jueves, 10 de mayo de 2018

Diario de un arrepentido. La verdad final de Akúside y noticias de nuestras lecturas


¿Qué sucede cuando el héroe de la independencia de una nación deja de creer en las bases fundacionales del nacionalismo que la nutrieron? Este es el planteamiento final de la novela de Ángel Vallecillo. El general Axiámaco escribe un diario en el que deja constancia de cómo pierde la fe en las leyes y se arrepiente del camino que inició de joven. Para ello no han bastado los crímenes, la visión de una patria desolada por la aplicación del Retorno al mundo rural, la cercanía con la corrupción practicada por su hermano al frente del país, etc. Ha tenido que recibir un golpe personal: su hijo ha de ser sacrificado en cumplimiento de una ley absurda y es lapidado. Este sacrificio ritual le abre los ojos, el dolor de la pérdida le conmueve por dentro y le hace replantearse toda su vida. Aún así, sigue al frente de la nación unos años porque la inercia pública es imposible detenerla.

La sangre termina por devorar a los que la provocaron; el dolor ajeno se convierte antes o después en el dolor propio; lo absurdo de una nacionalismo del estilo del retratado en Akúside cae sobre aquellos que protagonizaron los primeros pasos. La inercia de una ideología de este tipo es imparable y termina aplicándose siempre aunque parezca absurda porque ya no se habla a la razón sino a las tripas.

Akúside deja un amargo sabor al lector, que ha reconocido muchas de las cosas que en ella se retratan, las ha vivido y escuchado en el pasado reciente y en el presente con proyección futura. La lectura de Akúside no es fácil, no solo por la estructura arriesgada y vanguardista sino sobre todo por esto que comentamos, porque nos enfrenta a emociones que sin el control de la razón nos pueden conducir al mundo reflejado en esta distopía o a uno muy próximo a él, quizá con rostro más amable pero en el que el mar profundo tiene la misma textura. Un riesgo más cercano de lo que nos parece, como ha demostrado la historia.

Noticias de nuestras lecturas

Machete en mano, Mª Ángeles Merino se interna por la páginas de Akúside con la ayuda de su amiga Austri y enlaza la dureza de la narración con las noticias recientes sobre la disolución de ETA... Os invito a reflexionar en esta entrada sobre historia, terrorismo, nacionalismo y literatura.

Pancho comenta las referencias míticas y bíblicas de la novela, siempre llenas de sacrificios rituales y sangre. No os perdáis lo que dice sobre el ritmo narrativo de la novela... ni a Sabina.

Recojo en estas noticias las entradas que hasta el miércoles han publicado los blogs amigos.
Entrada del Club de lectura cada jueves, en este blog, aunque en las últimas semanas no haya podido cumplir esta promesa por diferentes cuestiones que espero se vayan remansando en las próximas.
Información sobre el presente curso en el club en este enlace.

Anuncio de la próxima lectura


Comenzamos la lectura de Los refugios de la memoria de José Luis Cancho, que nos ocupará  hasta la primera semana de junio. Los refugios de la memoria (Madrid, papeles mínimos, 2017) es un libro en el que el autor relata su experiencia personal desde que en la mañana del 18 de enero de 1974 cayera al vacío desde una de las ventanas del tercer piso de la comisaría de policía de Valladolid sita en la calle de Felipe II. Este trabajo de la memoria le lleva a narrar la represión del régimen dictatorial de Franco y sus crímenes contra la libertad pero también la maquinaria de las organizaciones en las que militó, que anulaban al individuo. Aquellos que lean este libro solo como un testimonio antifranquista escrito por alguien que se hizo famoso en España por aquellos hechos de 1974 en los que pertenecer a la oposición era jugarse la vida se equivocan completamente. Cancho abandonó la militancia activa y comenzó la búsqueda de su propia identidad hasta encontrarla en un viajero nómada que pudo desarrollar, finalmente, su dedicación a la escritura. El valor de este libro definido por el autor como un autorretrato fragmentario no está solo en el trabajo de la memoria y el testimonio de un tiempo de transición y una vida sino también en la propia escritura: un estilo depurado, esencial, desnudo casi, lleno de magníficos hallazgos trabajados con la elipsis, la eliminación de lo superficial y el lirismo en ocasiones. También con la reflexión sobre la escritura. Siempre interesante.


Final de curso



Este curso ha resultado intenso y para cerrarlo os propongo la lectura, en el mes de junio, de una  novela que os sorprenderá: El pisito: novela de amor e inquilinato de Rafael Azcona. Rafael Azcona (Logroño, 1926 - Madrid, 2008) es, para muchos, el mejor guionista de la historia del cine español, pero lo que no es tan conocida es su faceta como escritor. El pisito se publicó en 1956 y sobre ella escribió el mismo Azcona el guion para la película dirigida por Marco Ferreri, estrenada en 1959, con el que debutara en el cine. La película es una de las obras clásicas del cine español de todos los tiempos. En 2009 se adaptó al teatro con relativo éxito de público, en una versión que a mí me dejó insatisfecho. Descubramos, pues, el relato original sobre el que se hicieran la película y la obra de teatro. Hay varias ediciones en el mercado. Os recomiendo la publicada en la editorial Cátedra por Juan A. Ríos Carratalá. Aparte de un magnífico estudio introductorio, cuenta con la incorporación de fragmentos que se suprimieron en 1956 para evitar la censura de la dictadura de Franco. El curso se cerrará a finales del mes de junio con una comida a la que todos los seguidores de este club podrán apuntarse.

4 comentarios:

SAU dijo...

holi pedro...este comentario no tiene que ver con la lectura si no con la imagen...esa cara con orejas d animal..me produce escalofrios... quizas suene graciosos pero bueno siempre supongo que dare un comentario muy diferente al resto....jjjj
Algun dia pondras un "jajajajaja " en algun comentario?? ( se que te estas sonriendo ya

besines
SAU
:)

Ángel Vallecillo dijo...

Gracias, Pedro, por esta atención prestada a Akúside. Es un placer para un escritor poder leer lo que un lector atento escribe sobre tu libro. Gracias de corazón a ti, y a todos los que colaboran en tu club de lectura. Espero veros pronto.

El arrepentimiento de Axiámaco es un canto de esperanza. Creo que hay muchos terroristas, pero muchos, que hoy se arrepienten de lo que hicieron. El arrepentimiento es humano. Hubo padres que confundieron a sus hijos. Ellos, los padres, no se mancharon las manos de sangre, pero no les importó que sus hijos (con 16, con 18 años) sí lo hicieran. Por eso Aitor quería morir, porque el culpable no era el hijo, sino el padre. La curación de Akúside.

Hoy he leído en alguna parte un antiguo tuit del candidato a president de la Generalitat. Hizo un comentario despectivo sobre "los del otro lado del Ebro". El Ebro es el río Abur de Akúside. El río como frontera étnica. Tan absurdo. Me quedo sin palabras.

¡Muchos abrazos!

Abejita de la Vega dijo...

En Akúside están las claves de los nacionalismos extremos que el mundo ha padecido. El camino hacia el arrepentimiento es muy largo y espinoso.

Esta lectura nos ha llevado a reflexionar y Ángel Vallecillo ha estado ahí, junto a nosotros, lo cual es de agradecer. Y lo dicho: más valor que Gerineldo.

Pasamos a la de José Luis Cancho que leí sin darme cuenta de que leía un libro, era como si hubiera tenido una conversación con un compañero de mis tiempos de estudiante. Sencillo y con su dosis justa de poesía.

Un abrazo

pancho dijo...

No hace falta ser un escritor profesional o un crítico laborioso para darse cuenta de que detrás de esta novela hay un trabajo arduo en la estructura y ordenamiento de materiales narrativos. Un lector un poco atento es suficiente. Dar forma y poner en orden tantos frentes que intervienen en la historia requieren muchas horas de vuelo. Me acuerdo ahora de las columnas periodísticas, a favor y un poco en contra de la política después de la independencia, perfectamente intercaladas en la narración.Y esa creación de los cios líticas es genial. El adolescente clavero del manual de instrucciones es un regreso a lo más oscuro de la Edad Media, cuando los aristócratas privilegiados eran los centinelas de la cultura, no fuera a difundirse y perdieran los privilegios del saber.
Se ha pasado el mes sin darnos cuenta, sin vender ni una escoba.
Tener al autor, Angel Vallecillo, comentando aquí y en nuestros blogs las ocurrencias que la lectura de su novela suscita en uno es cosa de agradecer. Se nota que el coordinador va teniendo mano entre los autores... De algo tendría que valer llevar una decena de años enredado en estas redes digitales.
Un abrazo.