lunes, 16 de enero de 2012

Miró y el dictador


La exposición Miró. Su lucha contra la dictadura, que ayer se clausuraba en Valladolid, muestra los trabajos de este artista a partir de la lectura de Ubú rey de Alfred Jarry y su actualización en los tiempos de la lucha antifranquista, proponiendo la analogía de Ubú con Franco.

Miró realizó tres series de su obra gráfica sobre Ubú y culminó su propuesta con la colaboración en el montaje Mori el Merma, inspirado en ella, que llevó a cabo el grupo de teatro mallorquín La Claca en los tiempos convulsos del postfranquismo. Ubú era fácil de identificar con Franco: la degradación del personaje hasta niveles de farsa son una forma de evidenciar la corrupción de un sistema político como el de la dictadura militar que gobernó España desde 1939 hasta 1975. En parte, la obra de Alfred Jarry se presta fácilmente a ello. Quizá deberíamos comenzar a añorar los tiempos en los que tan fácilmente se podía identificar al gobernante dictatorial: al menos se podía poner cara al enemigo y ridiculizarlo. La farsa ha sido un género siempre de defensa del pueblo frente a la autoridad opresora. Cuando la vanguardia, en los años treinta del pasado siglo, abandonó su aspiración de arte puro e intrascendente para comprometerse sin abandonar las técnicas que le habían sido propias recurrió en muchas ocasiones a la farsa como el género teatral más puramente artístico que permitía dar este salto. No es nada extraño que Miró llegara, en el franquismo, a Ubú rey.

Al salir de la exposición me pregunté cuál es el verdadero rostro de quienes nos gobiernan ahora: la dificultad que tenemos para identificarlo hoy y poder ponerlo en la máscara de Ubú.

26 comentarios:

LA ZARZAMORA dijo...

Hoy la farsa es otra, Pedro.
Todo es una farsa.

Me hubiese gustado ver esa expo.

Besos.

The Doll dijo...

Esa es precisamente la cuestión, digamos que el "enemigo" no tiene cara, es un compendio de poderes, que poco a poco, con diferentes estrategias, nos hacen estar donde a ellos les interesa, si, a eso le sumamos una gran indiferencia, una sumisión ciega que, llegamos a esta situación. Intuyo, que cada día hay que remover mas conciencias para salir de este estado de "desorientacion" en el que pretenden tenerlos, a la personas dóciles se les manipula con facilidad.
saludos

Anónimo dijo...

No vemos la "careta"ni la veremos ...estamos en un curioso pais de gobernantes que campan a su aire...
algunos se van de este mundo como MFI que acaba de fallecer y sin denunciar la violencia y la dictadura de Franco...
Así que Miró con sus obra mágica tuvo ideas premonitorias. Excelente.

Recibe un saludo.

lichazul dijo...

Pedro que afortunados son al poder contemplar en directo estas obras pictóricas
y todas las obras de arte que les rodean en las ciudades y que a uno le enseñan en los libros

Nosotros por acá intentamos disfrutar de lo que queda,sea natural u obra de arte arquitectónico, antes que todo se licite o permute al buen postor


besos desde esta latitud febril

Alicia Abatilli dijo...

Todo parece tan lejano y cercano a la vez.
Tienes la posibilidad de apreciar algo que a muchos no nos es posible.
Las preguntas siempre surgen.
Las respuestas no tanto.
Saludos
Alicia

Spaghetti dijo...

No vi la obra de "La Claca" pero por entonces recuerdo una de los "Els Joglars" de Boadella que se llamaba "Olimpic Man" en la que se ridiculizaba, entre otros tópicos, la obra de Miró, mostrando un nuevo hombre del futuro, deportista, cruel y de gustos clásicos, llegando a parodiar una obra del pintor que realizaban sobre patines.
Imagino que la exposición habrá sido todo un éxito, porque Miró es todo un símbolo irrepetible de la creación artística.

virgi dijo...

Colocarse una máscara es ya una costumbre casi oficializada. Tras ella, hacen y deshacen y nos roban con tranquilidad.
Leí Ubú hace tanto que ni lo recuerdo.
Besitos, Pedro

Hernando dijo...

Sobre el mismo tema, tanto en el Museo Picasso de Barcelona y en el museo Picasso Málaga, ha habido una exposición "Viñetas en el Frente" donde se reflexiona a partir de una obra de Picasso, "Sueño y mentira de Franco" sobre el mismo tema, incluso se trajo de Francia el verdadero Ubú, un muñeco que no se sabe muy bien como es su rostro (la falsedad de los dictadores)
No obstante tanto el cartel de "Aidez Espagne" de Miró como "Sueño y mentira de Franco" lo hicieron para recaudar fondos para la república.
Estás en todo Pedro, tu capacidad de engullir saber es impresionante.

Tesa dijo...

Ay... a mí no me gusta nada, la obra de Miró.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Jamas comprendí ni me gustó Miró, el cual tambien alabó (cuando le interesó) a quienes dirigian el ANcien Regime.

¿Mascaras hoy, dices? No se... en todo caso, la mayoria ha elegido y, mal que nos pese, un gobierno democratico no debe de compararse con Ubu, que hay comparaciones muy ofensivas.

Entiendo que no ha sido esa tu intención, amigo Pedro.

El pueblo habló. Aunque se equivoque, que tambien se equivoca. Pero hay que respetar su decisión soberana (con el debido "permiso" -qsue asco- de Sarcozy).

Un abrazo.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Querido CORNELIVS: En mi texto no hablo del gobierno del PP sino de los poderes que no se eligen, aquellos que gobiernan las finanzas por encima de las fronteras. En el fondo, ni Zapatero ni Rajoy son o pueden ser Ubú, como mucho sus ayudantes...
Bienvenida sea esta entrada si ha dado lugar a tu regreso a La Acequia, que tanto se echaba de menos.

Joselu dijo...

Aquí en la inigualabe y única Catalunya también un cómico, Albert Boadella, utilizó la farsa de Ubu rey para parodiar a Jordi Pujol y su aparato del poder, así como a periodistas áulicos. Levantó ampollas entre las masas de Convergencia que son la mayoría en este país. Poco tiempo después a este cómico se le ha declarado persona non grata y ha tenido que exiliarse en Madrid. Las farsas son peligrosas sobre todo cuando son expresión de la realidad. El poder está expuesto a ser ridiculizado. Ahora es difícil pero no es imposible. Acabo de ver unas imágenes de los Simpson que remedan (tal vez sea al revés) el discurso de Soraya Saenz de Santamaría transmitiendo que la subida de impuestos era obligada y temporal. Es igual que el episodio de los Simpson. El poder se hace más astuto, y nosotros, más conformistas, sobre todo porque no sabemos hacia dónde disparar sin que nos apuntemos a nuestros propios cojones.

Abejita de la Vega dijo...

De todas maneras, Miró no hizo retratos ecuestres de la nieta del dictador.

pancho dijo...

Es interesante descubrir que la gente es capaz de unirse cuando conoce al enemigo. A la contra tienes más referencias y objetivos más concretos porque sabes dónde no quieres ir a parar o quieres evitar. Este Ubú me suena a facultad, cuando estudiábamos el teatro del absurdo. Queda muy lejos ya. De Boadella me leo todo lo que sale. Es un crack.

Myriam dijo...

Cierto, si le pudiéramos poner nombre, el monstruo sería dominable.

Lástima estar tan lejos, me hubiera gustado ver esa exposición y gracias por el enlace a la obra de teatro, me lo guardo para leerla no bien pueda.

Besos

El Gaucho Santillán dijo...

Bueno, comparar a los actuales, con la època de Franco,es medio duro.

A menos que se hable de los financistas, esos fueron siempre una peste.

Se muriò Fraga Iribarne! Que tipo peligroso.

Creo que fue el derechista mas bien fundamentado que he leìdo. Convencìa! Era peligroso.

Un abrazo.

São dijo...

Já visitei a Fundação Miró em Barcelona, pois me agrada muito este artista.

Quanto a Ubú, é complicado; são demasiados pretendentes a usar a máscara, meu querido amigo...

Fica bem

Mariluz GH dijo...

Mi madre te hubiese dicho que son los mismos perros con distintos collares; porque el dinero es quien siempre ha gobernado, gobierna y gobernará en todos los países, querido amigo.

Gracias por el enlace a la obra. La leeré esta noche :)

un abrazo

Anónimo dijo...

En estos tiempos, es dificil comcretar quien es la autoridad opresora, como dice Serrat: Aclárennos quién manda y quién es el mandao...
Isabel.

JESUS y ENCARNA dijo...

Buenas tardes Pedro, personalmente les voy poniendo caras, tan solo me falta la que nos empuja hacia el desorden y lo estrictamente monetario.
No se bien, bien, como, pero las generaciones se han ido degradando en el desamor y las prisas.
Prisas en todos los sentidos.
Despues de una larga asusencia hoy he vuelto a subir a la red algo de surrealidad escenica, porque siento esa sensacion de estar constantemente en vilo de la reconversion y empieza ha arraigarse en las gentes.
Si las sensaciones tan solo fueran de esa vieja farsa ya sabria que facciones tuviera.

Saludos cordiales.
Jesus

Martine dijo...

Certera, muy certera tu Entrada Pedro..

Y para mí no puede ser más clara.. con una lectura pausada ;)

Ah, y me gusta Miró que como muy bien dice Marian " no hizo retratos ecuestres de la nieta del dictador".

Un beso.

MIMOSA dijo...

¿Sabes? Leyendo tu entrada me hiciste recordar la época en la que trabajé en el CAAM (Centro Atlántico de Arte Moderno).
Sé que hablas de una exposición y una idea determinada, pero en mi cabeza entran en juego las palabras: arte, política, farsa, poder....y, recordé cuanto de todo eso se movía al tiempo en aquél espacio tan pequeño.
Sé que no tiene mucho que ver con lo que hablas ( o tal vez sí) pero me vino esta asociación de ideas.
Hay ya tantas máscaras que costará destapar la verdadera, habrá que filtrar!

Besos

matrioska_verde dijo...

hoy me voy de tu acequia después de aprender un poquito porque desconocía la existencia de Alfred Jarry y su obra...

en fin, y lo que me queda por aprender.

biquiños,

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, Pedro:

El enemigo vive con nosotros, oculto entre la complicidad de una sociedad cada día más corrupta y envilecida por el poder del dinero.

Abrazos.

Campurriana dijo...

Es cierto. Finalmente, todo lo que nos rodea es una farsa. Incluso entornos cercanos si nos paramos a pensar.

Triste.

Isabel Huete dijo...

Sin tener la más mínima intención de comparar, Hitler también salió de las urnas: el pueblo habló y la deriva fue monstruosa. No son los mismos tiempos ni, quizá, los objetivos, pero sí el juego de máscaras. La máscara es un señuelo, la ilusión de lo desconocido, el atractivo del misterio, incluso llegan a ser hermosas, pero hay que desconfiar siempre de lo excesivamente seductor. Para mí, el juego de la política es pura patraña, no porque impere el poder de los no elegidos (que lo han hecho siempre) sino por la complicidad de los sí elegidos, de los enmascarados.