El humilde peral de Humanidades ha florecido. Este año, su despertar ha sido lento: hubo un momento en el que pensé que se le habían helado las yemas, en la primavera adelantada e inesperada en estas tierras. Ya sabéis, los que seguís La Acequia, que este frutal es uno de sus símbolos más queridos. En mi camino a clase paso junto a él y, ante la mirada extrañada de muchos, suelo rozar su rugosa corteza con la palma de mi mano o fotografiarlo con constancia. Como no es un árbol espectacular, nadie parece apreciarlo. Lo hice explicación de la labor docente, pero es algo más: el cumplimiento del ciclo anual de la naturaleza. Este peral no pide explicaciones a nadie, ni las da: se limita, callado, a cumplir con su misión a pesar de que todo está contra él. Y así, año tras año, florece, le brotan las hojas y los frutos se van madurando en su preciso tiempo. Toda una lección de lentitud y constancia en este mundo de prisas.
Por otra parte, mi visita al oftalmólogo terminó con la constatación de la edad. Presbicia y gafas para leer y ver de cerca. ¿Será la presbicia causa o efecto de las disoluciones? Lamentablemente, cada año pierdo uno de poder apreciar el esfuerzo de mi humilde árbol, pero, por suerte, gano uno en disfrutar de sus estaciones.
Saludos. Hoy mi día ha sido extremadamente largo y extraño. Dejo constancia aquí, por si se me olvida.
39 comentarios:
El peral, precioso. Yo, también tengo mis árboles, y a mí me dan una sensación de vida...
Te he sentido más animado en esta entrada de hoy.
Creo que la naturaleza es muy sabia. Nos demuestra cada día su vida y su fuerza, a veces es cierto que se revela contra nosotros, pero la mayoría se manifiesta en un espectáculo gratuíto y hermoso, cada día.
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Me parece que a mí me quedan un par de años para eso de la presbicia, que me suena de pena, me suena a presbítero, no sé si tendrá relación, pero yo prefiero decir, -vista cansada-.
Buena elección, mejor haberte hecho la foto, sino te imaginaba con las típicas gafas de esas a media nariz, de abuelete, gegege.
Hay días largos, verdad?
Un abrazo.
Querido Pedro, saber mirar la naturaleza, aun con gafas, es el arte de apreciar la vida.
Mire...yo habia escrito mi post ( el 2º del dia, pura contradiccion) antes de leer su entrada. Luego solo he tenido que enlazar mi guiño a sus ojos cansados.
en fin bienvenido al club...de los "vistacansada"...la edad amigo, pero también dan un aire interesante...ja ja...
Nota: acabo de ver que con explorer no veo todas tus entradas, o las de otros blog actualizadas...con firefox si (aunque es muy lento)
Saludos...de otro gafado de la vista...
Pavor, me toca mañana.
Veo que andas por ahí...no puedo leer el discurso..el enlace está roto... o a mi no me funciona...perdon por la interrupción....buenas noches
Al ser miope perdida igual la presbicia se apiada de mi y de soslayo pasa por mi vida (ingenua que es una), es cierto que hace interesante o sino que se lo pregunten a MªTeresa Fernández de la Vega.(es que tengo su imagen hablando y gafa para arriba, gafa que se quita, se pone, juega con ella), de todas formas lo tuyo no es por la edad sino por leer mucho.
MUCHACHETE!!!
Bueno, no te preocupes, otros somos más jóvenes y no tenemos lo que se dice buena vista... Llevo gafas desde los 11 años, son ya casi un apéndice mío, y aún así sigo 'disolviéndome' los ojos con prácticas 'de riesgo' como tirarme horas y horas de cara a la pantalla de un ordenador... Al menos, así el sector de la óptica no puede sentirse defraudado conmigo.
Saludos.
Pedro, te aseguro que lo de la vista cansada del ojo del puente de mi foto de hoy no fue premeditado. Es más, ni siquiera había leido todavía tu entrada. Pero así es el azar, estúpido (el azar, claro, no tú, vaya me parece que lo estoy arreglando, eh?) Bueno, pues mejor lo dejo. Y que sigamos todos tan hermosos como ruinas. Vamos, ruinas con estilo, a luz de la luna y todo eso. Más o menos.
Un abrazo.
Permite que te diga, Pedro, que não te ficam mal os óculos!
Abrazos, querido amigo.
mmmm me has hecho recordar que debo visitar al oculista. Veo bien, pero siempre es bueno una revisión. Un abrazo.
Não temos estações definidas. Portanto temos flores o ano todo.Qt a usar os óculos pela passagem do tempo: é inevitável.O melhor é aceitar!
Gostaria que você ( e seus visitantes) fosse ao meu blog para assinar uma mensagem em favor da Floresta Amazônica.
Desde aquí, ¡suerte! a Javier, a ver si deja de llorar su ojo izquierdo. ¡qué cosas! antonio tiene dos apéndices, gegege.
Un abrazo PEDRO, y que usté lo vea bien.
Días raros y disolutos, vale , le echaremos la culpa de todo a la presbicia, es más cómodo :)
Gracias por la idea, tienes toda la razón.
Besos a ciegas^
Maravillas de la naturaleza, este peral renace todos los años en todo su esplendor. Hay personas que tambien les pasa algo parecido, en cambio a otras....
En la foto que has puesto tienes cara de "el malo de la película", tienes otras mejores, y no es por las gafas. Besos Isabel.
No sabia que se llamaba "presbicia"... Ay, ¡vosotros cuarentañeros! es lo normal a esa edad que te receten lentes para la vista cansada. A mi me pasó lo mismo y, por supuesto, sigo igual. Te quedan muy bien, Pedro. Por ahora ya se habrán acabado las dilataciones... Besotes, M.
Para contemplar el peral no necesitas las gafas... afortunadamente.
¿No eres muy joven, de todos modos para una presbicia?
Bonito modo de decir que los años no pasan en balde (en mi caso sería mucho más rudo e incluiría un referencia a mi vieja amiga la resaca)
Los días raros son los que haen interesante la vida, no hay peor asesino que la monotonía. Disfruta de tus días raros y deja constancia, que no se te olviden.
Un saludo,
Pedro.
Oye, Pedro, tu puedes leer mi blog?
Es que alguien me ha dicho que solo ve signos, creo que es los que usan explorer jajaj , contestame , please , besos^^
bienvenido al club... desde el verano pasado ya tengo que comer el pescado con gafas porque de lo contrario no veo bien las espinas... je je je
¿pero sabes qué?... a veces para lo que hay que ver... así que si queremos nos ponemos las gafas y si no pues pasamos... alguna ventaja habríamos de tener...
je je je
a mi también me gusta pensar que los árboles entienden nuestras caricias
bicos,
Aldabra
Afortunadamente los árboles siguen floreciendo cada año, yo tengo tres ciruelos y ya están cargados de ellas; al verlos así me acuerdo de que el invierno no es eterno, siempre le sigue la primavera que, aunque efímera, consigue cambiarnos la vida.
No sufras por las gafas, te quedan bien, y la vista cansada, ya sabes, mejora con un poco de descanso.
Este peral es un ejemplo de supervivencia; a pesar de la agresión sufrida por el hombre, intentando estrangular su crecimiento con hormigón, ha sabido adaptarse al medio hostil y proseguir su ciclo vital aun en un medio tan poco propicio como el cemento que le rodea. Como árbol más famoso de La Acequia algo debería ser hecho para aliviarlo de tanto acoso.
Lo de las gafas no es nada; ya llegarán los 50, aquí si que se hacen notar los achaques. pancho
Que as árvores da tua vida floresçam sempre, Pedro!
Abrazos.
Yo también te doy la bienvenida la club de los "vistacansada". Yo llevo sufriendo con los ojos desde las siete años. Hipermetropía, rojez crónica y últimamente presbicia. En fin, que nio te agobies, que hay casos peores... Saludos
Crece el club..¿Que tal llevas lo de la adaptación..? Mi oftalmólogo me dijo que mucha gente no se acostumbra a los multifocales y que la media son dos meses hasta que dejas de ver todo difuso..A mi me costó dos días..Era tal el ansia de volver a leer y dibujar sin ver todo descontrolado que rompí la media..je, je. Has elegido un bonito modelo, muy discreto, yo soy más de colorines, ya puestos a gastar el pastón, que se note, je, je.
Que sólo era un juego, pregunté
y volvimos a casa
Y en todo el camino
aquella extraña canción
El ciclo de la vida en forma de peral...
(Bienvenido al club...)
Saludos.
PILAR: gratuito y hermoso, en efecto. Magnífica definición. Días largos y extraños, sí. Un abrazo.
DEME: y hay que hacerlo con constancia diaria. Aun con gafas.
BLOGÓFAGO: pura contradicción, amigo. Estamos enganchados.
MANUEL: en efecto, explorer plantea cada vez más difícultades. Gracias por el aviso. Ya está corregido.
JAVIER: ya me contarás.
MAFALDIA: gracias por el piropo. Yo también te quiero. Acabo de recordar que te debo un café.
ANTONIO: bueno, tampoco les vayas a dar tu sueldo porque sí... Saludos.
XUANRATA: no te preocupes, no me sentí aludido, pero fue toda una hermosa casualidad. Ya quisiera que se me cansara la vista mirando ese magnífico paisaje. Eso, al final me quedo con que me dices que estoy hecho una ruina... Un abrazo.
SAO: gracias, me miras con buenos ojos. Abrazos.
FERNANDO: bueno, yo estoy preparándome para pasar la ITV. Chapa y pintura todo, pero...
MAGUI: Qué belleza vuestro paisaje, seguro, pero yo echaría de menos las estaciones marcadas. Buena recomendación la tuya.
PILAR: no seas mala...
DIANNA: no seas mala tú tampoco: dije disuelto, no disoluto, aunque...
ISABEL: vaya. Será la perspectiva... Besos.
MERCHE: no te creas, en cuanto me quito las gafas... Besos.
BRUJAROJA: gracias por lo de joven, pero ya me van cayendo los años.
PEDRO: el problema de este día raro es que venía cargado de monotonía, muy cargado. Un saludo.
DIANNA: perdona mi ingenuidad, pensaba que lo hacías a propósito lo de los signos. Iré con Firefox. Besos.
ALDABRA: es una buena idea lo de ver/no ver a tu antojo. Me la apunto. Un abrazo.
LADYLIBRARIAN: ¡tres ciruelos! Toda una terrateniente... Gracias por el piropo y el consejo.
PANCHO: creo que en la Facultad comienza a correrse el rumor de que el árbol debería ser más cuidado. Algo tendrá que ver La Acequia, espero. Vaya, pues me iré preparando para los 50, que los tengo ahí al lado. Un abrazo.
SAO: gracias, Sao. También los tuyos. Un abrazo.
ISAAC: bueno, había que darlo algo de color. Un abrazo.
NACHO: somos legión... Saludos.
Gracias a todos por vuestros comentarios.
TAREIXA: la verdad es que sólo me las pongo para leer, como me aconsejó el ofalmólogo y no he tenido problemas. Lo divertido es cuando me las quito e intento ver algo de cerca... todo se hace borroso hasta pasado un tiempo.
DARGOR: siempre enigmático, ahora voy a tu blog.
El ojo posiblemente seco.
El lagrimal posiblemente obstruido.
De cerca 2,25 y 2,00.
Que me ponga lágrimas artificiales (como no) y me anduvom con saña en el lagrimal.
Del fondo ni por asomo.
Pero Javier, cómo es posible que tengas el ojo seco, si dices que te llora, chico no lo entiendo.
Bienvenido al club de los llorones artificiales. Te das cuenta, a pesar de la tristeza del mundo (como decís) tenemos que echarnos gotas para llorar, snif, snif.
Por cierto, no es por joder, me hice la revisión anual correspondiente, yo: 0,0
Peter si no fuera por las canas, estarías como un chavalillo... Anda, anda, no lloriquées tanto
JAVIER: pues ánimo, amigo.
BIPOLAR: ¡¡encima tengo canas!!
PILAR: eso va a ser porque aprendiste a mirar bien desde pequeña.
¡¡Todos quejándoos de la edad!! Y no habeis llegado a los 50... ¿Entonces qué digo yo con 64? Y ¿sin achaques?... Os quejais por puro vicio... ¡¡ANIMAOS qué cuánto más positivos seais, mas sanos estareis!! Besotes, M.
Tienes toda la razón, MERCHE. Besos.
Pedrinho,que coincidência!
Estamos em estações diferentes mas, nós estamos impressionados com árvores em flor.
Que belo exemplar voce tem aqui.
Obrigada pela visita.
Árboles de dos continentes. Besos, Nana.
Leí en un libro hace apenas unos dias, que cuando piensas en algo, ese algo existe en algún lugar del mundo, aunque sea sólo por un momentos efimero. A lo que me refiero es que, simplemente por el echo de pensarlo, esa cosa ya existe. Era una parrafada mucho más larga, pero a mi me ha gustado mucho. Sería genial, no? Que todo lo que pensaramos existiera, al menos por un momento.
(todo esto en relación al Peral, no me preguntes pero me quede con su imagen sostenida en la cabeza)
Un beso
REGGIS: todo lo que se ha escrito, todo lo que se ha pensado, existe. Don Quijote es tan real como Cervantes. O más. Es una buena reflexión. Un beso.
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