Hay ciertamente algunas obras que me decepcionan precisamente por ser demasiado perfectas. El Quijote está lleno de errores de bulto y de inexactitudes que no le restan valor. La perfección es fría. Yo estimo más lo bueno con un toque de imperfección, de humanidad que lo hace cálido y cercano a nosotros. La perfección es para lo dioses.
Me aburre bastante la estética de la arquitectura de los edificios actuales. Tan cubista, tan monótona. Como cajas de zapatos. Y en algunos casos les da por pintar sus fachadas de negro. Dan ganas de ir con una enorme brocha y empezar a salpicar colores. La perfección no existe, ¿por qué entonces esa obsesión por aparentarla? Saludos.
Yo también soy de las de romper la perfección que nos están imponiendo que siento como sinónimo de censura, y que nos intentan imponer a todos alineándonos a todos como autómatas en universos asépticos y ordenados, donde no cabe nada que venga a perturbar este orden que están estableciendo y globalizando.
9 comentarios:
Sin duda. No hay nada peor que la completa perfección.
Hay ciertamente algunas obras que me decepcionan precisamente por ser demasiado perfectas. El Quijote está lleno de errores de bulto y de inexactitudes que no le restan valor. La perfección es fría. Yo estimo más lo bueno con un toque de imperfección, de humanidad que lo hace cálido y cercano a nosotros. La perfección es para lo dioses.
A perfeição humana é a imperfeição !
beijinhos, amigo mio.
Me aburre bastante la estética de la arquitectura de los edificios actuales. Tan cubista, tan monótona. Como cajas de zapatos. Y en algunos casos les da por pintar sus fachadas de negro. Dan ganas de ir con una enorme brocha y empezar a salpicar colores.
La perfección no existe, ¿por qué entonces esa obsesión por aparentarla?
Saludos.
Ese edificio me parece una casa de muñecas. Lo de la imperfección no lo había notado.
El árbol sin hojas es el elemento extraño, lo que rompe el conjunto tan bien trazado, a simple vista.
Yo también soy de las de romper la perfección que nos están imponiendo que siento como sinónimo de censura, y que nos intentan imponer a todos alineándonos a todos como autómatas en universos asépticos y ordenados, donde no cabe nada que venga a perturbar este orden que están estableciendo y globalizando.
Besos, Pedro.
Completamente de acuerdo. No me gusta lo demasiado perfecto, prefiero el caos. Es más humano.
Un abrazo
Luz
¿Labor para los Graffiti?
Publicar un comentario