domingo, 14 de julio de 2013

La Rura de El Hereje. Encuentro de fin de curso del Club de lectura.

Inicio de la Ruta de El Hereje en el Palacio de Pimentel de Valladolid.
Sede actual de la Diputación Provincial y lugar de nacimiento de Felipe II
Foto cortesía de Miguel Martín Camarero.

Con motivo del fin de curso del Club de lectura nos encontramos ayer en Valladolid todos aquellos que pudimos hacer un hueco en nuestras agendas: participantes en el Club presencial de la Universidad de Burgos, otros miembros de la Asociación de Antiguos Alumnos de esta Universidad y amigos que han participado en las lecturas a través de La Acequia. Como sabéis, el próximo jueves cerraré mis comentarios de El Hereje y el último jueves del mes de julio haré balance del año y anunciaré las primeras lecturas del próximo curso.

El motivo que nos reunía en Valladolid era conocer los principales lugares en los que Miguel Delibes ambientó El Hereje, el último de los títulos del curso. La ruta recorre los espacios del Valladolid del siglo XVI por los que trascurre la acción de la novela. Es todo un ejemplo de puesta en valor -turístico y cultural- del patrimonio literario, arquitectónico y urbanístico, algo que debería ser norma habitual en las ciudades que han tenido la fortuna de servir de fuente de inspiración a una obra literaria de esta calidad. Tuvimos la suerte, además, de contar con una guía de excepción, Carmen Palomino, una de las personas que promovieron el establecimiento de la ruta y confeccionaron el excelente guion con el que cuenta. La Ruta también ha sido teatralizada de forma excelente (aquí, aquí y aquí).

Después de recorrer Valladolid desde la Plaza de San Pablo hasta el Campo Grande, pudimos disfrutar de una magnífica comida en el Restaurante Los Zagales. Allí recibí, como emocionante regalo de manos de Paloma (a la que tanto debemos los participantes en el club de lectura presencial) en nombre de todos, una reproducción de una escultura llena de acertado simbolismo de un monje lector que ya ocupa un lugar de honor en las estanterías de mi casa y que promete ser protagonista de alguna entrada en el blog.

Por la tarde, el camino nos llevó hacia la Plaza del Viejo Coso, el jardín romántico de la Casa de Zorrilla -que no tenía nada que ver con el Valladolid del siglo XVI, pero nos pillaba de paso- y la fachada del Colegio de San Gregorio. Incluso la tormenta que amenazaba con empaparnos aguantó hasta el final de una jornada de entrañable recuerdo.

Paloma y el que esto escribe como Don Juan y Doña Inés
 en el jardín romántico de la Casa de Zorrilla.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Agradecer a todos y en especial a ti Pedro, este maravilloso encuentro,donde disfrutamos y mucho, de la bella Valladolid,la ruta de El Hereje y de las explicaciones de Mamen y tuyas.
Con muchas ganas de seguir leyèndote y de empezar de nuevo con el club.

Ya tengo en mis manos la "Intemperie".

Un abrazo.

Rita.

Abejita de la Vega dijo...

Una jornada excepcional, un día que apunto en el calendario de mi vida con piedra blanquísima de Creta, junto a aquella de la olla quijotesca. Es un placer seguir tus palabras en una pantalla pero escucharlas en la realidad no virtual y en tu ciudad...placer de dioses.

Un abrazo muy grande, Pedro, Mamen y Paloma. Gracias.

A ver si puedo asistir a la lectura presencial. Y seguiré de comentadora bloguera, por supuestísimo.

Estáis muy bien en la del jardín de Zorrilla.

Besos, pasad feliz verano. Voy a a la librería a buscar "Intemperie", para mis días del páramo, frente al trigal. Habrá que ponerse chaqueta.

São dijo...

Que bom ter corrido tudo bem.

Sei quão importante é termos um/a guia que goste do que faz e o saiba fazer, pois acrescenta em muito o prazer do passeio e da visita.

Abraço grande, querido Pedro.

Pamisola dijo...

Una bonita experiencia para mí, esta visita a el recorrido del Hereje.
Aunque Valladolid es mi ciudad, siempre quedan cosas por descubrir,
Una mañana entrañable, también por la compañía de las personas que asistieron unas ya conocidas y otras no, pero todas unidas por el Club de Lectura de La Acequia.
Cerrando con la buena comida, en la que también fue especial la charla y los puntos de vista, de las que me quedan muy buen recuerdo.
Agradecida por admitirnos en la visita.

Abrazos.

Myriam dijo...

Se te ve muy romántica y alegre como Dña Inés y ese Dn Juan rubio, muy seductor.

Me alegro de que todo haya salido tan bien. Estas reuniones del Club de lectura son estupendas. Espero no fallar a la próxima. Aún recuerdo lo bien que la pasamos en las anteriores.

Saludos a todos y a ti un abrazo.

Paco Cuesta dijo...

Un día fantástico en excepcional compañía. Gracias a todos.
Un abrazo

omar enletrasarte dijo...

en la foto no se ven, pero hay lazos que os tienen unidos
.
enhorabuena, saludos para todos

Ele Bergón dijo...

DE verdad que fue una mañana muy bonita, entrañable y aprendimos sin esfuerzo.

Gracias a Mamen, la guía, a Paloma la organizadora y a ti por tu buen hacer en todo.

Me encantó compartir la Ruta del Hereje con todos vosotros.

Besos y feliz verano

Luz

Merche Pallarés dijo...

Parece que la caminata y la comida fue todo un éxito. Me alegro. A ver si para la próxima me puedo apuntar :) Besotes andarines, M.

Gelu dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Se aprecia en las fotos que fue un estupendo encuentro.
No he podido resistirme a volar a Valladolid, vía internet,
recorrer la ruta del Hereje de Delibes, llegar hasta el Campo Grande...
y luego me he acercado hasta la
Casa de Zorrilla
Y al entrar en su jardín, quedaba en el aire el eco del recitado
de los versos del Tenorio,
que seguro los hubo -en esta ocasión-, entre risas...

Abrazos.