lunes, 5 de enero de 2009

En la ventana


Quizá no sea más que eso: la huella del rostro que un día se asomó a una ventana.

37 comentarios:

MAMEN ANZUÉ... dijo...

Es como si no quisiera mirar lo que deja atrás, algo de melancolía grabado a fuego en la madera¡¡;)

UN BESAZOOOOOO¡¡¡

XuanRata dijo...

Es que la persiana es un invento con alma de guillotina.

Aún así algunos no podemos dejar de seguir asomándonos y asombrándonos.

María dijo...

Es como si esa persiana fuera una cadena que impidiera seguir mirando hacia adelante, como si fuera una especie de muro hacia la vista.

Gracias por hacernos reflexionar con tus posts y hacer que ofrezcamos nuestra visión y punto de vista.

Un beso y feliz noche de reyes.

CarmenS dijo...

Y dejó en la persiana una porción de su esencia.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

rostros que dejan huella... no se olvidan...salud

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

Que mas da, seguramente sera lo que cada uno vea.
Beso y amor
je

tejedora dijo...

Materiales, que, sin darnos cuenta reflejan el semblante.

Un abrazo.

Meri Pas Blanquer (Carmen Pascual) dijo...

Me gustaría colarme por ese ojo-persiana, para traspasar el alma de quién dejó esa huella...

Bicos

Martine dijo...

Detras de esta ventana hay una persona colada por este cantante... es lo que a estas horas acierto a ver...Tiene razón Je, lo que cada uno vea...

Un beso Pedro..

Teresa dijo...

es un hombre roto
como tantos

Gabiprog dijo...

¿Se asomó hacia fuera?...
;-)

ALBERTO NAVERO dijo...

Pedro, aquí comparto con udes, algo más que un rostro olvidado como tantos...

BAJO UN VIEJO TECHO

Esta noche duermo bajo un viejo techo,
los ratones corren sobre él, como hace mucho tiempo,
y el niño que hay en mí renace en mi sueño,
aspira de nuevo el olor de los muebles de roble,
y mira lleno de miedo hacia la ventana,
pues sabe que ninguna estrella resucita.

Esa noche oí caer las nueces desde el nogal,
escuché los consejos del reloj de péndulo,
supe que el viento vuelca una copa del cielo,
que las sombras se extienden
y la tierra las bebe sin amarlas,
pero el árbol de mi sueño sólo daba hojas verdes
que maduraban en la mañana con el canto del gallo.

Esta noche duermo bajo un viejo techo,
los ratones corren sobre él, como hace mucho tiempo,
pero sé que no hay mañanas y no hay cantos de gallos,
abro los ojos, para no ver reseco el árbol de mis sueños,
y bajo él, la muerte que me tiende la mano.

JORGE TEILLIER, poeta chileno

De Para ángeles y gorriones, 1956
También en: Los dominios perdidos, 1992.
Versión corregida aquí consignada

Espero les agrade...

Merche Pallarés dijo...

Me parece que los estupendos comentaristas que me preceden ya han dicho todo lo que se puede decir de ese rostro y de esa persiana desconchada y rota... Foto muy triste para un dia de Reyes; de todas formas te mando muchos besotes de dia de Reyes con roscón relleno de chantilly, M.

Ele Bergón dijo...

Quizá no sea na huella
Quizá no sea un rostro
Quizá no sea una ventana.
Seguiré pensando.

Un abrazo.

Silvia_D dijo...

El humo no me deja ver nada ...

Besos, niño.

la inkilin@ dijo...

Y se quedo para siempre


Un café???

São dijo...

Poesia pura, Pedro!

Feliz Dia de Reis: tens romãs( granadas) esperando por ti lá em casa.

Abrazos.

El Deme dijo...

Y por el hueco de la persiana rota, veo sin que me vean.

Abejita de la Vega dijo...

¿Un Elvis de perfil?
Está muy cerrada esa ventana ¡Arriba la persiana!

Anónimo dijo...

Pedro no lo ha dicho, pero se trata de una ventana del domicilio familiar de la familia Rorschach en Zürich; concretamente la del dormitorio del pequeño Hermann que, con los años, se convertiría en un célebre psiquiatra. Si os fijáis bien, en la persiana no hay un rostro ni hay nada; sólo manchas casuales en cuya contemplación Hermann Rorschach dejaba volar su fantasía de adolescente y que, con ligeras variantes, le inspiraron años después su famosísimo test en el que todos hemos picado alguna vez.

Martine dijo...

Conclusión: Hemos hecho, sin saberlo, el test de las manchas... Sólo queda la interpretación a cargo de:.....

Besos!

Silvia_D dijo...

Entonces... cuál es el diagnóstico? porque si hay que hacer caso al sr. Portillo...

Uysss, no sé si quiero saberlo jajajaja

Besoss

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Quizás tambien pudiera ser la huella de alguien que se asomó a nuestra vida y que dejó marca (para bien o para mal) en nuestro corazón.

Un abrazo.

JESUS y ENCARNA dijo...

alguien que nos observa? o alguien que merece ser observado?
Muaks
Encarna

Unknown dijo...

Me parece demasido para ser normal??

Y gasta bigote??



Un saludo, encantado de haberme dejado caer por aqui.


Paz

Rosa dijo...

En ocasionesssssssss veo manchasssssssss.

saldos.

Isabel Huete dijo...

La cara rota de una sombra. La huella está rota.
Besitos, Perico.

Juan Luis G. dijo...

Hay miradas que dejan huella...

lichazul dijo...

hay tantas ventanas como rostros
que alguna vez asomaron libres...hoy con suerte quedan algunos indicios de sus existencias...

no me haga mucho caso (ando triste)

muakismuakis:-)

Anónimo dijo...

Persiana que arranca de raíz, cercén a cercén, la curiosidad impertinente. pancho

jg riobò dijo...

Subamos las persianas y veremos el autentico rostro.

JESUS y ENCARNA dijo...

Buenos dias.
Cuando veo una madera asi de estropeada, me dan ganas de restaurarla.
Saludos.
Jesus

Esther dijo...

La verdad es que curiosa la mancha lo parece..y encima tiene un agujero en donde va el ojo :).Besos

Pilar dijo...

o que le dieron con la ventana en las narices, mientras veía y miraba lo que pasaba fuera.
besos

ARSINOE dijo...

En la plaqueta de mi cuarto de baño se ve, si desenfocas la vista el busto de Lenin; curiosas manchas.

Anónimo dijo...

¡Qué buena foto!

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Gracias a todos por vuestras palabras. Como sabéis, ando muy liado con poco tiempo.
Para los curiosos: esta ventana y el portal de la entrada Nuestros fracasos, de unos días después, están en la misma casa...