sábado, 19 de septiembre de 2015

Grité piel


En San Frutos, al atardecer, grité piel. Y el eco de las hoces del Duratón me devolvía tu piel multiplicada. Se ponía el sol lentamente cuando me giré para besar tu cuello. Sonreías.

10 comentarios:

Alimontero dijo...

Me gustaría tanto abrir un espacio para recibir estos mensajes...
son amor puro y del bueno...
un beso,

Ali

Gelu dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Qué suerte encontrar la palabra mágica. Y la compañía, claro.
Entonces, las sonrisas cómplices están aseguradas.

Saludos

María dijo...

¡Qué bonito lo que has escrito, Pedro!

Ponerse el sol lentamente y girarte para besar su cuello, y ella sonreía, he imaginado esa escena, y me parece de lo más tierna, me ha encantado.

Un beso.

manolo dijo...

Muy breve.
cuanto mas breve, mas te haces desear.
Me gusta, volveré con cierte frecuencia, para leerte.

Si tienes un poco de tiempo y visitas mi blog, comprenderás, el por que de esa brevedad.

manolo
.

pancho dijo...

Habrá labios, seda para la piel.

Ele Bergón dijo...

En el Duratón, a lo lejos San Frutos y más allá ese bello atardecer.A tu lado, compartiéndolo todo, la persona amada. ¿ Puede existir más dicha? Felicidades a los dos.


Besos

andandos dijo...

Recuerdo, más o menos, el programa de Labordeta sobre la Hoces del Duratón, a propósito de las acerollas. En lugares así nos elevamos, solos o acompañados, sobre la realidad semanal.

Un abrazo

Kety dijo...

Buenos días.
Buen final para un comienzo, o, una contnuidad.

Un abrazo

Campurriana dijo...

Preciosa tierra la de mi sangre.

XuanRata dijo...

La del paisaje es la fotografía más difícil: hay mucho que podar en un paisaje para que su fotografía se le acerque. Como en esta: luz, sombra y una mínima pero indudable caligrafía humana. El paisaje de la piel y la piel del paisaje.

Un abrazo.