martes, 1 de diciembre de 2009

La muerte de Aitana y los medios de comunicación.


Cuando esto escribo, las informaciones nos dicen que Diego no es el autor de la muerte de Aitana, una niña de tres años, hija de su novia.

Cuando Aitana llegó al hospital, el pasado martes, una cadena de graves errores médicos condujo a la redacción de un informe que decía que la niña había sufrido malos tratos y una posible violación. La policía detuvo a Diego como sospechoso. La forma en la que se difundió la noticia puso a este joven en la mira de la opinión pública: periodistas, contertulios, redes sociales, blogs, no dudaron en culpabilizarlo.

Aquellos que reaccionaron emocionalmente ante la noticia poca culpa tienen, pero los profesionales que trasmitieron una información de este tipo sin respetar la necesaria privacidad de la niña y de Diego y sin las adecuadas precauciones, son culpables de un error que en España tiene antecedentes lo suficientemente conocidos como para que no se repitiera. Desde el caso de las niñas de Alcàsser, los medios de comunicación se han lanzado a un vértigo que deja demasiada amargura a su paso. Aunque en un primer momento aquello sirvió para hacer autocrítica, nada ha cambiado. El espectáculo público en el que los medios de comunicación utilizan el morbo para sacar partido en el índice de audiencias no ha parado, a pesar de que fuera denunciado incluso por escritores como Muñoz Molina en su novela Plenilunio.

No son excusas la rapidez ni la urgencia en la comunicación de la información a la que están sometidos los periodistas desde la aparición de Internet: nuevas herramientas exigen nuevas soluciones. Esto no es un error de un periodista concreto: es el fallo en cadena de todos los procesos de control. En España, por desgracia, se confunde el periodismo serio con el sensacionalista en demasiadas ocasiones. Y no se respeta nada a su paso.

Por ahora, dejemos a la familia de Aitana que la llore y a Diego que pueda rehacer su vida mientras respetamos su derecho a la presunción de inocencia. Si finalmente se confirma que todo se ha debido a un accidente desgraciado, una cadena trágica de errores médicos y la precipitación de los medios de comunicación, ojalá que los afectados consigan perdonarnos a todos.

42 comentarios:

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Asi es; a todos. Pero no a los que reaccionaron emocionalmente, como bien dices, amigo, sino sobre todo a quienes difundieron la falaz y falsa noticia. Que asco de periodismo, Pedro. Que auténtico ASCO.

Luego está el tema de la presunción de inocencia: un magnifico logro constitucional que treinta años despues nadie se cree, y lo que es peor, nadie aplica, pues la sociedad ya te juzga sin juicio previo. Ese asqueroso y vomimtivo "piensa mal y acertarás". ¡Oh dioses! Que miseria espiritual.

¿Cuando evolucionaremos de una vez?

Un abrazo.

María dijo...

Ya había oído la noticia, es una pena que sucedan estas cosas, y carguen con la culpa a una persona presuntamente inocente, porque parecer ser que fue un desgraciado accidente.

¿Por qué adelantan las noticias sin asegurarse en las pruebas? es lo que no llego a entender... y que difundan la información de esta manera ¿los periodistas los culpables? ¿o es que en este país no hay seriedad ni respeto hacia los demás?

Un beso.

Isabel Huete dijo...

Fíjate que estuve a punto de escribir en el blog el día que se difundió la noticia (la falsa) algo sobre el maltrato infantil y en concreto sobre este caso. No lo hice por no sé que razón pero puedo imaginarme que, como yo, muchas personas pensarían lo mismo y sí llegarían a escribir algo al respecto. No quiero ni pensar cómo me sentiría al saber la verdad a pesar de que no tendría ninguna culpa y cómo se habrán sentido ellas.
Tienes la buena costumbre de denunciar y a la vez ser comedido en tus comentarios ante situaciones tan demenciales, pero como yo soy mucho menos correcta (lo cual a veces me pierde), te diré que me parece tan grave lo que se ha hecho tanto por parte de quien lo trasmitiera a los medios como los propios medios que lo difundieron sin acabar de contrastar la noticia que deberían rodar cabezas como rodajas de salchichón. No hay excusa por parte de nadie: ni de los médicos que afirmaron algo sin esperar a la autopsia ni de los medios que con tal de vender antes y mejor se dejaron llevar por la carnaza que suponía la noticia para los morbosos y podridos alarmistas de siempre.
Si Esparanza Aguirre y todos su gobierno quedaron impunes después de condenar sin pruebas al Dr. Montes del Hospital de Leganés y nadie se molestó en reparar la calumnia ni readmitirlo en un trabajo del que nunca debió ser despedido, qué no se hará ahora para que nadie pague por esta terrible acusación sin sentido.
¡Siento tanta vergüenza ajena y tana impotencia! Al hombre al que se ha vilipendiando sin sentido, aparte del dolor que se le ha inflingido y de tener que luchar para intentar limpiar su nombre, tendrá que luchar contra toda nuestra burocracia judicial y administrativa para que se condene a los culpables y me temo que esa lucha será larga, inútil y no recibirá compensación alguna.
Para él toda mi solidaridad y todos los ánimos, porque lo va a necesitar.
Besotes.

Silvia_D dijo...

Es inconcebible que sucedan estos errores. Dentro de lo malo, espero que esto sirva de algo en el futuro, aunque tal y como está el asunto, parece que les de igual destrozar la vida a las personas en aras de subir audiencia.
Besos!

elena clásica dijo...

Necesario comentario sobre la tragedia de este caso, pero también sobre todos aquéllos en los que no se hace efectivo el respeto por la presunción de inocencia. Y entonces ¿qué le queda a un ser humano cuando es acusado injustamente? ¿Qué le queda? Queda desposeído de su más precioso derecho.
Una de las tragedias más terribles que puedan sacudir a una persona, es la de ser acusada sin pruebas fehacientes, de convertirse en víctima de un linchamiento desde los medios sensacionalistas, como apuntas, de la masa agitada que no contempla la posibilidad del error jurídico, facultativo o cualquier otro.
¿Cuántos inocentes habrán pasado por este dolor y cuántos seguirán pasando en este momento?
No puedo dejar de pensar en Dolores Vázquez, qué pensaría cuando escuchaba los gritos de la gente, tachándola de ser culpable de los oprobios más espantosos.
Y en el profesor de Educación Física acusado falsamente, como se demostró, por el asesino de la niñita Mari Luz de abusar de su propia hija.

Trágicos errores que pueden hundir para toda su vida a alguien, aun cuando el inculpado tenga la fortuna de que su inocencia reluzca finalmente. Esta situación provocará un cambio en la persona quizás sin vuelta atrás y con ello vivirá el resto de sus días.

Que se respete la presunción de inocencia siempre, me sumo a esta petición y a esta reflexión y agradezco muy especialmente esta entrada.
Besazos.

Silvi (reikijai) dijo...

Todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario.Y por más que se consiga un resarcimiento, de que sirve… si por la sociedad ya fue sentenciado… Quien le devuelve su vida antes de… Es terrible…esperemos si,este caso siente jurisprudencia… para que no se vuelva acusar sin pruebas… Besitos. Silvi.

Myriam dijo...

1- Que una persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario: de acuerdo.

2-"El espectáculo público en el que los medios de comunicación utilizan el morbo para sacar partido en el índice de audiencias no ha parado" Absolutamente de acuerdo y en lo de mantener las identidades secretas, más vale.

3- Ahora me pregunto:
a. Cómo los servicios Sanitarios del lugar, tienen un MD que receta una aspirina, en un caso en qué supuestamente hay múltiples fracturas y-o golpes.
b. Cómo otro MD puede ver desgarros vaginales y anales en dónde supuestamente no los hay ¡¿?!
c. Cómo se puede confundir una alergia con quemaduras de cigarrillo.

Algo me dice que además de que lo medios de comunicación implicados son sensacionalistas y se dedican al circo morboso, que la Medicina en Canarias deja mucho que desear...

Me gustaría leer el informe forense completo. Ahora bien, si los Médicos de Urgencias son tan "incompetentes", que me asegura a mi que el Equipo Forense sea "competente"?

Fernando Portillo dijo...

De unos años a esta parte, los servicios médicos y las fuerzas de seguridad, tienen un asidero común que les libera de cualquier tipo de responsabilidad: los protocolos. Ante cualquier evento que se presente, se abre la caja de los protocolos y se elige el correspondiente: ¿niña con lesiones? pues se aplica el protocolo de malos tratos y se deja que las cosas funcionen solas. Luego, si resulta que la pequeña se había caído de un columpio sale el gerifalte de turno a pedir disculpas por todos y a decir que se aplicaron los protocolos correctos.

Por lo que respecta a la prensa, hace también muchos años que los periodistas tienen una palabra mágica que, precediendo a los sustantivos "asesino", "terrorista", "ladrón", "violador", "parricida", etcétera, etcétera, libera al informador de cualquier responsabilidad en la que pudiera incurrir por violar la presunción de inocencia de las personas. Esta palabra es "presunto". Así yo puedo decir "el presunto asesino de la niña la violó presuntamente antes de romperle presuntamente la crisma con una estaca", y quedarme tan tranquilo. Yo creo que los teclados de los ordenadores de los periodistas deberían tener una tecla de función que, al pulsarla, escribiera automáticamente la palabra "presunto" para ahorrarles esfuerzo.

Pero no crean que han sido solo los periodistas los culpables de lo sucedido; sino una sociedad absolutamente estupidizada y auto-privada de la más mínima capacidad de raciocinio y crítica que actúa como se actuaba en la Louisiana de los años treinta: si aparecía una chica blanca muerta, tenía que haber sido, por cojones, un negro. Y se trincaba al primero que pasaba por allí y se le linchaba en pandilla sin hacer preguntas.

Si hoy se aparece una niña con lesiones tiene que haber sido el compañero sentimental de la madre. Siempre es el compañero sentimental, delincuente, maltratador y asesino "in péctore". No se les ocurra, amigos varones, hacerse nunca compañeros sentimentales de nadie porque pueden acabar colgados de una cuerda de cáñamo sin saber por qué.

Unknown dijo...

Parece que el sentido de justicia, leyes y derechos se han tergiversado. No solo en vuestro país, sino en casi todos "efecto de la globalización" y en el afán de noticia. "Ahora resulta que se es culpable, hasta que se demuestre lo contrario" o “que las leyes protegen a los victimarios y deja indefensas a las victimas”
Hay demasiados vacíos legales en los códigos de justicia.

Merche Pallarés dijo...

Los compañeros que me preceden han dicho todo lo que se puede decir sobre este tema mucho mejor de lo que yo pudiera añadir. España sigue siendo un país cruel, calumnioso y cotilla. Besotes apesadumbrados, M.

Pocomancha dijo...

Entiendo que debe haber libertad en todos los aspectos que no libertinaje, y la prensa como la sociedad actual están ejerciendo el libertinaje, además, la jurisprudencia ya le otorga a la prensa, o lo que es lo mismo, a la libertad de información mucho más valor que el derecho al honor y a la intimidad de las personas. Con todo esto, ya está todo dicho, son el PRIMER poder, después va el ejecutivo, después el legislativo y en cuarto lugar el judicial.
Remodelación del sistema ya.

Hernando dijo...

Toda esta telebasura es una auténtica mierda, pero si existen estos programas es que gusta, para erradicarlos deberíamos empezar por la base.
No entiendo que unos profesionales de la medicina hagan un diagnóstico tan equivocado, que se llegue a la muerte y la autopsia para saber la verdad, se supone.
No me gusta nada todo esto, espero que este tipo de programas y noticias se erradiquen.

Camille Stein dijo...

poco importa si las fuentes originales de información son o no son fidedignas... es época de crucifixiones fáciles y de jaurías humanas, de miseria, de diseccionar 'en vivo y en directo' a quien, por dictamen mediático, se despoja de inocencia...

saludos

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

comparto tus palabras , y me asquea la prensa, el enjuiciador apresurado, y la actuación policial (tremendo lo que tuvo que pasar ese muchacho ante las fotos de la niña tras la autopsia)..yo tambien lo denuncio...saludos

matrioska_verde dijo...

Este tema es tremedo, Pedro. Diego ingresado en psiquiatría con riesgo de suicidio y no es para menos. Cualquier persona inocente se volvería loca. Esta mañana venía escuchando las noticias de camino a la oficina y decían que le obligaran a ver las fotos de la autopsia. No me puedo imaginar semejante dolor.

Es espeluznante.

biquiños,

Ele Bergón dijo...

!Qué difícil es ser objetivo, aunque sé que la objetividad plena no existe y qué difícil es respetar la presunción de inocencia.

No estamos acostumbrados a hacer un mínimo de análisis y al final cada uno vamos a lo nuestro, sin saber ponernos en el lugar del otro.Por otra parte somos muy fáciles de manipular, algo en lo que has insistido por aquí, por eso los poderosos se aprovechan y al final las injusticias se las lleva el más inocente.

Un abrazo.

Luz

El Pinto dijo...

Compartimos el sentimiento sobre el caso.. Me preunto si esta sociedad de la que formamos parte será capaz de encontrar una forma de solidarizarse y animar a Diego.
Un abrazo

MAJECARMU dijo...

Apoyo todos los comentarios y sólo me resta decir, que las apariencias mandan..
Por qué cansarse en profundizar..? Ello es una pérdida de tiempo..Y así en el tiempo se han perdido los PRINCIPIOS Y VALORES..

Y al volver la esquina.. EL CAOS..!!

Mi felicitación por tu solidaridad.
Mi abrazo siempre.
M.Jesús

Mª Antonia dijo...

Querido Pedro:
De acuerdo con todo lo que dices... pero te confieso que quedé horrorizada cuando escuché la noticia (falsa) por primera vez, porque es una cruel y cochina realidad que los niños sufran continuas vejaciones, malostratos y abusos por parte de los adultos más cercanos a ellos ¿ O no? ¿Soy culpable de creerme el horror cuando estamos rodeados de horror?...
Ahora, cuando se sabe la verdad, todos nos rasgamos las vestiduras. Lo lamento por Diego, por haberle caído toda la basura de esta sociedad encima y me solidarizo con él. Sin embargo, este hecho demuestra, una vez más, que tanto él como la mayoría, somos simples marionetas de los distintos poderes que gobiernan el mundo, entre ellos, los mismos medios de comunicación que hoy se arrepienten... pero el daño ya está hecho.
¿Quién le devolverá al chico la tranquilidad y el equilibrio perdidos? ¿Los médicos que diagnosticaron mal a la pequeña?¿La policía que se precipitó en detenerlo sin contrastar pruebas?
¡Es todo tan surrealista!

Un abrazo.

Marian Raméntol dijo...

"En España, por desgracia, se confunde el periodismo serio con el sensacionalista en demasiadas ocasiones. Y no se respeta nada a su paso"

Cuánta razón llevas...

Marian

lichazul dijo...

los medios están en constante lucha por sobrevivir a costa de lo que sea lamentablemente y muchas personas hacen lo imposible poraparecer en sus portadas auqnue sea una tremenda mentira, acá con los medios es lo mismo. No se corroboran las fuentes, las fuentes no tienen plena certeza de que un hecho hubiére sido tal cual como se expone , sino que lo que prima es la venta de ejemplares o ser el primero en dar el "golpe" noticioso en donde los demás medios tengan la obligación de colgarse del primero que lo difundió para no ser menos.

Ojalá en este caso los afectados tengan la misma cobertura para redimir esa falsedad y que los medios escarmienten...aunque lo dudo

un besito de luz profe

Unknown dijo...

Apreciado Pedro…

Pones una vez más el dedo en la llaga. Hoy en día la profesión de periodista camina por unos cánones complejos donde la moralidad y la falta de escrúpulos se dan la mano constantemente.
Cornelius, matiza la presunción de inocencia desde el punto de vista jurídico y hace bien en tocar el tema como complemento a lo que expones. Creo que todo en el fondo obedece a una sinrazón sin paliativos posibles donde todo vale por conseguir una noticia, un titular que enganche a la gente sin importar el daño moral que se está haciendo.
El daño físico suele curarse con el tiempo. El moral anida en las entrañas de uno y termina por hacer sucumbir a quien la propia sociedad ha juzgado y condenado atribuyéndose unos atributos que ni la propia justicia tienen definidos como tales.
Ese cuarto poder de la prensa es una espada de Democles sobre una sociedad que presume de evolutiva y moderna sin dejar de ser una chabacana medieval cuyo progreso es más que cuestionable ante actos como este.
No es el primero como bien apuntas. No será el último como se supone. Aquí no se aprende de los errores, sino todo lo contrario. Uno crece con ellos. Los vuelve a cometer y simplemente no pasa nada.
En todas partes hay profesionales buenos y algunos que no lo son. Pero si ahondamos en el tema, siempre llego a la misma conclusión, el pueblo, el ciudadano de a pie, es el receptor de toda esta porquería mediática que vende periódicos, gana audiencias y hace que el limite ético sea sobrepasado constantemente. Creo, desgraciadamente que se presume de un nivel cultural que no se tiene. Y eso hace que ciertos mediocres que deberían estar en la cima más profunda del ostracismo estén ocupando programas estelares por su nivel de repercusión, no de la calidad o contenido. En el fondo, el pueblo siempre quiere este ansiado circo. Y eso es tan lamentable como lo vivido.
Con extrema gravedad se repite constantemente el juzgar sin tener todos los antecedentes sobre la mesa para emitir un juicio. Y después, la excusa siempre es la misma… -Es que a mí me habían dicho. -Es que yo pensé.
Qué triste espectáculo ser espectador de tanto absurdo dañino.
Como periodista uno tiene una ética que no debería olvidar nunca. Y si lo hace una vez, su dignidad no debería de permitirle seguir ejerciendo su profesión. En casos como este, uno debería de tener el valor moral y un código de honor profesional capaz de hacerse el harakiri por haber faltado a sus propios principios. El código deontológico de una profesión como esta no puede jamás quedar en entredicho.

Un abrazo

Fuentecillas dijo...

¡¡ Uf Pedro¡¡
Aún no lo he digerido, madre mía.
Fuen

Anónimo dijo...

Buenos días, profesor Ojeda:
¡Cuánto dolor irreparable en las auténticas víctimas, por las prisas irresponsables, los errores y la falta de escrúpulos por ganar audiencia de algunos medios!.
Todos jueces rápidos de tertulia.
Luego vendrán los juicios inacabables en los juzgados, donde un juez todopoderoso, dictará una sentencia infalible, apresurada y con prisas, también.
Y así nos va.
Saludos. Gelu

Silvi (reikijai) dijo...

Los médicos forenses,como los demás profesionales intervinientes,son auxiliares imprescindibles de la Justicia. En sus dictámenes reposa una gran parte de la eficacia de los procedimientos jurídicos,un pronunciamiento pericial suele tener el carácter de un verdadero prenuncio de las decisiones del juez, sea en cuestiones de fondo o incidentales.Todo centro asistencial debería contar con un equipo de psicólogos o trabajadores sociales… que el profesional medico ante la menor duda… pida intervención. Cada país, tiene sus leyes… es difícil opinar.
Y en cuanto al periodismo…no se puede poner a todos en la misma bolsa… Bien lo explica Camille Stein . Les dejo un beso. Silvi.
Les dejo un link… Asesinatos para subir rating en Brasil
http://www.youtube.com/watch?v=ox1fGiNMeAA&feature=player_embedded

São dijo...

Ay, meu querido amigo, que infelizmente tens toda a razão ao denunciares esta maldita febre de audiências e vendas que leva os meios de comunicação social a esquecerem toda a ética , toda a deontologia, tudo , enfim!

Um grande abraço.

Anónimo dijo...

DE ESTA FORMA SE ACTUA ALLI AQUI Y EN TODAS PARTES ....NO ESTOY AL TANTO DE ESTA NIÑA Y SU TRAGEDIA ..PERO SEGUN LO QUE LEEMOS ES UN LLEVAR Y TRAER DE LA PRENSA COMO SIEMPRE...ALGUNAS VECES PARA NADA OBJETIVA....

BESINES PEDRO ME GUSTO COMO RELATASTE ETA TRAGEDIA....NO SE COMO LLAMARLE...SIN JUZGAR ...NEUTRAL SERIA?

BESINES
:)
SAU

pancho dijo...

Debo haber vivido en la inopia informativa durante esta última semana. No sabía casi nada del asunto. Después de haber leído tu entrada y todo lo que aquí se ha escrito, voy más que bien servido.

Es el eterno problema de la información y los medios. La competencia es grande, la gente vive de esto. Lo importante es llegar primero, no importa que para ello tengas que pasar por encima de gente ajena al mundillo. Lo primordial es sacar la noticia antes que nadie, la verosimilitud es tema secundario.

Parece que la cadena de errores ha sido múltiple.

un abrazo.

jg riobò dijo...

Yo no participo en el espectáculo.
Me parace que se ha llegado a unos niveles vergonzosos y que una huelga de compra, visionado y no escucha de los medios sería lo mínimo.

BURGOSPEDIA.ORG dijo...

Interesantisima refelexión pedro ante tamaño linchamiento público. Los medios debieran haber pedido PERDÓN en portada igual que lo condenaron; En grandes caracteres y subrayado negrita

El Deme dijo...

Nos encanta difundir noticias exageradas, poner todo lo peor que puede pasar y con los máximos detalles posibles, para pensar que el mundo es un lugar horrible y que tenemos mucha suerte al estar en un entorno normal. Yo hace tiempo que no veo los telediarios porque toda la información va dirigida hacia la transmisión de miedo, pánico, horror, extrañeza, egoísmo y caos, ese pensamiento de la intranquilidad que te quiere obligar a no salir de casa por si pasa algo (¡el tráfico! ¡la lluvia! ¡alguien tose a tu lado!)Una reflexión muy interesante la tuya, Pedro.

Pablo A. Fernández Magdaleno dijo...

Completamente de acuerdo.
Un abrazo

Antonio Aguilera dijo...

La "masa" (que no el género humano)está ávida de carnaza: siempre vigente lo de "al pueblo pan y circo". Y yo añadiría: " y buggi buggi", pues es celebrado con fruición por la "masa" descerebrada.

¿Y el cuarto poder, qué hacemos con él??, ¡que los dioses nos libren de él!!.

Abrazos compañer@s

Jesús Garrido dijo...

Todos somos partícipes de estas cosas, no queremos pero es innato, nos dejamos arrastrar por la muchedumbre o morbo del asunto sea verda, mentira, inventado, lo que sea.

Yo mismo confiese hoy haber retrasado mi desayuno por ver el desenlace que tenía un compañero de trabajo con un administrado.

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

Los médicos erraron de forma evidente y los periodistas no confirmaron bien la noticia. Doble error. un abrazo.

Anónimo dijo...

A pesar de que pienso que los medios de comunicación no emplean muchas veces su ética profesional, en éste caso creo que la metedura de pata más grande fué del médico que informó de los desgarros vaginales, anales, quemaduras de cigarros por el cuerpo...¿que formación médica tiene ése señor? Lo siento por Diego, la niña y su familia. Isabel.

Isabel Huete dijo...

Conozco bastante bien lo que es la sanidad en Canarias porque mi familia, especialmente mi madre en su momento, tuvo que sufrirla. Es el caos más espantoso que se pueda imaginar y de una falta de profesionalidad tremenda. Que se lo pregunten a una de mis hermanas que vive allí.
Esto puede ocurrir en cualquier parte, pero es significativo que haya ocurrido precisamente en Canarias.
Besis.

Fernando Portillo dijo...

Todo esto es de risa, amigos, y vosotros, sin quererlo, formais parte del espectáculo: Ayer Diego era un monstruo; una fiera corrupia a la que había que encerrar y tirar la llave a un pozo. Hoy es San Diego y hay que pedir para él la beatificación a toda prisa. Pero al final, ¿Había o no había quemaduras de cigarrilos en la piel la pequeña? (hasta yo distingo eso) ¿Había o no había desgarros en su vagina? ¿Dónde está la verdad y quién nos la cuenta?

Caminante dijo...

APROVECHO, EN LA IDEA DE QUE TÚ TAMBIEN ESTÁS SENSIBILIZADO CON ESTO, PARA COLGARTE ESTA PETICIÓN DE AUXILIO... GRACIAS: PAQUITA

¡ apoyar a AMINETOU HAIDAR] URGENTE !
Date: Tue, 1 Dec 2009 13:56:55 +0000

Con la idea de apoyar a AMINETOU HAIDAR en estos momentos, se ha hecho esta sencilla página para que todo el mundo pueda colaborar con su firma. El enlace es el siguiente: http://www.artifariti.org/aminatou/formulario.php

Gabiprog dijo...

Mi trabajo son los errores me digo a veces, y sé que hablo a nivel industrial, sin embargo no dejo muchas veces de comparar lo que vivo a nivel profesional con el entorno social y personal que me rodea.
Hacía los errores, siempre buscamos culpables, y casi nunca los motivos, y sobre todo que hacer para que no vuelva ocurrir. Esto pasa con las cosas más simples, pensemos ahora en asuntos mucho más fundamentales.

Marina dijo...

Poco más se puede añadir a lo que tú dices. Únicamente que suscribo todas y cada una de tus palabras.
Un abrazo.

Caminante dijo...

En la radio alguien decía que la presunción de inocencia se aplica Siempre a los políticos y Gente de Alta Alcurnia... -léase: dinero-. A la Chusma, a nosotros, nos tratan como Parias... nos echan a los perros de inmediato ¿Prejuicios de clase?... los pobres lo peor ¿qué será será?
Besos: PAQUITA

Ayer PASÉ EN UN SUSPIRO, LLEVABA PRISA POR ALCANZAROS A TODOS.