He de reconocerlo. Cada vez me fijo más en los lugares en los que la naturaleza gana el espacio antes ocupado por el ser humano. Como si me hubiera puesto las gafas de ver nuestras grietas y comprendiera que ningún cemento puede impedirlo. Y no me da pena.
Cada vez que veo que las raíces de un árbol han arrancado parte del asfalto, o que las aguas se han ido por una dirección totalmente diferente a la que, estúpamente, alguien había intentado impornerles, me río por lo bajo.
ResponderEliminarEse es su gran poder: su inmensa y salvaje libertad. Je, Je.
A Natureza recompõe-se sempre das nossas agressões e acho de uma estúpida soberba alguém dizer ser possível dominá-la.
ResponderEliminarQuerido amigo mio, dulces sueños.
Que nos invada siempre.
ResponderEliminarSi las grietas son profundas, desde luego que no se pueden tapar, si se intentan volverán a salir, es lo que le ocurre al país.
ResponderEliminarSaludos
Preciosa forma de decirlo Pedro: "nuestras grietas". No, que no nos de pena que la Naturaleza se vuelva abrir paso por donde antes nosotr@s se lo cerramos.
ResponderEliminarUn beso querido Profesor
mj
Otra muestra mas de nuestra propia insignificancia...
ResponderEliminarSaludos...!
En la época de las plazas duras, allá por los 80, decidieron rellenar con adoquines la plaza principal de mi ciudad, una que está al Noroeste mirando desde el centro y con un faro muy antiguo. Fue muy divertido cuando entre aquellos adoquines empezó a crecer la hierba. Pareciera que se había cumplido aquel lema del 68 francés: debajo de los adoquines...
ResponderEliminarMe encanta tu reflexión.
Saludos cordiales
apenas nacemos ya comenzamos a agrietarnos...
ResponderEliminarbss
Metáforas....las amo! en PNL la viví profundamente, que belleza del pensar!
ResponderEliminarMis grietas, las tuyas las de la naturaleza son parte de nuestra vida...y les digo SI!...vengan!
Las miro, las propias, y las otras, las de la naturaleza, las riesgo de todas las formas, agua corriente, o de lágrimas de risa o de llanto...grietas de la vida! vengan!
besos profesor!
Ali
Pieno so mismo que tu. No sé si és si es por miedo, o por otra razón que no comprendo, pero la gente cada vez tiende más a reajuntarse a vivir encolmenas.Tenia un amigo que decia siempre que en las ciudades vivíamos en nichos para vivos.
ResponderEliminarCreo que tenia razón.
Saludos enormes.
Y pese a todo... la vida.
ResponderEliminar;)
Besos, Pedro.
Un pensamiento positivo.
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