viernes, 4 de julio de 2014

Qué hacer después de tomar la Bastilla



- Has estado fuera demasiado tiempo, hermano. ¿Qué tal va el mundo?
- Sin novedad, sin novedad. La revolución no llega. Pregunté por ella pero no he visto mucha gente dispuesta. En el fondo la mayoría no quiere cambiar el mundo sino vivir como el diez por ciento.
- Pero eso iría contra la lógica matemática, ¿no crees? Tampoco sería sostenible. ¿Y qué hacen mientras tanto?
- Bueno, algunos se mueven. Es cuestión de esperar un poco a ver cuánta gente más puede soportar vivir en los márgenes del sistema. Es un principio que siempre se ha cumplido en la historia. Cuando hay muchos descontentos, alguien capitaliza sus sentimientos y se toma la Bastilla. Y ahora hay mucha gente preparada. Lo interesante es sabe qué hacen después de tomarla. Algunos se enredan en la pirotecnia de los años triunfales.

10 comentarios:

Edurne dijo...

Allons enfants de la patrie...!
La veremos nosotros? La toma de La Bastille, digo...

Besos revolucionarios.
;)

DORCA´S LIBRARY dijo...

No sé si es que hemos desarrollado tanto nuestra capacidad de adaptabilidad, que vamos a terminar por ser capaces de vivir sin aire.
¿Es miedo, o tal vez sólo comodidad? ¿Tal vez inmadurez para caminar sólos sin necesidad de alguien que nos indique constantemente por dónde pisar?
Cúantas dudas. Y mientras hay una revolución pendiente.
Un abrazo.

Antonio Aguilera dijo...

Debemos saber diferenciar entre los q quieren vivir como el 10% y los que luchan por una mayor justicia económica y social dentro del respeto al planeta. Unos y otros protestan

lichazul dijo...

hay revoluciones que no cesan por mucha historia que carguen

bss

Joselu dijo...

Ya no hay revoluciones posibles salvo las de la ciencia. El periodo de las mismas ha concluido, todo está probado y no hay alternativa real al capitalismo, tal vez ajustes parciales. La palabra revolución para mí fue un fetiche en mis años jóvenes, tenía magnetismo tanto en el campo político como en la literatura que era lo mío. Sin embargo, hoy veo que es una palabra desprovista de contenido para mis alumnos jóvenes que no aspiran a cambiar ya el mundo sino a integrarse en él. Ha dejado de tener lugar la utopía. Ya no creemos en ella visto lo que hemos visto. Pero tal vez sea la opinión de un escéptico a la que no hay que conceder demasiado crédito. ¿Revolución? ¿Hacia dónde? Pero si seguimos así, nos abocamos al desastre ecológico y ambiental. Saludos.

Ele Bergón dijo...

- Sí algunos se mueven y a veces se desesperan porque la mayoría sigue inmóvil.

Un abrazo

Luz

LA ZARZAMORA dijo...

Mucho me temo que en España no se tome ni la Puerta de Alcalá...
Besos desalentores hoy, Pedro.

andandos dijo...

Bueno, vivo ahora mucho más atento que hace unos años, incluso que hace unos meses, a lo que pasa, a lo que parece que pasará y a lo que me dicen. No es tan fácil, ya, engañarme.
No estoy del todo seguro, pero creo que la foto, supongo que voluntariamente, está girada, de tal manera que lo importante, que según algunos cánones, debiera estar a la derecha (tú apareciendo en la foto por la derecha), aparece a la izquierda, y la mirada, al principio, va directa a la persiana de la tienda. Igual me equivoco, también puede ser, en cualquier caso tú mandas, claro está.

Un abrazo

São dijo...

A Bastilha será tomada em nossos tempos, sim....porque tudo se está tornando insuportável e paciência tem limites!!

Querido amigo, boa semana

impersonem dijo...

La olla a presión se está quedando sin válvulas de escape (el fútbol, la religión y otras adormideras cada vez las fuma menos gente) y cualquier día puede estallar...

Ante el dilema de tomar la Bastilla o tomar la pastilla no sé cuál será la elección...

No es fácil cambiar de mentalidad... de esquemas... y lo que dices de la pirotecnia es siempre un peligro y un problema...

Abrazo.