tag:blogger.com,1999:blog-35865300.post512624508990704421..comments2024-03-19T08:52:51.523+01:00Comments on La acequia: La muerte de don Alonso Quijano (Cap. 2.74)Pedro Ojeda Escuderohttp://www.blogger.com/profile/15809677554967668019noreply@blogger.comBlogger53125tag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-15886213789670295262010-11-08T18:46:49.798+01:002010-11-08T18:46:49.798+01:00Si sigo en los Blogs, todo y el cierre del mío, es...Si sigo en los Blogs, todo y el cierre del mío, es a "La acequia" que lo debo, a la corriente de afectos que aqui se han tejido, a estas lecturas en buena compañia, bajo la batuta de su director y Amigo...Seguiré, como no, escuchando el correr de sus aguas y de cuando en cuando rompiendo, gustosamente, mi silencio, para reencontrarme con esos Amigos, TODOS y contigo, Pedro.. GRACIAS! <br /><br /><br />Un beso, para tí, para Todos...Martinehttps://www.blogger.com/profile/05308380278910659077noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-75936843056448651772010-11-07T23:17:09.926+01:002010-11-07T23:17:09.926+01:00Alguien me ha dicho, que ya que estuve en el 1º, d...Alguien me ha dicho, que ya que estuve en el 1º, debía estar en el último... aunque este libro da para que nunca de acabe de hablar sobre el.<br />Siento la escampada total y absoluta de los blogs.<br />Muchos besos, Pedro y saludos a los demás.Silvia_Dhttps://www.blogger.com/profile/12607069162533209678noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-43288857922967306472010-11-07T20:46:55.418+01:002010-11-07T20:46:55.418+01:00AQUÍ ESTAMOS DE NUEVO...
Llegó la tarde y con ella...AQUÍ ESTAMOS DE NUEVO...<br />Llegó la tarde y con ella la hora de la partida. Caminaron juntos don Quijote, Sancho y don Álvaro sobre media legua, tras la cual debía cada uno tomar su camino. Abrazó el granadino a don Quijote con una apertura de brazos, en la que luego no cabía Sancho -Sancho, hermano, que hermosos estamos-.<br /><br />Al poco, cayó la noche, y se apartó Sancho a acabar su flageladora penitencia. No perdió don Quijote la cuenta de los latigazos, llegando a contar hasta “tres mil y veinte y nueve”, con lo que quedó don Quijote contento sobremanera. <br /><br />A la mañana siguiente continuaron el camino de vuelta a la aldea, sin que se cruzase hembra a la que don quijote no fuese a observarle el físico y el rostro (¡anda que si la geografía llega a ser playera!), pero ninguna de ellas resultó ser Dulcinea desencantada.<br /><br />Ahora trascribiré el final del capítulo pues, por muy buena explicación que ofrezca uno, la pluma del complutense, hasta el día de hoy, no tiene parangón y no necesita comentario:<br /><br />Con estos pensamientos y deseos subieron una cuesta arriba, desde la cual descubrieron su aldea, la cual, vista de Sancho, se hincó de rodillas y dijo:<br /><br />"-Abre los ojos, deseada patria, y mira que vuelve a ti Sancho Panza, tu hijo, si no muy rico, muy bien azotado. Abre los brazos y recibe también tu hijo don Quijote, que si viene vencido de los brazos ajenos, viene vencedor de sí mismo; que, según él me ha dicho, es el mayor vencimiento que desearse puede. Dineros llevo, porque si buenos azotes me daban, bien caballero me iba.<br /><br />-Déjate desas sandeces -dijo don Quijote-, y vamos con pie derecho a entrar en nuestro lugar, donde daremos vado -fol. 274r- a nuestras imaginaciones, y la traza que en la pastoral vida pensamos ejercitar.<br /> Con esto, bajaron de la cuesta y se fueron a su pueblo<br /><br />Anexo:<br /> Enlace con una entrada que publiqué, hace ahora tres años, en mis inicios con el blog, sobre la muerte de don Quijote Ya me apasionaba entonces el tema y buscando y buscando por La Red tuve la gran suerte de topar con La AcequiaAntonio Aguilerahttps://www.blogger.com/profile/04209809762071604800noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-3403839387774036552010-11-07T20:45:33.507+01:002010-11-07T20:45:33.507+01:002.72
Pasaron don Quijote y Sancho el día de su lle...2.72<br />Pasaron don Quijote y Sancho el día de su llegada en aquel mesón-venta -que no castillo- (jugando al “subastao”, al ajedrez e, incluso, a la “gallinita ciega”), esperando la noche. El uno para acabar la falsa auto flagelación -o sea, la monda de los árboles-; tal vez contratado por la cuadrilla de Corcheros del Reino); el otro, amo del anterior, a la espera del acabamiento de tal faena: por ver a la señora de sus sueños desencantada (libre del acné seborreico, fístulas, llagas, apostemas y otras "peromias" que en su rostro habían enraizado).<br /><br />Mientras tanto, llegó a la posada un “caminante a caballo” (no sé si será igual que “un jinete a patitas”) acompañado de unos criados, quienes le comunicaron que aquel hostal carecía de chinchorros y otros parásitos chupópteros; además de disponer de clima controlado: vamos, que la venta era “limpia y fresca” (como se sienten las chicas que usan una determinada marca de compresas)<br />Se alojaron estos viajeros en una habitación frontera a la de don Quijote, también decorada con feas “sargas”, como las que había en la alcoba de don Quijote. Cide Hamete no menciona su calidad ni los motivos de estas pinturas, pero seguro que tan malos como el “falso Quijote”, que fue la conclusión que Cide Hamete sacó de los anteriores.<br /><br />Escuchó don Quijote, con el paquidérmico pabellón de su oreja aplastado contra la pared medianera del vecino, que aquel nuevo inquilino se llamaba don Álvaro Tarfe, personaje que él había leído cuando estuvo en la imprenta de Barcelona, en el Quijote del tordesillesco Avellaneda. <br /><br />Buscó don Quijote, entonces, conversación con aquel caballero. Se encontró con él en una sala baja, la más fresca del edificio, donde el señor de Tarfe había bajado “a lo de verano” (supongo que en pantalón corto y chanclas playeras). Allí, nuestro excaballero andante, sometió al de Tarfe, natural de Granada (que no Atarfe, población muy cercana a Granada), a un exhaustivo interrogatorio. Don Álvaro reconoció ante don Quijote que él había sido gran colega del otro don Quijote y que, por recomendación suya, aquel estrafalario caballero viajó hasta Zaragoza donde participó en sus “mañas” y famosas justas, obteniendo como trofeo el más grande de los ridículos, donde además organizó diversos alborotos y disturbios públicos. Por todo ello, el señor Tarfe dijo que se vio obligado a internarlo en el manicomio del nuncio de Toledo<br /><br />Una vez convencido don Álvaro Tarfe de que nuestra “inmortal pareja” era la auténtica, la original, la genuina y que, como rezan los anuncios publicitarios, no admitía imitaciones, quiso a petición de don Quijote, testificar ante el alcalde y por mano del escribano sobre la autenticidad de tan singular mencionada pareja. Este don Quijote que en este momento le acompaña, como bien señaló Sancho, era el máximo socorredor de todos los menesterosos del orbe, así como indudable “matador de doncellas", entre las cuales hacía estragos: como muestra la reciente Altisidora. Por su parte, Sancho era el más lleno de gracia (cual virginal criatura) de todos los escuderos del mundo, que a chorros la derramaba.<br /><br />SIGUE...Antonio Aguilerahttps://www.blogger.com/profile/04209809762071604800noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-18836285517560657132010-11-07T20:42:13.776+01:002010-11-07T20:42:13.776+01:00"El último de la fila" no sólo es el nom..."El último de la fila" no sólo es el nombre de un conjunto musical, sino tambien de un servidor que siempre llega tarde.<br /><br />PEDRO, he publicado mi comentario al 2.72 ya sabes que voy retrasaillo. He puesto al final un anexo con enlace para una entrada que publiqué hace tres años sobre "la muerte de don Quijote"; aunque quiero escribir algo más sobre este último capítulo, porque da mucha tela para cortar.Antonio Aguilerahttps://www.blogger.com/profile/04209809762071604800noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-45351890626340409892010-11-06T23:33:57.066+01:002010-11-06T23:33:57.066+01:00Al llegar a su fin el Ingenioso Hidalgo, mi don Mi...Al llegar a su fin el Ingenioso Hidalgo, mi don Miguel vuelve al principio. No quiso poner el nombre del lugar y fue para dar ocasión, a las villas y aldeas manchegas, a que se peleen por el honor de ser la cuna de don Quijote, como las ciudades griegas con Homero. <br /><br />Hubo llantos, aunque no se ponen aquí. Y nuevos epitafios, como el de Sansón que le compuso uno, dedicado al que murió cuerdo y vivió loco. Lo suyo no son los versos, no.<br /><br />Y ahora viene lo mío, porque Cide Hamete, ya sabéis quién, se dirige a mí y me coloca en una espetera, con un hilo de alambre. Me dice que viviré luengos siglos aquí, sin que me profanen los malandrines. Y me enseña lo que he de advertirles si llegan a mí, eso de “tate , tate folloncicos, de ninguno sea tocada”.<br /><br />Ahora declaro que don Quijote nació sólo para mí. Él y yo somos “para en uno”. Que no se atreva el “escritor fingido y tordesillesco”, con su grosera pluma de avestruz. No es asunto de su escaso ingenio, le he de advertir que deje en paz los huesos de don Quijote y no se los lleve de paseo por Castilla la Vieja.<br /><br />Y me dice mi señor que, con eso, cumpliré, con mi cristiano deber de aconsejar bien a quien mal me quiere. Y dice que él quedará satisfecho de haber cumplido su deseo, que no fue otro que hacer aborrecer a los hombres “las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías”. <br />La última palabra de este gran libro es “Vale”.<br /><br />Un abrazo para todos de María Ángeles Merino.Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-16035686265092040362010-11-06T23:33:56.707+01:002010-11-06T23:33:56.707+01:00Al llegar a su fin el Ingenioso Hidalgo, mi don Mi...Al llegar a su fin el Ingenioso Hidalgo, mi don Miguel vuelve al principio. No quiso poner el nombre del lugar y fue para dar ocasión, a las villas y aldeas manchegas, a que se peleen por el honor de ser la cuna de don Quijote, como las ciudades griegas con Homero. <br /><br />Hubo llantos, aunque no se ponen aquí. Y nuevos epitafios, como el de Sansón que le compuso uno, dedicado al que murió cuerdo y vivió loco. Lo suyo no son los versos, no.<br /><br />Y ahora viene lo mío, porque Cide Hamete, ya sabéis quién, se dirige a mí y me coloca en una espetera, con un hilo de alambre. Me dice que viviré luengos siglos aquí, sin que me profanen los malandrines. Y me enseña lo que he de advertirles si llegan a mí, eso de “tate , tate folloncicos, de ninguno sea tocada”.<br /><br />Ahora declaro que don Quijote nació sólo para mí. Él y yo somos “para en uno”. Que no se atreva el “escritor fingido y tordesillesco”, con su grosera pluma de avestruz. No es asunto de su escaso ingenio, le he de advertir que deje en paz los huesos de don Quijote y no se los lleve de paseo por Castilla la Vieja.<br /><br />Y me dice mi señor que, con eso, cumpliré, con mi cristiano deber de aconsejar bien a quien mal me quiere. Y dice que él quedará satisfecho de haber cumplido su deseo, que no fue otro que hacer aborrecer a los hombres “las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías”. <br />La última palabra de este gran libro es “Vale”.<br /><br />Un abrazo para todos de María Ángeles Merino.Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-58740010538442885852010-11-06T23:32:20.757+01:002010-11-06T23:32:20.757+01:00Cierra al testamento, se desmaya y se estira en l...Cierra al testamento, se desmaya y se estira en la cama. Vive tres días en los que se desmaya a menudo. Anda la casa alborotada, pero la apenada sobrina come, el ama brinda con el mejor vino y Sancho se regocija. Templa la pena esto del heredar, que ya sabe el escudero lo que pasa con los duelos, bien acompañados de pan.<br /><br />Llega su último día, recibe los sacramentos y mantiene la lucidez suficiente para seguir abominando de los libros de caballerías. Y muere, ay, muere mi don Quijote, cuyas aventuras yo alimenté con la tinta que fluye desde dentro de mí. Y no muere como un Amadís o un Palmerín, muere cristiana y sosegadamente, rodeado de su gente , que llora y se lamenta .<br /><br /> Veo que a vuestra merced, mujer amanuense, se le escapa una lágrima. Lleva tiempo en esto, me hago cargo. <br /><br />El cura pide al escribano, allí presente, que dé fe por testimonio como Alonso Quijano el Bueno, llamado don Quijote, ha muerto. Y lo hace para que evitar que otro autor, distinto a Cide Hamete Benengeli, lo resucite falsamente e invente falsas aventuras. <br />(Sigue)Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-14344925954270530762010-11-06T23:32:20.369+01:002010-11-06T23:32:20.369+01:00Cierra al testamento, se desmaya y se estira en l...Cierra al testamento, se desmaya y se estira en la cama. Vive tres días en los que se desmaya a menudo. Anda la casa alborotada, pero la apenada sobrina come, el ama brinda con el mejor vino y Sancho se regocija. Templa la pena esto del heredar, que ya sabe el escudero lo que pasa con los duelos, bien acompañados de pan.<br /><br />Llega su último día, recibe los sacramentos y mantiene la lucidez suficiente para seguir abominando de los libros de caballerías. Y muere, ay, muere mi don Quijote, cuyas aventuras yo alimenté con la tinta que fluye desde dentro de mí. Y no muere como un Amadís o un Palmerín, muere cristiana y sosegadamente, rodeado de su gente , que llora y se lamenta .<br /><br /> Veo que a vuestra merced, mujer amanuense, se le escapa una lágrima. Lleva tiempo en esto, me hago cargo. <br /><br />El cura pide al escribano, allí presente, que dé fe por testimonio como Alonso Quijano el Bueno, llamado don Quijote, ha muerto. Y lo hace para que evitar que otro autor, distinto a Cide Hamete Benengeli, lo resucite falsamente e invente falsas aventuras. <br />(Sigue)Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-65151697847451839062010-11-06T23:30:07.250+01:002010-11-06T23:30:07.250+01:00Sansón da la razón al buen Sancho, mas don Quijo...Sansón da la razón al buen Sancho, mas don Quijote no les deja seguir. No, no pueden tratarle como antes, ya no es el mismo, que “ya en los nidos de antaño no hay pájaros hogaño”. Fue loco, ahora es cuerdo; fue don Quijote, ahora es don Alonso Quijano el Bueno. Ahora, arrepentido y sincero, desea que vuelvan a estimarle como antes de su locura. <br /><br />Pide al escribano que siga, sabe que tiene poco tiempo. Deja su hacienda a su sobrina, Antonia Quijana, la cual pagará al ama el salario debido y veinte ducados para un vestido. Y, si la pobre muchacha quiere casarse, ha de hacerlo con hombre que no sepa qué cosas son libros de caballerías. Si lo hace perderá lo heredado, lo cual pasará a obras pías. No será fácil para Antonia cumplir este mandado, porque cualquiera, en esta aldea y sus alrededores, ha oído hablar de tales libracos, desde el humilde pastor al rico hacendado…<br /><br />Suplica a sus albaceas, Sansón y el cura, que si conocen al autor de “Segunda parte de las hazañas de don Quijote de la Mancha”, ´´ése que tanto daño hace a mi don Miguel, le pidan que le perdone. ¿Que le perdone? Sí, porque fue don Quijote el que le dio ocasión, al tal Avellaneda, de haber escrito tantos disparates. Sin don Quijote de verdad, no hubiera don Quijote falso. Bueno, pero no se disculpe su merced…<br /> (Sigue)Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-79169758904873703122010-11-06T20:20:16.742+01:002010-11-06T20:20:16.742+01:00En el último capítulo Don Quijote se reúne con su ...En el último capítulo Don Quijote se reúne con su alter ego para remediar ese terrible desapego de sí mismo, del señor Alonso Quijano y para irse después a la tumba tras poner en orden sus cosas. Sólo la proximidad de la muerte hace posible propicia este reencuentro. Pero eso es sólo la apariencia porque está claro que quien muere no es Don Quijote sólo se trata de Alonso Quijano. Don Quijote se ha esfumado en algún momento de este capítulo, seguramente en esas seis horas de sueño profundo que nuestro héroe se toma con tanta intensidad que todos le creen ya muerto.<br />Repasémoslo: después de librar su última lucha esta vez con las fiebres durante días y tras escuchar con calmoso ánimo la opinión del médico Don Quijote pide un tiempo para dormir<br />Es ahí donde debemos despedirnos de nuestro caballero. Hace ya varios capítulos que no es él mismo.Desde su derrota, la antorcha que le iluminaba se ha ido apagando sin remisión: parecía cada vez más cuerdo. No tiene fuerzas y un Quijote sin fuerzas tiene que ser por fuerza cuerdo<br />y ahora en la oscuridad y en la intimidad de ese sueño va a tener lugar el intercambio. Cuando abre los ojos es Alonso Quijano quien ha tomado el control y lo hace con sentencias no ya admonitorias sino condenatorias para con el errático y nefasto proceder de Don Quijote distanciándolo para siempre de sí. En el tiempo que Quijano usa para aderezar sus cosas, dictar testamento y nombrar albaceas, todo ello con un juicio frío y decepcionante para sus compañeros, una energía fría se disipa por todo el resto del capítulo<br />Por fin se tumba a todo lo largo en su cama y muere.<br />Vale. Conviene además que sea así: a Cervantes le interesa más que a nadie. Está obsesionado con los Avellanedas y no quiere más aventuras ni pastoriles ni nada... está tan obsesionado que todavía después de cerrado el sepulcro avisa contra los ladrones de tumbas a pesar de que quien está ahí enterrado sólo es Alonso Quijano el Bueno. Saludos a tod@s en el final de la aventura...que todavía no ha acabadoAnonymoushttps://www.blogger.com/profile/14779555438223385706noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-76801685013501205072010-11-06T19:58:32.518+01:002010-11-06T19:58:32.518+01:00El bachiller vuelve con el escribano y con el fiel...El bachiller vuelve con el escribano y con el fiel Sancho Panza que, al ver llorosas a las mujeres, comienza con los pucheros y los lagrimones.<br /><br />El cura da fe de que Alonso Quijano el Bueno “verdaderamente” se muere y está cuerdo. Si lo dice un sacerdote…Los ojos de los llorones se desbordan porque tanto don Alonso Quijano como don Quijote fue querido por todos.<br /> <br />Entra el escribano y, tras el encabezamiento y las mandas para misas y oraciones, llega a las mandas que interesan. Es su voluntad que no se le pidan cuentas a Sancho de los dineros de su señor. Que se cobre el sueldo y lo que quede, bien poco, sea para él. Y si estando loco le diera una ínsula, ahora como cuerdo le diera un reino. Y le pide perdón por haberle dado ocasión de ser contagiado de su locura, haciéndole creer que hubo caballeros andantes. <br /><br />Esto es demasiado para Sancho. Le suplica que no se muera, que la mayor locura que puede hacer un hombre es dejarse morir “sin que nadie le mate”, sin otras manos matadoras que las de la melancolía. Le anima a levantarse de la cama, irse los dos de pastores y encontrarán desencantada a Dulcinea. Y no ha de preocuparse por ser vencido, con echarle la culpa al escudero es suficiente. Y, además, es condición normal de los caballeros derribar y ser derribados.<br />(Sigue)Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-36672141193927101502010-11-06T18:11:03.221+01:002010-11-06T18:11:03.221+01:00Don Quijote ruega que le dejen dormir un poco. Due...Don Quijote ruega que le dejen dormir un poco. Duerme más de seis horas, despierta y proclama, a grandes voces, la divina misericordia, a pesar de los humanos pecados. La sobrina le pregunta por eso que dice de pecados y misericordias. Don Quijote le responde que ya tiene el juicio “libre y claro”, sin las sombras de la ignorancia que sobre él pusieron su “amarga y continua leyenda de los detestables libros de las caballerías”. ¿Ignorancia? ¿Amarga leyenda? ¿Detestables libros de caballerías? ¿Qué ha pasado? ¿Qué prodigio es esto?<br /><br />Serenamente, dice a su sobrina que se siente “a punto de muerte”. Y, puesto que ha sido loco, no quiere morir como tal. Pide la presencia de sus “buenos amigos”. Ya saben: el cura, el bachiller Sansón Carrasco y el barbero Maese Nicolás. Porque quiere confesarse y hacer testamento, lo normal para un hidalgo cristiano. <br /><br />Antonia no ha de buscarlos, que ya están aquí los tres. Don Quijote los recibe pidiendo albricias porque ya no es don Quijote de la Mancha, sino Alonso Quijano el Bueno. Su metamorfosis es tal que ahora es enemigo de Amadís de Gaula y su linaje. Ahora le son odiosas sus historias, conoce su necedad y su peligro. <br /><br />El trío oye esto y creen estar ante una nueva locura. Sansón le lleva la contraria. ¿Ahora que tenemos desencantada a Dulcinea? ¿Ahora que van a ser pastores? ¿Ermitaño?<br /><br />Don Quijote les pide que se dejen de burlas, que se está muriendo. Han de traerle un confesor y un escribano. Todos se miran admirados. Si al principio dudan, después de oírle tantas cristianísimas y concertadísimas razones...No hay duda, está cuerdo.<br /><br />El cura hace salir a la gente y lo confiesa. <br /> (Sigue)Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-68070719693215818272010-11-06T18:10:28.848+01:002010-11-06T18:10:28.848+01:00Soy la pluma del señor Cervantes. En realidad, soy...Soy la pluma del señor Cervantes. En realidad, soy una entre las muchas que tuvo en sus manos, raspando el papel de trapo, mientras la tinta se vertía dócilmente, dando vida a tantos personajes. <br /><br />Les cuento. Don Quijote está apesadumbrado y sus amigos creen que la causa es su vencimiento y el no cumplido desencanto de Dulcinea. Procuran alegrarle y Sansón le anima a levantarse, para iniciar la vida pastoril, con unos buenos perros guardianes que ha comprado. El bachiller socarrón se las da de poeta y dice haber compuesto una égloga mejor que las de Sannazaro.<br /><br />Llega el médico con sus rutinas, le toma el pulso, no le contenta y dice que atiendan a la salud de su alma porque la del cuerpo corre peligro. Don Quijote reacciona sosegadamente, no le importa morir; mas ama, sobrina y escudero lloran como si ya tuvieran delante su cadáver. “Melancolías y desabrimientos” le están matando, opina el galeno.Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-42208019188983657962010-11-06T00:37:41.013+01:002010-11-06T00:37:41.013+01:00Vuelvo hoy a ver si estando un poco más lúcida (cu...Vuelvo hoy a ver si estando un poco más lúcida (cuidado, que sólo he dicho "un poco") capto algo más.<br /><br />Me ha gustado eso de "hacerlo morir como deben morir los cristianos ejemplares del momento". Reconozco que mi desconocimiento sobre la época es grande, y nunca se me hubiera ocurrido pensar que también para eso había unas pautas a seguir.<br /><br />Los ataques a Avellaneda con cesan ni con la muerte a la vuelta de la esquina. Se ve que le afectó de manera obsesiva.<br /><br />Gracias por la aclaración sobre los jueves venideros. <br />El continuar con otras entradas posteriores para cerrar la obra nos ayudará a que el duelo lo vivamos de forma más progresiva y no de golpe y porrazo. Además antiguamente, ¿no se concluía toda la ceremonia del velatorio, funeral y entierro con una comida familiar? Por lo menos en el caso de mis abuelos es el recuerdo que yo tengo. Así que nosotros también lo haremos de este modo, con una comida de esta pequeña gran familia que hemos conformado a través de esta lectura, y que espero y deseo que tenga continuidad a través de otras lecturas, siempre y cuando nuestro querido PEDRO esté de acuerdo.<br /><br />GRACIAS, PEDRO, por haberla hecho posible y haber manejado el timón con tan buena mano. <br /><br />Besos a todos. Esto todavía no ha acabado.Asunhttps://www.blogger.com/profile/10673659964934698388noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-44887296351948858572010-11-05T23:07:56.167+01:002010-11-05T23:07:56.167+01:00-Saludo a vuestra merced, mujer amanuense. Yo le c...-Saludo a vuestra merced, mujer amanuense. Yo le contaré el capítulo. Puedo hacerlo, con éste y con otros anteriores…Yo estaba allí. Soy:..<br /><br />-¿El médico? ¿La sobrina? ¿Aquel “mozo de campo y plaza” del que nunca más se supo?<br /><br />-No, no soy humano. Formé parte, eso sí, de un ser vivo. Cervantes me concede el don de la palabra, al final del capítulo; aunque luego comete la grosería de colocarme junto a las cacerolas. Soy de “pato, cisne, cuervo o pavo” y han de darme frecuentes cortes, para mantenerme afilada. Con la ayuda de un líquido negro, escribo mejor que su infernal y luminosa maquinita. Péñola o cálamo me llaman. Soy…Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-84782342166554987032010-11-05T23:04:46.374+01:002010-11-05T23:04:46.374+01:00"Señores...vámonos poco a poco, pues ya en lo..."Señores...vámonos poco a poco, pues ya en los nidos de antaño no hay pájaros hogaño”<br /><br />Tantos comentarios, tantos capítulos y aquí estoy, dando vueltas al último, el LXXIV, tan importante. Quiero que me salga bien… Leo, releo, en el primer párrafo, que las vidas humanas no son eternas y la de don Quijote tampoco. Que ningún humano tiene ese privilegio del cielo y don Alonso no puede detener su “acabamiento”. Que muere de la melancolía del vencido o de una calentura de seis días, no se sabe… Le visitan el cura, el bachiller y el barbero. Sancho Panza no es una visita sino una presencia continua, al pie de su cabecera. Me voy al título, lo casca todo: cae malo, hace testamento y muere. Ya, en el capítulo anterior, pide al ama y a la sobrina que lo llevan al lecho…<br /><br />Y yo sigo atascada, no me vendría mal la ayuda de alguno de esos secundarios que me visitaron en tantas ocasiones. ¡Eh! ¡A mí los personajillos! ¿Hay alguien ahí? <br /><br />La pantalla bailotea y no obedece al ratón. ¡Quieta! ¿Quién está ahí?Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-25006323453224853882010-11-05T23:00:26.708+01:002010-11-05T23:00:26.708+01:00Ayer intenté subir el comentario como siempre, fue...Ayer intenté subir el comentario como siempre, fue imposible. Parece que ahora se admiten trozos de texto más pequeños. <br /><br />Encantado de que hayas decidido alargar tus explicaciones de la obra, así la despedida será más poco a poco (ya se van pegando las expresiones cervntinas)y tendremos más tiempo para asimilar la despedida. <br /><br />Un abrazopanchohttps://www.blogger.com/profile/04839916292398070858noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-47302107362415232752010-11-05T22:56:18.281+01:002010-11-05T22:56:18.281+01:00Tantos comentarios, tantos capítulos y aquí estoy,...Tantos comentarios, tantos capítulos y aquí estoy, dando vueltas al último, el LXXIV, tan importante. Quiero que me salga bien… Leo, releo, en el primer párrafo, que las vidas humanas no son eternas y la de don Quijote tampoco. Que ningún humano tiene ese privilegio del cielo y don Alonso no puede detener su “acabamiento”. Que muere de la melancolía del vencido o de una calentura de seis días, no se sabe… Le visitan el cura, el bachiller y el barbero. Sancho Panza no es una visita sino una presencia continua, al pie de su cabecera. Me voy al título, lo casca todo: cae malo, hace testamento y muere. Ya, en el capítulo anterior, pide al ama y a la sobrina que lo llevan al lecho…<br /><br />Y yo sigo atascada, no me vendría mal la ayuda de alguno de esos secundarios que me visitaron en tantas ocasiones. ¡Eh! ¡A mí los personajillos! ¿Hay alguien ahí? <br /><br />La pantalla bailotea y no obedece al ratón. ¡Quieta! ¿Quién está ahí? <br /><br />Saludo a vuestra merced, mujer amanuense. Yo le contaré el capítulo. Puedo hacerlo, con éste y con otros anteriores…Yo estaba allí. Soy:..<br /><br />¿El médico? ¿La sobrina? ¿Aquel “mozo de campo y plaza” del que nunca más se supo?<br /><br />No, no soy humano. Formé parte, eso sí, de un ser vivo. Cervantes me concede el don de la palabra, al final del capítulo; aunque luego comete la grosería de colocarme en una espetera, junto a las cacerolas. <br /><br />Soy de “pato, cisne, cuervo o pavo” y han de darme frecuentes cortes, para mantenerme afilada. Con la ayuda de un líquido negro, escribo mejor que su infernal y luminosa maquinita. Péñola o cálamo me llamaban . Soy…Abejita de la Vegahttps://www.blogger.com/profile/01341099240668710000noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-80862891299758396202010-11-05T21:46:06.114+01:002010-11-05T21:46:06.114+01:00Después de tantas aventuras, todo llega a su fin. ...Después de tantas aventuras, todo llega a su fin. Cervante lo borda en el final. Sublime.FERNANDO SANCHEZ POSTIGOhttps://www.blogger.com/profile/00848098543476225874noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-13275713834334399422010-11-05T21:37:29.712+01:002010-11-05T21:37:29.712+01:00Mi Señora Merche,
Siento la confusión en mi trocea...Mi Señora Merche,<br />Siento la confusión en mi troceado y pesado comentario, podría [<a href="http://lamaldiciondecapistrano.blogspot.com/2003/10/el-zorro-y-el-balcon-z-noviembre2010.html#QIIcap274" rel="nofollow">verlo aquí de seguido</a>], si prefiere.<br /><br />La culpa de ello, es que desde hace semanas Blogger vuelve a limitar la extensión de comentarios, algo por otro lado saludable, ya lo había hecho una vez, y ahora con la nueva gestión que ha habilitado lo volvió a revisar a la baja.<br /><br />Es saludable, porque los ‘comentarios’ deberían ser comentarios y no ‘entradas’ ‘artículos’ o ‘relatos más latosos que el Quijote’.<br /><br />En realidad si hay necesidad de escribir mucho se debería crear por parte del comentarista una entrada en su espacio web, y dejar solo una breve introducción y link hacía el texto completo donde fuere.<br /><br />Pero, no es fácil actualmente hacerlo, es engorroso y justo por eso es una carencia más en la edición de comentarios de blogger, el no habilitar un botón de enlace [url], que facilite la edición de hipervínculos, así podríamos aprovechar la ventaja de lo interactivo y evitar tan largas peroratas.<br /><br />Aunque me temo que por lo normal y en general en los comentarios de los comentaristas, sobran la mayoría de caracteres antes de llegar a cualquier límite.<br />Suyo, Z+-----Señor De la Vegahttps://www.blogger.com/profile/10773556508610915114noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-63723158395532387082010-11-05T19:44:16.466+01:002010-11-05T19:44:16.466+01:00paso a saludarte pedro...
que estes bien...
besos...paso a saludarte pedro...<br /><br />que estes bien...<br />besos<br />:)sau<br />SAUAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-48688547187767137342010-11-05T16:32:10.484+01:002010-11-05T16:32:10.484+01:00OK 4 de diciembre ¿dónde? Besotes, M.
¡Genial nu...OK 4 de diciembre ¿dónde? Besotes, M.<br /><br />¡Genial nuestro SEÑOR DE LA VEGA! Un poco enrevesadas sus "continuaciones" pero interesantes sus conclusiones, como siempre.Merche Pallaréshttps://www.blogger.com/profile/00863932352403193656noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-69634973951159106382010-11-05T14:32:55.136+01:002010-11-05T14:32:55.136+01:00Buenos días, profesor Ojeda:
Navegando por intern...Buenos días, profesor Ojeda:<br /><br />Navegando por internet, a veces, se encuentran tesoros. Su 'acequia', casi nuestra, fue uno de ellos.<br />Y en ella, de forma especial, 'las citas' con Don Quijote, con sus explicaciones y los encuentros con los comentaristas. Desde que saqué el libro de la estantería, no ha vuelto a ocuparlo. Está y seguirá estando al alcance de la mano, acompañado de distintas ediciones, para mirar una y otra vez los pasajes que no quieren ser olvidados.<br /><br />Le seguiremos a usted, en la próxima lectura, que sin duda será otra nueva aventura maravillosa, como ésta con nuestro Alonso Quijano el Bueno.<br /><br />No podré ir a la comida, pero habrá tiempo y forma para continuar con todos los compañeros.<br /><br />¡GRACIAS!. Un abrazo para usted, y para todos y cada uno. Gelu<br /><br />P.D.: Qué bien le ha retratado el Señor de la Vega, en sus catorce versos quevedianos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-35865300.post-91257856426885457492010-11-05T14:27:29.855+01:002010-11-05T14:27:29.855+01:00Que buena reseña.
Concuerdo con Cornelius, en que...Que buena reseña.<br /><br />Concuerdo con Cornelius, en que las "aventuras" del Quijote, no han existido, en realidad, y solo han estado en su cabeza. <br /><br />Quizàs, ante esa certeza, es que reniega de los libros de caballerìa.<br /><br />Un abrazo.El Gaucho Santillánhttps://www.blogger.com/profile/08633065113458045359noreply@blogger.com