Anoche, en Burgos, nevó lento, con la calma apropiada a un tiempo que no espera un mañana. Nevó y lo cubrió todo, como si quisiera rellenar los desmontes y superar las vallas, como si la nieve tuviera capacidad de sepultar la suciedad del terreno y dejarlo todo puro, en silencioso blancor de estreno. Pero la nieve dura tan poco...
Andaba yo inmersa en los diálogos y reflexiones caninocervantinas, cuando... oh, cielos, nieve, la blanca nieve!
ResponderEliminarPreciosa, tan blanquita, tan nueva y sin estrenar... pero, duratan poco, ciertamente!
necesitábamos una glaciación para purificar tanta porquería...
Yo llevo la nieve hasta en el nombre, fíjate si me gustará!
;)
Besos!
Me gustó eso de "en silencioso blancor de estreno".
ResponderEliminarLa pureza de la nieve engaña tanto, como el vestido blanco de la novia... pero queda linda. sobretodo en fotos :-)
Besos
Radiante y blanca nieve que cubre como manto la tierra que pisamos, lástima que nieve tan poco y dure menos.
ResponderEliminarUn beso.
Tras meses de opacidad, hoy ha lucido el sol en Vitoria y para este paseo el sol ha sacado su espléndido y grandioso manto azul. Los magnolios, abetos, fresnos y demás sacuden su capa blanca de los últimos días, los tejados zarandean al okupa blanco intruso y montones de nieve se precipitan sin previo aviso. la nieve acumulada al lado de las aceras luce su brillo nacarado resistiéndose a desaparecer.
ResponderEliminarQué lo disfrutéis, por aquí ya estamos un poco saturados.
Embellece el paisaje... sobre todo cuando no está pisada... y sí, la nieve dura poco...
ResponderEliminarUn abrazo.
El blanco nos devuelve la inocencia que perdimos con los años y nos hace de nuevo soñar... con ser mayores.
ResponderEliminarUn abrazo
Buenas noches, profesor Ojeda:
ResponderEliminarAquí ha comenzado a llover muy suave, y con su texto y la fotografía me han evocado la frase, grabada en piedra:
“He nevado tanto para que duermas”
Saludos
Seria óptimo que essa silenciosa brancura de estreia tivesse realmente capacidade de renovar tudo...
ResponderEliminarQuerido amigo, que tenhas uma noite serena.
Vemos que fuiste en tren a Valladolid
ResponderEliminarLa nieve es la alfombra bajo la cual se esconde el polvo sin barrer.
ResponderEliminarHermoso...
ResponderEliminar=)
y excelente reflexión.
Disfrutemos el cambio mientras sea posible.
ResponderEliminarUn abrazo
Lo cubre todo, es un manto que tapa aristas, hermoso que desaparece pronto, dímelo a mí que en Andorra tuvimos un metro en la terraza de casa. En definitiva ¿qué dura la nieve? Mientras dure a disfrutarla.
ResponderEliminarSilencio de nieve.
ResponderEliminarla nieve dura poco, la lluvia también cesa, las mareas van y vienen, el sol también se apaga...
ResponderEliminartodo, más pronto o más tarde, tiene un final.
biquiños.
Y lo mágico de mi infancia irse a la cama con el color de adobe y tierra, y levantarse con el color blanco de la nieve, que todo lo cubría.
ResponderEliminarLuego lo cambié, o mejor dicho las circunstancias de la vida me lo cambiaron por el color azul del mediterráneo, no salí perdiendo pero tampoco ganando.
POr levante ha pasado eolo enfurecido y ha dejado furiosa agua y granizo. Ojalá el agua limpie algo la podredumbre y no nos deje aún más maltrechos!
ResponderEliminarLa nieve dura tan poco porque es blanca. Trenzaron las miradas, acompasaron los pasos en la lentitud de aquel natural. Estreno mudo que nos sacó del tiempo.
ResponderEliminarhe visto quien tapa el sol con un dedo...pero también dura muy poco
ResponderEliminar.
original entrada, buena reflexión
un abrazo, el de siempre
Parece que esta sea un último estertor del invierno. Esta mañana pasé junto a un arbusto cuyas yemas globosas, a punto de estallar, no querían esperar ni un minuto más.
ResponderEliminarHoy estoy triste. Por todo lo que nos rodea.
ResponderEliminarDemasiado poco. Aquí tb nieva, pero ni siquiera deja sus huellas en el suelo...solo en las alturas.
ResponderEliminarUn beso
La nieve es una lluvia que viene para quedarse, cargada de equipaje y de historias viejas, pero que pronto se convierte en un pesado huésped. Pese a todo, qué alegría irrazonable cuando nieva...
ResponderEliminarIgual de bien escribes en corto que en largo, con nieve o con sol.
ResponderEliminarLamento confirmar que la nieve no limpiará lo que quisiéramos.
Besos