seguro...

Un beso, con chocolate..

Anónimo dijo...

Los que estamos acostumbrados a probar la sangre conocemos bien ese sabor, sus puntos, sus diferencias y sus matices.

Anónimo dijo...

Los que estamos acostumbrados a probar la sangre conocemos bien ese sabor, sus puntos, sus diferencias y sus matices.

Kety dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Tormenta. dijo...

Uhmmmmmmmmmm pues no quisiera yo la verdad, tener esa sensación no no no no!.

Buen finde guapetón!.

Anónimo dijo...

Cuidado con el tenedor, lo que se come es lo que va enganchado a él.
Saludos.

Ele Bergón dijo...

Llegar al origen. Ahí está el quid y no siempre es placentero.

Un abrazo

Unknown dijo...

El frío metal adormece los sentimientos mas nobles dejando a flor de piel aquellos que simplemente se rechazan. Frío es el acero… siempre.
Un abrazo

jg riobò dijo...

Magnífica foto.
Hay sabores que te llevan a lugares olvidados como el metal del cuchillo.

matrioska_verde dijo...

palabras cortantes...
¡ay, Pedro!
bicos,

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Llego tarde. Quizá me dañe el sabor metálico del cuchillo. Quizá todo, en ese sabor agridulce lo explique todo. Gracias por estar ahí y comentar.

Teresa dijo...

Dr. Frankestein, supongo...