Nunca se han ido. Son seres cuya única voluntad es su propio medro y tranquilidad a partir de una premisa: no molestar a quien detenta el poder. Nunca se enfrentarán a un poderoso, huirán de toda confrontación que pueda hacerles caer mal a quien reparte el botín, votarán siempre lo que les manden aunque vaya contra su propia conciencia, no quieren problemas, se esconderán cuando surjan los conflictos o, como mucho, escribirán hermosas frases retóricas llenas de teoría y escasas de práctica. No les verás decirle al jefe nada que pueda turbarlo porque han puesto por encima de la dignidad la soldada. Jamás defenderán a un compañero si con eso pueden buscarse problemas. Se sumarán a la carnicería de la víctima y darán la cuchillada más cobarde para que les vean los que dominan su mundo. Buscarán su aplauso, su gratificación. Como mucho, irán a lo suyo y defenderán su actuación como impacial cuando no lo es, sino mera falta de implicación contra las injusticias, las irregularidades y la maldad. Cuando las ven, miran para otro lado pero de tanto volver la cabeza han desarrollado un sexto sentido para no ver siquiera. Eso sí, si piensan que les conviene para el futuro, escribirán una nota secreta o pronunciarán una palabra en voz baja diciendo que ellos siempre estuvieron de parte del débil y de la justicia, que ya denunciaron en su momento, aunque nadie les escuchara, lo que no denunciaron jamás. Y cuando cae el poderoso lo patearán con saña para que los vean los nuevos amos: serán los primeros en firmar manifiestos, derrumbar las estatuas o aparecer en las fotos de la sucesión. Si alguna vez llegan al poder lo harán tan envilecidos que solo querrán que se repoduzca con ellos la sumisión que ellos tuvieron antes. Mala gente que abunda por estas tierras y de los que hay que huir porque nunca tendrán una mala palabra ni una buena acción.
Ahí le has dado, pancistas profesionales, cobardes mercenarios si se tercia, y muchas cosas más... cuando pienso en ellos o me los encuentro (creo que son legión y por eso estamos así) me entra un encabronamiento que no puedo con él... son trepas y aspirantes a manejadores de cotarros...
ResponderEliminarBueno, mejor no sigo.
"...Mala gente que camina
ResponderEliminary va apestando la tierra..."
Que diría Machado.
Besos
Pamisola se me ha adelantado. Enhorabuena.
ResponderEliminarMe ha recordado a los voluntarios q entraban en Falange al principio de la Guerra Incivil. Eran lo mas rastrero de la sociedad y se prestaban para el trabajo sucio: fusilar etc
Sigue dándoles Pedro.
ResponderEliminarLa justicia, acaba más tarde o más temprano, por poner a cada uno en el lugar que le corresponde.
Llámese, humana, o divina.
Y que no nos callen...eso ni en sueños.
;-)
Bss.
Se llaman cobardes. Y de esos beben los corruptos. Aunque si te sirve de consuelo, al final, pagan. Los unos y los otros.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenas noches, profesor Ojeda:
ResponderEliminarHacen el trabajo sucio a los que están más arriba, y pisan sin piedad a los que se encuentran lejos del poder.
Son crueles con los de abajo y no les interesa la verdad ni la honradez.
Saludos.
Los has clavado. Sólo difiero en una cosa: demasiadas líneas para gente tan mezquina.
ResponderEliminarBesos
¡Hay tanta gente que se acomoda! Luego nos quejamos de cómo estamos pero si cada uno pensáramos si estamos actuando de acuerdo o no a nuestras ideas, otro gallo cantaría.
ResponderEliminarSé muy bien de lo que escribes y de la tierra que escribes.
Un abrazo
Luz
Y no estamos pensando a nadie que trabaje en el Congreso, ¿no? Es que se me fue la cabeza, así como el que no quiere la cosa.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte
No estaría mal, seguramente, leer una novela con este tipo de personaje, que seguro que las hay, y buenas.
ResponderEliminarUn abrazo
muchas veces quise hallarme convertido en TOMMY (la película de THE WHO) ciego, sordo y mudo
ResponderEliminar.
sé de esa gente, sé de esa calaña, sé de lo que son capaces, y sin ir más lejos los padezco entre las propias filas en las que marcho hacia el ansiado horizonte
.
los macarras...de los que hablaba ese tal TARRES
un abrazo
Me suena eso que dices, aparte de conocer a algunos de esos personajes.
ResponderEliminarSaludos
ser servil a una persona servicial existen matices que hacen gran diferencia
ResponderEliminarbesos
Personas comunes y corrientes pero sin humanidad, su credo: el oportunismo. Huir, a dónde? Bien lejos, al interior de una misma? De los oportunistas nunca se está a salvo, ahí está la historia para demostrarlo. Quiero creer como La Zarzamora en la justicia, y como ella dice:"Y que no nos callen...eso ni en sueños".
ResponderEliminarSaludos
Si hay que linchar se ponen a la cabeza...los conozco.
ResponderEliminarSon los llamados "soba levas" siempre ofreciendo sus servicios al mejor postor.
ResponderEliminarSaludos!!!
"Cuando la hipocresía comienza a ser de muy mala calidad, es hora de comenzar a decir la verdad."
ResponderEliminarBertolt Brecht
Besos.
Abundan los que doblan el espinazo por una limosna que habría que tirársela a la cara...están entre nosotros, pero hay que denunciarlos con nombres y apellidos, porque el anonimato es su baluarte.
ResponderEliminarActual, actual....y nunca pasan de moda.
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