sábado, 24 de septiembre de 2016

Un nido de palabras. Con aire de haiku.


Se enciende el mundo,
la madre nos despierta.
Plumas nos nacen.

© Pedro Ojeda Escudero

11 comentarios:

  1. Es muy bonito el Haiku, Pedro, son difíciles de gacer. Creo que es el primero que te leo uno???

    Preiosa la imagen.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  2. De los huevos de la inspiración nacen palabras que saben volar...

    Sí, somomos alumbrados a un mundo o en un mundo, éste, la madre nos nutre y nos instruye, y depués los cañamones se convierten en plumas y aprendemos a volar (algunos a reptar)... entre nidos y nudos (gordianos o triviales) transcurre el vivir y el volar... cuando ambos términos significan aprender en libertad, merece la pena...

    Abrazo

    ResponderEliminar
  3. Qué dificil resulta escribir desde el móvil, Pedro, mil perdones por los errores que cometí antes.

    Más besos.

    ResponderEliminar
  4. Nido fértil.


    Nunca me imaginé que te decantarías
    por aires de Haikus, algo tan japonés
    e importado ;-) Me sorprendes.


    Besos

    ResponderEliminar
  5. No los entiendo. Pocas palabras, menos ideas.

    ResponderEliminar
  6. No conocía tus haikus. Son bellos, muy sugerentes y sentidos. La naturaleza nos lo va regalando según caminamos.

    Besos

    ResponderEliminar
  7. Me encantan tus retratos de interior en forma de Haiku, soneto o prosa.

    ResponderEliminar
  8. Como eu gosto de Haiku....


    Bem vindo ao nosso convívio de novo, amigo mio !

    Buen finde !

    ResponderEliminar
  9. Bueno, son los pensamientos de un ave, de un pájaro, si los tienen.

    ResponderEliminar
  10. Pedes in terra ad sidera visus...
    ;)

    Besos, Pedro.

    ResponderEliminar

Un ataque masivo de spam me ha obligado a anular la posibilidad de comentarios anónimos en contra de lo que siempre ha ocurrido en La Acequia. En cuanto pueda solucionarlo, volverá a ser posible comentar de forma anónima.