Si viviste bien, no tienes por qué preocuparte sobre la muerte, aunque solo te quede un día de vida. El factor tiempo no juega mas que un papel insignificante y de todas maneras esta basado en una concepción elaborada por el hombre. Vivir bien quiere decir aprender a amar.
Uy! Eso suena tan pesimistamente trágico como la respuesta que dió el sabio Sileno al rey Midas a su pregunta de qué era lo mejor y más preferible para el hombre: " “Estirpe miserable de un día, hijos del azar y de la fatiga, ¿por qué me fuerzas a decirte lo que para ti sería muy ventajoso no oír? Lo mejor de todo es totalmente inalcanzable para ti: no haber nacido, no ser, ser nada. Y lo mejor en segundo lugar es para ti morir pronto.” No sé, y aquello tan esperanzador de "ay mísero de mí, ay infelice ..." pero "la vida es sueño".
La muerte nos cerca incluso antes de nacer. Vivir es un milagro de la muerte, una excepción entre tanta masa inerte. Así que la defensa de la vida es otra excepción.
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Pues, quedará para la próxima...
ResponderEliminarBesos
A menos que reconvierta o transmute y resucite en ésta...
ResponderEliminarÉ assim...que se pode fazer?
ResponderEliminarBons sonhos, querido amigo mio
Si viviste bien, no tienes por qué preocuparte sobre la muerte, aunque solo te quede un día de vida. El factor tiempo no juega mas que un papel insignificante y de todas maneras esta basado en una concepción elaborada por el hombre. Vivir bien quiere decir aprender a amar.
ResponderEliminarDel Arte de Vivir, para bien Morir.
Saludos,
Ali
iNIcIo cátedra de resusitología interesados inscibirse ya, vacantes limitadas.
ResponderEliminar/El Topo Gigio
no sé Pedro
ResponderEliminarla certeza
la precisión
no siempre andan de la mano
besos
La única certeza que tengo es la de la muerte. Todo lo demás son incertidumbres.
ResponderEliminarUn abrazo
Y como dice la sabiduría popular en uno de sus refranes al respecto del carpe diem: oveja que bala, pierde bocado.
ResponderEliminarLa vida es así, se empeña en darnos sorpresas que nunca antes habíamos vivido, pero de todo se aprende y si vuelve, ya sabemos.
ResponderEliminarUn abrazo
Luz
En la vida no suele haber una segunda oportunidad.
ResponderEliminarSiempre le he temido a la muerte, es inevitable, pero, cuando llegue, las dos nos fundiremos en un fuerte abrazo.
ResponderEliminarCariños.
Kasioles
Estamos muertos, sí. O al menos, solo soñando. la pregunta es ¿Despertaremos?
ResponderEliminarSaludos desde una morgue.
uno es nada
ResponderEliminarhasta que vive
luego hay que procurar
ser todo, menos nada
.
la muerte, es otro cantar
no nos preocupemos por ahora
.
un abrazo Profe
Uy! Eso suena tan pesimistamente trágico como la respuesta que dió el sabio Sileno al rey Midas a su pregunta de qué era lo mejor y más preferible para el hombre: " “Estirpe miserable de un día, hijos del azar y de la fatiga, ¿por qué me fuerzas a decirte lo que para ti sería muy ventajoso no oír? Lo mejor de todo es totalmente inalcanzable para ti: no haber nacido, no ser, ser nada. Y lo mejor en segundo lugar es para ti morir pronto.” No sé, y aquello tan esperanzador de "ay mísero de mí, ay infelice ..." pero "la vida es sueño".
ResponderEliminarLa muerte nos cerca incluso antes de nacer. Vivir es un milagro de la muerte, una excepción entre tanta masa inerte. Así que la defensa de la vida es otra excepción.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo con el comentario de nuestro amigo Luis Antonio, me ratifico en lo que ha dicho.
ResponderEliminarUn beso.