lunes, 26 de diciembre de 2011

El teatro en Televisión Española.

Una de las cosas que definen la cultura en los medios de comunicación audiovisuales españoles es que lo normal es extraordinario. Por mucho que se estudien las parrillas televisivas, es difícil encontrar en horas compatibles con la vida cotidiana programas de calidad que informen sobre la vida cultural fuera de los pocos minutos que se le dedica a este sector en los informativos habituales. En este caso, además, no se puede adjudicar la ausencia ni al coste económico de estos programas -que suelen ser baratos en comparación con la mayoría de los que se emiten- ni al desinterés de la audiencia. No es verdad que no exista un público que quiera información sobre exposiciones artísticas, libros o los montajes escénicos. La tendencia fácil es negar lo que la realidad nos da incluso con parámetros contables: el llamado sector cultural da dinero, más que el que están dispuestos a reconocer los cómodos programadores televisivos.

En cuanto a la información sobre las artes escénicas, la situación es para echarse a llorar. Curiosamente, las cifras de los últimos años demuestran que el teatro (y la ópera y la danza y otras manifestaciones escénicas) cada vez tiene más espectadores y no solo en las exitosas obras musicales, por lo que no se comprende esta falta de interés de las televisiones por estos espectáculos cuando suelen cubrir con muchos medios cualquier tontería. Únicamente el segundo canal de la televisión pública tiene programas en los que se informa habitualmente de las novedades escénicas, pero la situación está muy lejos de ser óptima. Una de las labores de las televisiones públicas debe ser la de fomentar la cultura: la atención cuidadosa y constante a manifiestaciones artísticas que no suelen tener cabida en las televisiones comerciales. Entre ellas, el teatro.

Curiosamente, Televisión Española ya lo hizo con probado éxito hace tiempo. Todos los que tenemos cierta edad recordamos un espacio de gran interés y calidad (y también con cifras de audiencia notables, aunque la situación de la televisión fuera tan distinta en aquellas épocas): Estudio 1. En este programa se grababan para la televisión las obras que se representaban con mayor éxito en los teatros españoles: casi siempre en acertadas adapaciones para el formato televisivo. Muchos españoles pudieron conocer a los grandes actores del momento y obras de teatro imprescindibles gracias a esta labor.

Hay dos formas de grabación de estos espéctaculos, ambas válidas aunque tengan diferentes objetivos: la grabación de la obra en un directo sobre el escenario, con público en el teatro y todos los condicionantes que acarrea; y la grabación en un lenguaje televisivo o fílmico. Aquella respeta y documenta el montaje original, aunque cuente con limitaciones de imagen y sonido. Esta adapta mejor la obra escenificada para el medio que la trasmite aunque pierde el carácter de documento de lo que se ve en la escena. A los investigadores del teatro nos gustaría contar con la primera en grabaciones de calidad que sean fácilmente accesibles. Aunque ya existe un archivo en el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música, está muy lejos de ser lo que debería ser. En España, lamentablemente, hay tantas lagunas en la documentación que la reconstrucción completa de los montajes escénicos del último siglo es, en la práctica, una quimera que duele a los que tenemos una mínima sensibilidad sobre su importancia y lo que significa una labor de documentación cultural para que la cultura tenga labor eficaz de sedimento. Quedamos, en gran medida, en manos de la memoria oral, como sucedía hasta la invención de los medios tecnológicos que permiten la grabación y reproducción.

Por todo ello debe alabarse el tímido intento de recuperar Estudio 1 que se propone Televisión Española, tanto en los archivos históricos de la institución (lamentablemente, no se conservan copias de todas las obras que se emitieron) como en la tarea de grabación y emisión de teatro contemporáneo. Me gustaría que esta labor continuara y se ampliara, que todas las semanas pudieramos tener en este canal una obra de teatro acompañada de documentales sobre el autor, los actores y el montaje, como se ha hecho con uno de los mejores montajes de los últimos años, Urtain, de Animalario. En fin, que a uno le gustaría que lo normal fuera normal y no extraordinario.

24 comentarios:

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Recuerdo con gran agrado Esudio 1, fue una de las costumbres que me inculcó mi padre, solíamos ver todo lo que ponían... Un abrazo

Isabel Huete dijo...

Llevas toda la razón, Pedro. El problema es que los estudios que se hacen sobre lo que interesa a la gente en general (que se hacen y bastantes) van por otro lado, desgraciadamente. Me quedé maravillada el otro día viendo Urtain porque me pareció realmente buena, con un montaje y puesta en escena magníficos. Ojalá se recuperara el teatro para TV.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Estudio 1, era una cita esperada con la tele.

Me enteré tarde del programa de Urtain, y no lo vi. Triste final, el del personaje real.

Saludos.

Mariluz GH dijo...

Pues sí que disfrutaría con el regreso de los Estudio 1 y Novela, recuerdo la maravillosa interpretación de José Martín como "El conde de Montecristo". Pero me temo que seguirán gastando los dineros en zafiedades como los realitys y series juveniles que no se parecen absolutamente en nada a nuestras problemáticas (por mucho que claudiquemos ante los 'jalowines y papas noeles')...

abrazos amigo Pedro :)

Lola Fontecha dijo...

Desgraciadamente las encuestas se hacen en sitios donde las artes escenicas no se valoran y solo llama la atencion el cotilleo y las vidas de los demás, cuanto más basura mejor. Es lo que tenemos, ojalá cambie algún día. Menos mal que todavía quedan teatros y cines donde poder ir de vez en cuando a disfrutar. Besos Pedro

Pedro Ojeda Escudero dijo...

GELU: puedes ver Urtain en el enlace que tienes en mi entrada sobre el título del montaje.

Raúl Urbina dijo...

La semana pasada, precisamente, comentaba en Twitter la interesante propuesta de Animalario para este nuevo Estudio 1. En efecto, todos los que tenemos ya "una edad" vimos obras fundamentales y descubrimos a grandes actores de nuestro teatro.

Viendo Urtain, toda una alegoría del descenso personal vinculado también a una época de nuestro pasado reciente, disfruté más que con cientos de programas prescindibles. La segunda cadena de TVE sigue teniendo alguna de estas joyas y me consta que muchas personas disfrutan con su programación.

matrioska_verde dijo...

Sí, yo también, como tú y algunos de tus comentaristas, tengo "cierta edad" (me ha hecho gracia) y también recuerdo Estudio 1 y gracias a ello conozco a los actores de toda aquella época (se me viene a la cabeza Pedro Osinaga y muchos que les pongo cara pero no nombre), cosa que de otra forma sería imposible.

Ojalá que ese tímido intento siga cogiendo impulso. No ví Urtain, aunque sí que vi que la iban a emitir. Hay noches que ni enciendo la tele.

biquiños,

pancho dijo...

Aunque uno no esté muy acostumbrado a montajes como los de Urtain, estuve bastante rato viéndolo por el enlace que pusiste de twitter.

La verdad es que por aquí viene bastante teatro. El aficionado no puede quejarse y a un precio asequible porque suele estar organizado por instituciones públicas. Lo que cuesta es salir de casa. Creo que el internet también en esto ha ganado la batalla: es un monstruo devora industrias y modos de vida: música, cine, libros y ahora teatro.
Voy mucho menos al teatro que solía. Hace 35 años ya conocíamos a Chéjov, Miller, Pirandello, Stoppard, Beckett, Brecht o Buero por la tele o en directo. Eran otros tiempos con otras inquietudes.

Myriam dijo...

¡Sí, por favor, y que lo emitan en el Canal Internacional, para los hispanoparlantes que no vivimos en España!

Hace poco vi en el Canal Internacional "El perro del Hortelano" de Lope de Vega y la disfruté en grande (supongo que era de Estudio 1 ahora que lo mencionas, pero no presté atención a ese detalle).

Eso de que no se conserve documentación de los montajes escénicos es una verdadera calamidad, injustificable, teniendo en cuenta la tecnología moderna.


Como curiosidad le cuento:

En mi última visita a Londres hace unos años: la entrada a uno de los peores recitales que vi en mi vida costaba 90 libras esterlinas, y una obra de Shakespeare con actores de primera, en su teatro reconstruido (para la Película "Shakespeare in Love"), costaba 5 libras Esterlinas.

Un abrazo

São dijo...

Fiquei sabendo, com pena, que , afinal, aí em Espanha o panorama televisivo é muito semelhante ao português!

Um abraço enorme, meu querido Pedro.

Euphorbia dijo...

Yo también recuerdo Estudio 1, aunque lo tengo muy desdibujado, pero recuerdo que en casa siempre se veía, y también cuando se permitió que se emitiera desde Miramar en catalán también había teatro con obras de Guimerà o Segarra. En cuanto a la ópera también tengo la impresión de que hace unos años era más fácil ver alguna producción interesante pero ahora que hay tantos canales sólo me topo con programas basura, será casualidad.
Besos

Spaghetti dijo...

Viva el teatro en todas sus expresiones!!
abrazos

Delgado dijo...

A ver si también se animan con la zarzuela, pues también hay público que la demanda.

Hernando dijo...

Aún tengo en mi retina "Doce hombres sin piedad" "Don Juan tenorio" creo que la ofrecían por las fechas de cuaresma...etc, Ese programa me hizo querer al teatro aunque acabara muy tarde. Creo que hace años por la segunda reponían alguna obra de teatro.
No sé, con el partido en el poder que hay ahora, ya ha dicho que no hay dinero para ayudar a las artes escénicas.

El Deme dijo...

José Bódalo, Berta Riaza, María Luisa Merlo, Jaime Blanch, José María Rodero, Fernando Guillén, Ismael Merlo, Manuel Galiana, Tina Sainz, Nuria Torray, Ana María Vidal, Irene Gutiérrez Caba, José María Prada, Marisa Paredes... todos en blanco y negro pronunciando unos textos extraordinarios, eso no se olvida nunca.

Montserrat Sala dijo...

Hola profesor, creo que todos tus comentaristas, estamos de acuerdo que es una lástima que no se programen en television mas teatro y menos realitys.
lo cual indica, que somos una pequeña
minoría. de lo contrario, seguro que se programarían más obras. Ahora bién, si hay una intención seria que ya se ha puesto en marcha, peus a lo mejor tenemos suerte. Habrá que esperar, a que la idea fructifique, y la recesión económica, no la impida.

Saludos desde Barcelona.

Campanilla dijo...

Estudio 1 era intocable en mi casa, aunque sólo hubiera una televisión. Sería muy agradable que repusieran aquellas magníficas obras con no menos magníficos actores, que formaban parte de nuestra familia.

Gelu dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Gracias por el enlace, de esta magnífica coproducción de Animalario y el Centro Dramático Nacional.
He visto completo el vídeo de Urtain, impresionante, durísimo y de golpes de todo tipo, como la vida que llevó el fortísimo levantador de piedras desde que salió de Cestona.
Muy bien todos los actores. Roberto del Álamo, inmejorable en ese difícil papel.
En la segunda cadena cuidan más la programación, pero hasta hace poco tiempo, ponían los mejores programas a horas imposibles de la mañana, de la sobremesa o nocturnas intempestivas.
El horror de 'los reallitys' o 'los reallitys de horror' han invadido todas las cadenas.

Saludos.

Luis Antonio dijo...

Aplaudo calurosamente el retorno de Estudio 1. En Barcelona tenemos muchos teatros, pero escasísimas obras que merezcan la pena...

lichazul dijo...

acá pasa muy parecido, la televisión chilena , prefiere mil veces transitar por programas de farandula y/o realities para embobarnos .



Muchas felicidades pa'l 2012, que este nuevo año traiga mucha alegría y buenas vibras para ti y todos los tuyos
besos

Abejita de la Vega dijo...

Para quien vivía en una ciudad sin teatro, era el único...qué grandes actores aquellos.

Besos

Asun dijo...

Yo recuerdo con agrado aquellas emisiones de Estudio 1 (también soy de las que tienen una cierta edad).

Me gusta mucho el teatro, y me encantaría que se emitiera con asiduidad en televisión en lugar de todos esos programas de tres al cuarto.

Paco Cuesta dijo...

lo ordinario (de ordinariez) resulta extraordinariamente normal.