Me gustó esta aspiración efímera de verticalidad. Quisiera aprender la humilde belleza de estas plantas silvestres. Es nuestra historia: una pequeña explosión de vida y afirmación que sirve de manto nutritivo para los que nos siguen.
Don Pedro, déjeme decirle que la explosión gratuita a la que hace usted referencia se debe a algo que todavía no está manipulado ¿o si?.
Un amigo biólogo me ha advertido que el catálogo de plantas en la meseta está variando afectado directamente por el asfalto y urbanizaciones masivas. El salitre extendido en los meses de invierno en las calzada, inviernos no tan rigurosos, el calor acumulado por cemento y asfalto hace que algunas plantas de hábitat Mediterráneo puedan vivir con nosotros. Otras especies acusan los cambios con floraciones prematuras. Admiro a quien constata estos cambios, insignificantes para la gran mayoría de nosotros. La ignorancia nos tapa los ojos.
Creo reconocer en el post anterior a la especie Cynara cardunculus, más conocido como cardo de Castilla. No soy botánico pero me gusta saber de quien vive conmigo.
El manto nutritivo que vamos a dejar a los que nos siguen, por tanto, puede verse modifificado en su variedad, avalando el hecho de no repetir la historia. Todo cambia.
PD, el tratamiento de "UD" considérelo como una muestra de humildad.
Estimado Caelio: usted sí que sabe. Efectivamente, la fotografía anterior correspondía a un cardo, un humilde cardo que explota en belleza unas pocas semanas y que para muchos no es más que algo molesto. Yo no aspiro a pasar por encima de él, sino a rodearlo. Nuestra presencia lo altera todo. La historia no es circular, tampoco la naturaleza. Tampoco es una línea que nos conduzca a ningún sitio. Estamos aquí un pequeño minuto, hasta que nos convertimos en humus. Que sea de la mejor calidad posible. El primer paso para respetar las cosas es mirarlas. Siempre es un privilegio su presencia en La Acequia.
Efectivamente, Blogófago: las flores brotan de la tierra, los postes se hincan en ella: no son verticales sino subterráneos. Esto me recuerda la historia del poste que cuenta Wenceslao Fernández Flórez en "El bosque animado".
Me gustó esta aspiración efímera de verticalidad. Quisiera aprender la humilde belleza de estas plantas silvestres. Es nuestra historia: una pequeña explosión de vida y afirmación que sirve de manto nutritivo para los que nos siguen.
8 comentarios:
Don Pedro, déjeme decirle que la explosión gratuita a la que hace usted referencia se debe a algo que todavía no está manipulado ¿o si?.
Un amigo biólogo me ha advertido que el catálogo de plantas en la meseta está variando afectado directamente por el asfalto y urbanizaciones masivas. El salitre extendido en los meses de invierno en las calzada, inviernos no tan rigurosos, el calor acumulado por cemento y asfalto hace que algunas plantas de hábitat Mediterráneo puedan vivir con nosotros. Otras especies acusan los cambios con floraciones prematuras. Admiro a quien constata estos cambios, insignificantes para la gran mayoría de nosotros. La ignorancia nos tapa los ojos.
Creo reconocer en el post anterior a la especie Cynara cardunculus, más conocido como cardo de Castilla. No soy botánico pero me gusta saber de quien vive conmigo.
El manto nutritivo que vamos a dejar a los que nos siguen, por tanto, puede verse modifificado en su variedad, avalando el hecho de no repetir la historia. Todo cambia.
PD, el tratamiento de "UD" considérelo como una muestra de humildad.
Estimado Caelio: usted sí que sabe. Efectivamente, la fotografía anterior correspondía a un cardo, un humilde cardo que explota en belleza unas pocas semanas y que para muchos no es más que algo molesto. Yo no aspiro a pasar por encima de él, sino a rodearlo.
Nuestra presencia lo altera todo. La historia no es circular, tampoco la naturaleza. Tampoco es una línea que nos conduzca a ningún sitio. Estamos aquí un pequeño minuto, hasta que nos convertimos en humus. Que sea de la mejor calidad posible.
El primer paso para respetar las cosas es mirarlas.
Siempre es un privilegio su presencia en La Acequia.
Hola Pedro:
Muchas gracias por tu amable visita y comentario. Gracias a ello he descubierto tu blog por el que volveré.
Salud y suerte,
Nacho.
Hola, Nacho: Gracias a ti por pasarte por aquí, yo hago lo mismo con tu blog, que consulto frecuentemente por tu mirada sobre las cosas.
Qué hermosa reflexión en estos tiempos en que tan pocos son capaces de ver esto. Gracias por recordárnoslo.
Teo
Teo: como sabes, las cosas están ahí antes que nosotros, sólo hay que darse cuenta. Gracias a ti por tu entrada en este mundo.
...Que diferente la verticalidad de las flores y la de los postes, vallas y antenas...
Efectivamente, Blogófago: las flores brotan de la tierra, los postes se hincan en ella: no son verticales sino subterráneos. Esto me recuerda la historia del poste que cuenta Wenceslao Fernández Flórez en "El bosque animado".
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