Detrás de toda puerta absurda hay una historia real que merece ser contada antes de que se convierta en leyenda. Quién sabe si esta puerta está hecha para no salir o para no entrar. O si el número de la calle tiene la cifra de los secretos. Como en esas casas en las que todo debe permanecer en el más sórdido de los silencios.
Hay puertas que merecen estar cerradas hasta con candado para no volverlas a abrir jamás, quizá sean recuerdos vividos de un pasado que ni siquiera merecen ser escuchadas ni desde el silencio.
ResponderEliminarUn beso.
Pues qué bien que soy la primera.
ResponderEliminarY ahora la tercera.
ResponderEliminarGracias, Pedro, por hacernos reflexionar.
Las puertas cerradas... siempre escondieron secreto.Muchas veces necesario...para que probemos nuestra propia llave...y al girar...los secretos de la vida...quizas...En lo particular, solo las puertas principales y por seguridad tienen llave...Gracias por otra puerta...Te dejo Un Beso.Silvi.
ResponderEliminarAlgunas cosas se quedan en el más absoluto de los secretos¡¡;))
ResponderEliminarUN BESOOOTEEEE GUAPOOO¡¡
El que huyo de allí, tuvo una dura caída... Según cuentan, claro!
ResponderEliminar;-)
En Lerma, en la bajada al sótano, en el rellano, mi padre había colocado una puerta de armario. Para tapar un desconchón en el enfoscado,eso decía él.
ResponderEliminarNunca le creí.
Toda puerta cerrada es un impedimento...quitemos manillas y cerrojos.
ResponderEliminarBesos!!
Como un reflejo de lo absurdo sin entrar sin salir detención del instante , del tiempo atrapado
ResponderEliminarMe gusto la reflexión , un saludo desde esta noche isleña
Estoy seguro de que en esa dirección hay una oficina municipal donde hay que ir para resolver algún expediente ridículo y redundante.
ResponderEliminarLa puerta es muy bonita, un poco abandonada pero si se lijara y barnizara quedaría toda una señora puerta, señorial y elegante... claro que no haría juego con el entorno... Besotes, M.
ResponderEliminarEn su día la puerta daría a alguna parte, a algún camino ,alguna calle.. y se quedó ahi en recuerdo de ese camino y esa calle que ya no existen..
ResponderEliminarbesos
Y a mi que me atraen estas puertas imposibles...Aunque reconozco que me gustan mucho más las ventanas.
ResponderEliminarUn abrazo
Luz
Me has hecho recordar una frase de Margueritte Yourcenaux que me gusta mucho: "La locura es más verdadera que la vida". Saludos Pedro, me encantó esta entrada y esta puerta para no salir o para no entrar.
ResponderEliminarNo cabe duda que esa puerta es del siglo pasado, el viento se llevó las decenas que faltan. Toda la fotografía está impregnada de color gris-plomo con leves manchas rojas, la memoria puede datar los números que faltan, años duros, trágicos y silenciosos en esa historia real que sucedió y que ahora es leyenda casi olvidada.
ResponderEliminarDetrás de toda puerta absurda hay una historia real! uf! esto me hubiera encantado escribirlo a mi en uno de mis poemas...
ResponderEliminarAbrazos.
Marian
sí, las puertas esconden muchas historias que si las supiéramos...
ResponderEliminarbicos,
Inalcanzable puerta... Mejor así... Demasiadas cosas encierra... pero es hermosa en su soledad...
ResponderEliminarBesos, Pedro, desde una Jaima ... sin puertas...
Yo nunca se si son para salir de nuestro entorno o para entrar en un mundo paralelo al que creemos pertenecer.
ResponderEliminarLa del número 19 no nos lo pone facial… Pardiez!.
Un abrazo
Creo como Selma, ue es mejor dejarla así, cerrada, con sus misterios dentro.
ResponderEliminarUn abrazo
Rafa
Hola.
ResponderEliminarEs una puerta para no salir, porque no sé quien va a querer entrar ahí.
Un saludo.
Una puerta de entrada con las bisagras por fuera. Ocasión pintiparada para, al abrir, dar en las narices al invitado que espera confiadamente fuera. Por tanto es una puerta ¡sorpresa!
ResponderEliminarPor cierto, maravillosa la foto.
La verdad que esa foto merecía ser comentada de esa manera.
ResponderEliminarCreo que se entra por el otro lado, porque las visagras están en éste (y a la derecha), lo del número 19 me parece una broma porque lo veo muy nuevo.
ResponderEliminarla foto es genial¡¡¡¡ la reflexión también
ResponderEliminarpara salir, para entrar, para mirarla desde dentro, ojearla desde fuera. Tienes razón la foto crea el sentimiento de crear o recrear las luces interiores.
ResponderEliminarbesos
Una puerta que se abre en la memoria remota. Què difìcil traspasarla.
ResponderEliminar¡ Cuchaaa, si es la puerta del pajar donde el tío Dionisio guardaba la paja pa las bestias !
Un abrazo, con el brazo mejor.
Hay puertas para entrar, para salir, para no hacer ninguna de las dos cosas.
ResponderEliminarHay puertas que es mejor no abrir...
Me fascinan las puertas.
Saludos.
Para mi hay puertas que nunca debieron ser abiertas, lo hice por equivocación... otras las tuve que cerrar con retranca para que no se abran, aunque de lo de su interior no te olvides...esa fue una de las razones de irme a la distancia...
ResponderEliminarahora la foto: cuando veo una casa abandonada, me da pena, es como si de su historia nadie se acordase, es preciosa la instantanea...
Pedro:
ResponderEliminarComo mañana publicaremos el manifiesto, para no interferir en los comentarios a èl con otros asuntos, he buscado tu email en tu perfil pero me da error.
Te lo digo para mandarte colaboraciòn sobre un cap. del quijote.
Yo tampoco montarè el comentario al cap., primero pondrè el Manifiesto.
Ya me diràs
Realmente una puerta para no ser abierta, de acceso casi imposible. Es como si se hubiera quedado ahí olvidada desde hace muchos años... Extraña y misteriosa... ¿qué secretos esconderá? Quizá es mejor que sigan ocultos.
ResponderEliminarBesos.
¿Preparado para el manifiesto de solidaridad?
ResponderEliminarTodos tenemos una puerta que permanece cerrada en el más sórdido de los silencios. Un beso Isabel.
ResponderEliminarPedro,con el Manifiesto se abre una puerta ... Gracias...¡!!Te Dejo Un Beso Silvi.
ResponderEliminarHola a todos: la preparación del manifiesto, que publicaré dentro de unos minutos y el comentario del Quijote de hoy, me ha impedido contestaros a tiempo. Espero que me sepáis disculpar. Un abrazo a todos y gracias.
ResponderEliminarTe disculpamos... Besotes, M.
ResponderEliminar¿Dónde está la llave? quizás sea mejor dejarla cerrada.
ResponderEliminarBesos, niño
En aquellos días hubo una huelga de ventaneros y el propietario de la casa tuvo que tapar el hueco con lo primero que pilló a mano....
ResponderEliminar(estas imágenes tuyas siempre me han gustado)
MERCHE: gracias. Besos.
ResponderEliminarDIANNA: ya la cruzamos en su día. ¿Queremos volver? Besos.
BIPOLAR: o primero hizo la puerta y luego la casa en el aire...
No es amistosa esa puerta, ya que no se mantiene abierta.
ResponderEliminarTAREIXA: y, además, hay que hacer equilibrios para abrirla...
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