Castilla ha hecho a España y Castilla la ha deshecho, dice Ortega en su ensayo. Y como todas las frases sencillas, sacadas de contexto, se convierten en un mantra que se repite sin saber muy bien qué hay detrás. Dice Ortega eso que se entiende fácilmente y no lo dice. No olvidemos algo esencial si queremos comprender no solo este ensayo sino a todo Ortega: el pensamiento no está prefijado, se construye. En este ensayo el pensamiento evoluciona según se reflexiona y se expresa, es un método, no un fin en sí mismo. Por eso mismo la condición de bosquejo que figura desde el mismo título de la obra.
Ortega dice que Castilla, renunciando a la condición angosta que predomina en el resto de los pueblos ibéricos, proyecto la idea nacional de España a la que se fue incorporando a través de la historia el resto:
Ortega dice que Castilla, renunciando a la condición angosta que predomina en el resto de los pueblos ibéricos, proyecto la idea nacional de España a la que se fue incorporando a través de la historia el resto:
Núcleo inicial de la incorporación ibérica, Castilla acertó a superar su propio particularismo e invitó a los demás pueblos peninsulares para que colaborasen en un gigantesco proyecto de vida común.
Es decir, fue la única que puso en el tapete algo que iba más allá de sus propios límites, pero que en realidad solo pudo construir España cuando ganó para la causa a Aragón y, singularmente, a Fernando el Católico. La famosa frase no puede entenderse, por lo tanto, sin esta otra cara de la moneda: España no hubiera existido sin la incorporación de la corona de Aragón al proyecto, España solo nace con la suma de Castilla y Aragón. Castilla, sola, no hubiera podido. Por lo tanto, en ese mismo momento, España se convierte en otra cosa que ya no es Castilla y su futuro será producto de la generosidad de todos o no será. Aquellos que ven España exclusivamente desde lo castellano, se confunden, pero de eso hablaremos en la próxima entrada.
Noticias de nuestras lecturas
Autorretrato de Federico García Lorca para Poeta en Nueva York |
Durante el mes de febrero leemos Poeta en Nueva York, de Federico García Lorca (se cumplen 80 años desde su publicación). Son conocidas las circunstancias de su composición: en 1929, García Lorca marcha a Nueva York con la excusa de impartir unas conferencias en los EE.UU. y en Cuba y aprender inglés. En realidad, buscaba alejarse de unas circunstancias que le ahogaban. En la libertad de Nueva York encontró una nueva forma de expresar su voz poética y escribió la mayoría de los poemas que componen el libro. Aunque hay alguna duda sobre cómo entendía este poemario el autor, lo que sabemos es que dejó el manuscrito en manos de José Bergamín en 1936. Aquel manuscrito no era tal, sino un conjunto de páginas mecanografiadas y manuscritas cuyo orden real ignoramos, oscilando las opiniones en que Bergamín respetara las indicaciones de Lorca o trabajara con sus propias decisiones. El levantamiento militar, el asesinato del poeta y la guerra civil impidieron que el libro se imprimiera hasta 1940 en una doble edición: en México y en los Estados Unidos, esta última con traducción al inglés.
Sea como fuere, estamos ante uno de los grandes poemarios escritos en español. Sin duda, el más libre del autor. Esta libertad abarca todo, desde la forma métrica hasta los temas y la crítica social y moral que incluyen los poemas. Significa también otra cosa igualmente importante: el giro desde el surrealismo hacia el compromiso. García Lorca hizo en Nueva York lo mismo que el grupo de surrealistas de París en Europa.
Sé que para muchos de los que siguen estas lecturas abordar la de Poeta en Nueva York es un reto. No es una poesía fácil por las imágenes y la libertad de la que he hablado, pero aquellos que venzan el reto se encontrarán ante uno de los grandes libros de la poesía universal de todos los tiempos. Merece la pena.
La tarde del lunes 3 de marzo celebraremos la reunión del formato presencial del club de lectura en la sede burgalesa del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, en sesión conjunta con el Aula de Historia de Alumni UBU, con entrada libre hasta completar el aforo. Te espero.
Recojo en estas noticias las entradas que hayan publicado los blogs amigos. Entrada del Club de lectura cada jueves (salvo casos excepcionales) en este blog.
Para conocer la forma de seguir las lecturas de este club y la lista del presente curso, este enlace.
ADVERTENCIA: Las entradas de La Acequia tienen licencia Creative Commons 4.0 y están registradas como propiedad intelectual de Pedro Ojeda Escudero. Pueden ser usadas y reproducidas sin alterar, sin copias derivadas, citando la referencia y sin ánimo de lucro.
Hay que ver lo que dio de sí la reunión con Ortega, ayer la rematé felizmente. Ortega tiene muchas capas, leer España invertebrada contigo nos ha permitido entrar con buen pie.
ResponderEliminarComencé el de Lorca y a la pesca de hermosas metáforas voy, espero que la mariposa no se ahogue en el tintero. Heridos por el cielo que vio Federico.
Besos
Hola Pedro:
ResponderEliminarCreo que no voy a seguir haciendo entradas de "La España invertebrada", porque aunque así me lo propuse,me he dado cuenta que ya nada tengo que añadir, a lo que habéis escrito vosotros.
Me apetece y mucho leer "Poeta en Nueva York", mi libro preferido de poemas de Lorca, con el que viajé a esta ciudad y lo comprendí mejor.
Besos y Besos, que en la otra entada se me olvidó.
Me ha gustado Ortega. Cuesta más de leer que una novela, generalmente, pero también da gusto leerle.
ResponderEliminarVamos con Lorca
Un abrazo
Os sigo, y leo con particular interés, si bien no participe.
ResponderEliminarLo sabes.
Un beso, querido Pedro.
Toda propuesta en tu club de lectura es un aporte grande a mi aprendizaje como docente.
Gracias siempre por todos tus aportes a la Literatura.