viernes, 7 de julio de 2017

Como avena silvestre tu cabello


Como avena silvestre tu cabello
en la mañana húmeda de la sierra de Béjar.
Ayer llovió con hambre ferocidad de otoño,
con los robles hincándose en las nubes;
hoy brillan los nogales ya cargados de frutos,
las peñas espejadas y los silbos del viento.

¡Qué limpia se despeina la melena
pajiza al sol que lame la montaña
cuando tu boca dice
frescor de agua profunda
y verde!

© Pedro Ojeda Escudero, 2017

7 comentarios:

Myriam dijo...

El poema es bellísimo como bellísima,
su destinataria. ¡Enhorabuena!...
y que continúe por siempre inspirándote
como nosotros leyéndote,

Besos x2

Edurne dijo...

¡Pues sí,
la rubia de verde mirada
ha de estar totalmente desmayada!
(Yo lo estaría).

Besos.
;)

Luis Antonio dijo...

Todo tiene su encanto: la tormenta y la calma posterior, pero tus palabras, sutilmente elegidas, lo incrementan más, si cabe.

Un abrazo

Fackel dijo...

O cuando la naturaleza nos proporciona los elementos de las metáforas que hacemos nuestras, que unimos a nuestra propia naturaleza sensorial. Qué estimulante poema.

Abejita de la Vega dijo...

Estoy con Edurne.

andandos dijo...

Creo que es preciosos y sentido.

Un abrazo

Alimontero dijo...


He apreciado por estas tierras lejanas a las mías todo lo que dices...aquí en Suecia, al sur, Skona, todo es asi....y se siente y se admira todo lo que aquí, maravillosamente, describes.
Gracias Pedro por tu presencia y sensibilidad.

Beso,

Ali