Lo bueno es cuando ese óxido nos recuerda que algunas marcas de serie no nos favorecen, y que hay que ponerse cuanto antes manos a la obra para borrarlas... o, al menos, no dejar enrobinarse.
Hay marcas de agua, marcas de amor, marcas de dolor, esas heridas... marcas para siempre marcas que duran poco marcas superficiales, las que identifican... marcas internas, marca que te marca Pedro, un beso, de los que dejan marca...
La combinación del metal y el oxígeno deja estas señales imborrables y permanentes que nos recuerdan quienes somos, de donde venimos, que a veces se nos olvida...
Las marcas quedan grabadas para toda la vida, pero las más profundas son las marcas de las heridas del corazón, que aunque no se ven, se sienten y están ahí clavadas.
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Me gusta ese adn. No lo cambiaría por nada.
ResponderEliminarUn abrazo, Pedro.
que cierto
ResponderEliminarsin él no exisistimos y con él morimos igual
paradojas oxigenadas
besitos de luz
un preciosa semana
El tiempo arruga nuestra piel y destapa todas nuestras marcas ocultas, es nuestro sino.
ResponderEliminarY no lo puede remediar ninguna cirugía estética.
Saludos.
Lo bueno es cuando ese óxido nos recuerda que algunas marcas de serie no nos favorecen, y que hay que ponerse cuanto antes manos a la obra para borrarlas... o, al menos, no dejar enrobinarse.
ResponderEliminarSalud.
Marcas solares efecto de la protección.
ResponderEliminarSi algo me fascina, son estas breves y profunda reflexiones Pedro.
ResponderEliminarEres un excelente fotógrafo...hay que decirlo...
Quién más que los chilenos, sabemos la huella del cobre???
;-)
Una bella semana para tí!
Ali
Es que con la edad se acrecientan todos los defectos.
ResponderEliminarSaludos!
Yo debo ser la L.33. Besotes herrumbrosos, M.
ResponderEliminarHay marcas de agua,
ResponderEliminarmarcas de amor,
marcas de dolor, esas heridas...
marcas para siempre
marcas que duran poco
marcas superficiales, las que identifican...
marcas internas,
marca que te marca
Pedro, un beso, de los que dejan marca...
Cierto y cada vez tenemos más herrumbre.
ResponderEliminarSaludos.
La combinación del metal y el oxígeno deja estas señales imborrables y permanentes que nos recuerdan quienes somos, de donde venimos, que a veces se nos olvida...
ResponderEliminarBuena fotografía y idea.
saludos.
Je,je, yo tengo una marca de naciemiento espectacular en un sitio bastante.....Me lo recordaste.
ResponderEliminarBesos.
Hay quien pretende escapar al óxido con otras químicas que, finalmente, muestran aún más
ResponderEliminarY, ante ese hecho, poco podemos disimular.
ResponderEliminarSaludos
Como hierro al vivo sobre la piel.
ResponderEliminarRecien llegado de vacaciones, querido Pedro.
ResponderEliminarLeeré poco a poco tus posts atrasados, espero ponerme pronto al dia, y reintegrarme a nuestra querida lectura semanal del Quijote.
(por cierto, recibido tu correo. Yo apuesto por las Ejemplares). :)
Un enorme abrazo...!
uy, yo no tengo marca de serie, tal vez es que salí con una tara y por eso no me clasificaron... visto así ¡que suerte!
ResponderEliminarbiquiños,
garra
ResponderEliminarsobre vientre
Al menos, en el Lote 32 hay sol...
ResponderEliminarLas marcas quedan grabadas para toda la vida, pero las más profundas son las marcas de las heridas del corazón, que aunque no se ven, se sienten y están ahí clavadas.
ResponderEliminarUn beso.