jueves, 7 de julio de 2011

Las leyendas becquerianas y el nacimiento de la prosa poética moderna en español, con noticias de nuestras lecturas y un Quijote ciclista


Las leyendas becquerianas son mucho más que cuentos en prosa. El género había sido consolidado en el romanticismo: relatos breves en los que se narraban historias de amor y misterio. En España tuvo mucho éxito en verso: el Duque de Rivas o Zorrilla las cultivaron con gran aplauso. La estrofa habitual era el romance: la forma estrófica más natural en el idioma español tanto por su prosodia como por su prestigio ganado desde la Edad Media. De hecho, muchas de esas leyendas románticas en verso son una consciente actualización del romancero tradicional y usan muchas de sus características.

En prosa, su lugar natural era la prensa periódica: periódicos y revistas las publicaban de forma habitual. Cualquier aproximación a la hemeroteca del siglo XIX soprende siempre por la gran cantidad de textos literarios que contiene. Bécquer, a diferencia de lo que hiciera con las rimas, sí se preocupó de publicar sus leyendas, aunque también hay problemas de autoría en algunos textos y evidentes engaños editoriales. Como en las rimas, lo que podríamos llamar "la fórmula Bécquer" fue rápidamente imitada y, en algunos casos, de forma tan perfecta que es difícil distinguir el original y la copia.

Sobre esta herencia, Bécquer trabaja un nuevo concepto de lenguaje poético. Como ya he dicho, no es el único ni el primero en su tiempo pero sí es el mejor, el que consigue una fórmula permanente. El camino elegido por Bécquer abre definitivamente en español la prosa poética: una prosa trabajada con procedimientos que antes se reservaban para la poesía, en especial en cuanto al ritmo de la frase. Todo nace al considerar la prosa y la poesía como parte de un mismo trabajo de autor: Bécquer no distingue entre una y otra, en ambas toca los mismos temas, las mismas preocupaciones poéticas. Por eso, al leer sus leyendas -igual que hemos propuesto para sus rimas-, debemos ir más allá del argumento.

Noticias de Bécquer

Merche Pallarés comenta a Bécquer desde la perspectiva de nuestro siglo y llega a lo cursi (que fue un valor en el siglo XIX) y la pasión.

Myriam ha visto afectada su última entrada sobre Bécquer por los problemas de la plataforma Blogger y promete rehacerla.


Pancho, a partir del comentario de la rima 7 (XXVI) llega a conclusiones tan acertadas sobre la poética becqueriana, que no puedo añadir nada más sobre esto. No os perdáis la ilustración, la misma que me remitió hace tiempo Hernando para publicar, pero seguro que no le molestará verla en tan acertado lugar ahora.

Paco Cuesta provoca de nuevo la raíz de la ordenación en la lectura de Bécquer. Para debatir. Después, comenta las claves esenciales para comprender de verdad El caudillo de las manos rojas.


Ele Bergón nos recuerda e ilustra oportunamente el origen familiar de Bécquer.

Gelu, a raíz de las palabras con las que Núñez de Arce definía las rimas becquerianas, hace índice de orquideas y suspiros.

Mª Ángeles Merino, Abejita de la Vega, a partir del comentario de la rima 32 analiza uno de los temas claves de la poética becqueriana, el del sueño. Excelente.

En este enlace podrás encontrar las instrucciones para seguir la lectura de la obra de Bécquer en La Acequia, con los índices de las entradas. Si me he olvidado de alguien, avisadme para corregir el error.


Noticias de la lectura de la trilogía dantesca de Óscar Esquivias


Os invito a participar en esta lectura colectiva y virtual de la trilogía dantesca de Óscar Esquivias, continuando la variedad de estilos, propósitos y miradas que nos han enriquecido la lectura del texto cervantino en los dos últimos años.



Noticias de la lectura del Quijote


Mª Ángeles Merino, Abejita de la Vega, llega ahora al capítulo 8 de la primera parte... y cómo no, lo cuenta desde un secundario de lujo que no podéis imaginar.

Pancho me remite, gracias a su hijo, un cartel quijotesco de la Vuelta ciclista a España de 1965, que yo, al menos, desconocía. En el fondo no había demasiada distancia entre Rocinante y una bicicleta... ¡Gracias, Pancho!

La lectura del Quijote se convierte en proyecto permanente de La Acequia (en este enlace) al que se puede incorporar todo aquel que lo desee en cualquier momento y, por lo tanto, seguiré  publicando, periódicamente, las noticias correspondientes.

10 comentarios:

Abejita de la Vega dijo...

Poesía o prosa, a este poeta le da igual; sigue en su empeño de traducir lo inexpresable. Comenzaré con una leyenda que no recordaba: "Las hojas secas". Poesía, poesía, aunque no haya versos; con evidentes puntos de contacto con las Rimas.

Gracias en nombre de mis secundarios quijotescos, por llamarlos de lujo.

Besos

lichazul dijo...

sabes Pedro, acá no hacemos mucha diferencia entre prosa y poema, la verdad es que le miramos como un poesía escrita para el lado, será cosas de estructura, de ritmo, de idea, de modernidad, o qué, pero no le damos importancia así sea prosa, soneto, copla, etc etc, para nosotros es poesía y con ello basta.

se que es casi sacrilégico lo que escribo, sobre todo para los puristas de las formas y las estructuras, la literatura a medida que uno se va impregnando con las distintas teorías de distintos tiempos por distintos eruditos nos va autolimitando y tomando cierto temor de expresar sus emociones

el analisis queda para quienes les gusta realizar aquello, pero para los que amamos la poesía, el mayor logro es que el lector se identifique con el sentir plasmado.

sorry, si no me meto en los análisis teóricos, de bécqer me quedo con sus emociones vertidas y que son universales, quizá ese es el gran mérito, el porqué no pasa de moda este autor, su forma llana de plasmar sentimientos hace que las personas se sientan absolutamente retratados.

un beso Pedro, y buen viernes

Lola Fontecha dijo...

Siento no estar participando más que de leyente......... mi nuevo trabajo me tiene un poco dislocada.. La prosa poética es para mi una forma de expresar muy intensa, se puede decir o dejar entrever cosas que con la poesía es más complicado. Besitos Pedro

Merche Pallarés dijo...

Hasta ahora he leido tres leyendas: "El monte de las ánimas", "El rayo de luna" y "El beso". Escribiré sobre ésta última mañana (es, por ahora, la que más me ha gustado). Besotes prosificados, M.

Hernando dijo...

Ayer me adelanté y hoy vuelvo a escribirlo.
"Hoy pensaba que había Bécquer, tenía preparada la reseña de un libro que hace poco se vende en las librerías, el autor es Miguel Mena Hierro, y el título del libro"Alerta Bécquer" ya que estamos en verano, y la gente puede que tenga mas tiempo para leer. Un pequeño resúmen de su libro en su web dice:
"Eduardo, un adolescente en plena efervescencia del primer amor, está tan enamorado de Dafne que decide demostrárselo robando los huesos del poeta romántico Gustavo Adolfo Bécquer"
En cuánto a las leyendas la que más me impactó en mi época de estudiante, fué la de "Maése Pérez el organista" tal vez fuera por la influencia religiosa y porque mis libros de texto eran de la ed. Anaya que luego más tarde supe, que es la editorial de la Iglesia.
La verdad es que un órgano embellece una catedral. Estoy de acuerdo las leyendas, son pura poesía en prosa.
Es un placer ver el billete de 100 pesetas en el Blog de Pancho, al que leo con bastante frecuencia, y especialmente con Bécquer que está haciendo un trabajo extraordinario.
Como curiosidad, en Sevilla hay un hotel, El hotel Bécquer, y su restaurante se llama "La leyenda" todo en él gira alrededor Bécquer, y en el parque Maria Luisa para cuando alguién se acerque por Sevilla, hay una escultura con el tema de Bécquer, siempre hay un haz de claveles, o un haz de rosas.

Myriam dijo...

Prometido está.

Su prosa poética es magnífica.

Besos

omar enletrasarte dijo...

Inteligente mano
que en un collar de perlas
consigue las indóciles
palabras reunir.

Ah, si uno pudiera escribir así...!!!
Gracias Pedro, por inferirme tanto interés en la literatura.
Un abrazo desde el sur uruguayo

pancho dijo...

Aquí ando en un aparato que no es el mío, por lo tanto las cosas cambiadas y pidiendo auxilio para que funcionen.

También creo que la prosa de Bécquer es tan cuidada y elegante como si se tratara de poesía, incluso más colorista. Gran importancia de los periódicos de la época para los literatos que les permitía cobrar sus colaboraciones y vivir.

También sorprende de los periódicos de finales del XIX y primeras décadas del XX los poemas que se publicaban en la primera página. Ahora para encontrar una poesía tendrías que ir al cultural semanal y escasa.

Rocinante como un "armazón de huesos y pellejos" sería lo más parecido a una bici en el verano manchego.

Un abrazo y gracias por vuestras palabras sobre el comentario que animan a seguir, aunque con el verano sea más difícil por el cambio de costumbres que no ayudan a coger el ritmo.

Delgado dijo...

Todavía no he empezado con las leyendas, pero en la edición de Cátedra que barajo ya mencionan que se excluyen algunos relatos y textos como «La fe salva» o «La voz del silencio» al demostrarse que no pertenecen a Bécquer.

Paco Cuesta dijo...

Resulta fantástico comprobar como la prosa es realmente poesía en la pluma de Bécquer.