jueves, 6 de febrero de 2014

La técnica narrativa de Dejar las cosas en sus días de Laura Castañón y noticias de nuestras lecturas.


No hay que dejarse engañar porque Dejar las cosas en sus días sea la primera novela de Laura Castañón. En la biografía de la autora hay tanta relación con la literatura que toda esa experiencia se muestra con pulso firme en esta obra. Desde la primera opción de técnica narrativa. la novela es el fruto de la escritura de la protagonista de la misma, Aida. Este proceso metaliterario es uno de los grandes aciertos iniciales. Una historia que vemos construirse, como un puzle, delante de nosotros a partir de recuerdos, lectura de diarios y correos electrónicos, fotografías, escritura, etc.

Aida, periodista en Gijón, indaga en la historia de su familia y reúne y anota -el detalle de la moleskine es suficientemente significativo como motivo- todo el material que le ayude a comprender sus raices pero también su presente. El lector asiste con interés a este proceso que se le presenta, a la manera de Javier Cercas en Soldados de Salamina, en un doble camino temporal: el presente de Aida y sus circunstancias sentimentales, laborales y familiares y el pasado que investiga para reconstruir la historia familiar. No pueden entenderse uno sin el otro. Este doble proceso temporal termina juntándose, al final, de la manera más insospechada. Gracias a la tercera persona narrativa -no es Aida quien cuenta la historia sino un narrador omnisciente-, la autora deja la narración en un punto en el que el lector cuenta con más información que los personajes. Con esto consigue que el receptor se interese no solo por lo que se le va contando sino también por el futuro de esos personajes con los que ha conseguido empatizar.

Gracias a esto, el lector queda atrapado desde las primeras páginas por el argumento. La historia, además, cuenta con el interés derivado de cada uno de los incidentes que se narran en esta historia familiar. Laura Castañón toca temas esenciales del pasado: la conflictividad social de las primeras décadas del siglo XX en el entorno de la minería asturiana, la II República y la Guerra Civil, la vida familiar de la burguesía del momento, el caciquismo, etc. Pero lo hace desde el núcleo de las emociones puesto que lo que le interesa es contar el desarrollo personal de la vida de los personajes que aparecen. Esta es la conexión fundamental con el presente, en el que también aparecen temas como la Memoria histórica, los inicios de la crisis económica, etc.

Dejar las cosas en sus días no es una novela histórica, aunque no dejen de aparecer los grandes conflictos de la historia española del siglo XX, sino una novela de conflictos humanos, de secretos, de amores y sentimientos, de frustraciones, de renuncias y logros personales a partir de las decisiones que a veces se imponen por las circunstancias que rodean a los personajes y a veces son tomadas voluntariamente por ellos.


Noticias de nuestras lecturas

Encuentro en Burgos con Laura Castañón



Laura Castañón, la autora de Dejar las cosas en sus días, novela que nos ocupa en este mes de febrero, estará con nosotros en la próxima reunión del Club de lectura presencial. Celebraremos un coloquio con la autora para debatir sobre su novela.. Con este motivo, ampliamos la convocatoria y, además de a los miembros del club presencial, invitamos todos los lectores y seguidores de La Acequia y a  cuantos estéis interesados. El coloquio tendrá lugar el martes 25 de febrero, a las 16:30 en la Sala Polisón del Teatro Principal de Burgos. Entrada libre hasta completar el aforo.

Mª Ángeles Merino, en su primera entrada sobre la novela, nos presenta a la autora y a la obra en su temática esencial. Un buen aperitivo para abrir boca. 

Pancho también nos proporciona buenas razones para seguir leyendo, desde la portada, prolegómenos y primeras situaciones. No os perdáis las ilustraciones.

Paco Cuesta comienza su lectura de la novela desde una perspectiva que coincide con la del título de la novela y para ello aborda el asunto del marqués de Comillas que fundó Bustiello, el lugar en el que trascurre gran parte de la novela.

 



Luz del Olmo nos trae un prólogo a la edición francesa del poemario de Neruda publicada en 1961, que puede resultar de interés para algunas claves de lectura.

Purificación (Pamisola) comenta con todo acierto el poema número 15, que, de tan leído, corre el riesgo de no ser comprendido si no hacemos como ella, pararnos en cada verso.


Pancho continúa su excelente trabajo sobre Todo lo que era sólido. Llega aquí al momento de las costumbres nacionales y los pocos elementos que deberían ser incuestionables en España incluso en tiempos de crisis. Las ilustraciones, magníficas.


Sépitma entrega de Gelu sobre La estafeta romántica. Como siempre, tras una acertada selección de fragmentos que por sí solos ilustran ya su resumen de la obra, resalta el reflejo de la sociedad decimonónica que hace Galdós en los Espisodios.

Ya sabéis que recojo en estas entradas de los jueves los comentarios que los seguidores del Club de lectura hacen en su blog hasta el miércoles y aquellos que me dé tiempo del mismo jueves. Si me he olvidado de alguno, os agradecería que me lo hicierais saber.



15 comentarios:

Anabel Rodríguez dijo...

Creo que es una novela maravillosa y creo que has dado con una de las claves esenciales: el conflicto humano. Un abrazo y enhorabuena.

Abejita de la Vega dijo...

Laura Castañón no es ninguna novata, está claro. Y su novela tiene una técnica narrativa más compleja de lo que parece en un primer vistazo. Es mucho más que una novelita de mujeres arriesgadas al estilo de esas que cosechan éxitos de ventas. Costuras, catones y demás, ya me entendéis. Y de allende la mar.

Me ha gustado especialmente lo de saber lo que la protagonista no sabe. Las últimas horas de Paloma y de Andrés...¿Se dejarán las cosas en sus días?

Vamos haciendo apetito.

Al Principal hemos de ir.

Besos, Pedro.

Myriam dijo...

La estoy leyendo y me atrapa.

Paco Cuesta dijo...

La fusión historia-humanidad-sociedad es toda una promesa, contar con Laura, todo un lujo. Gracias.
Un abrazo

omar enletrasarte dijo...

interesante entrega, mi querido Profe,
el abrazo de siempre

Érase una vez dijo...

Una gran novela y una gran historia. Me fascinó.

Aristos Veyrud dijo...

Muchos éxitos para Laura Castañon con esta obra.
Saludos!!!

pancho dijo...

El enlace que nos pones es un estudio bastante a fondo y muy bueno de la novela, se le quitan a uno las ganas de emborronar folios, está ya todo dicho y mejor escrito. Con la entrevista nos podemos hacer una idea de las ideas tan claras sobre la novela que tiene la autora.

Una biografía, aún breve por joven, de relación con la literatura, a la que ha sabido sacar partido en este relato y en los siguientes que seguramente vendrán.

Además de todas las cosas que nos cuentas sobre la estructura de la novela, a mí me sorprendió el pescozón que se llevó de buenas a primeras la niña Paloma por culpa de las ciruelas claudias. Un comienzo sumamente original para captar la atención del lector desde los primeros párrafos. La habilidad de la autora para manejarse con los diálogos plenos de humor en muchos momentos. Solo eso ya revela una escritora con mucho recorrido. Confesar influencias de Muñoz Molina, Martín Gaite, Martín Santos, Martínez Pisón es una garantía.

Todo lo que era sólido dura y dura como las pilas alcalinas de larga duración. Creo que tengo para un par de entradas más, justo en las que más se detiene el autor para dar soluciones a todas las trampas y perversidades denunciadas.

Un abrazo.

Isabel Rodriguez Noarruga dijo...

¡Mi enhorabuena a la autora de esta excelente novela, me está gustando mucho! Saludos

Misterio dijo...

Parece un libro muy interesante...

Un placer leer sobre él.

Un beso grande.

lichazul dijo...

bien por la reseña PEDRO

hay muchos los autores de novelas que utilizan este estilo y así enganchan al lector, ella no es la excepción según se desprende de tu reseña
son rápidos, amenos y para nada lateros con descripciones de ambientes, sino que se concentran en la trama y dejan que el lector elucubre e interprete más libremente el escenario por donde los personajes transitan

así que suerte para esta autora y que sean muchos los que enganchen y le sigan


besos y buen fin de semana

lichazul dijo...

erratas

ese los está de más ... en hay muchos LOS
:D

Pamisola dijo...

Todavá no la estoy leyendo, no puedo opinar.
Por lo que leo por aquí, parece que hay que animarse.

besos.

São dijo...

Eis um nome a fixar, pois o romance deve ser mesmo bem interessante. Vou tentar encontra-lo no El Corte Inglês . em Lisboa.

Besos, querido amigo mio

Campurriana dijo...

Lo estoy leyendo, Pedro. Personajes, movimiento. Me gusta. Mi comentario lo haré al final de la lectura. Con la impresión global.
Una suerte contar con la escritora.