lunes, 19 de octubre de 2009

El matrimonio, las narices de Tomé Cecial y Cornelivs y noticias de nuestra lectura.

Las palabras que pronuncia don Quijote sobre el matrimonio en el capítulo de la semana pasada corresponden a un tópico literario. Leerlas en clave moderna es descontextualizarlas:

-Si todos los que bien se quieren se hubiesen de casar -dijo don Quijote-, quitaríase la eleción y juridición a los padres de casar sus hijos con quien y cuando deben; y si a la voluntad de las hijas quedase escoger los maridos, tal habría que escogiese al criado de su padre, y tal al que vio pasar por la calle, a su parecer, bizarro y entonado, aunque fuese un desbaratado espadachín; que el amor y la afición con facilidad ciegan los ojos del entendimiento, tan necesarios para escoger estado, y el del matrimonio está muy a peligro de errarse, y es menester gran tiento y particular favor del cielo para acertarle. Quiere hacer uno un viaje largo, y si es prudente, antes de ponerse en camino busca alguna compañía segura y apacible con quien acompañarse; pues, ¿por qué no hará lo mesmo el que ha de caminar toda la vida, hasta el paradero de la muerte, y más si la compañía le ha de acompañar en la cama, en la mesa y en todas partes, como es la de la mujer con su marido? La de la propia mujer no es mercaduría que una vez comprada se vuelve, o se trueca o cambia, porque es accidente inseparable, que dura lo que dura la vida: es un lazo que si una vez le echáis al cuello, se vuelve en el nudo gordiano, que si no le corta la guadaña de la muerte, no hay desatarle.

Puede extrañar que sea él el que las pronuncie, defendiendo un matrimonio alejado del amor y en el que participe el buen juicio de los padres, pero encaja en el personaje (recordemos que es soltero y que nunca, en sus ensoñaciones con Dulcinea pretende casarse con ella: sería incumplir las normas del amor cortés que se parodia). Esperemos, sin embargo, a la conclusión de la aventura de las bodas de Camacho para sacar conclusión definitiva, porque no siempre Cervantes está de acuerdo con su personaje.

Por ahora, podemos decir que don Quijote opta por una vía moderada y que todo ello se inscribe en una costumbre, una norma moral de la época y una línea artística de tratar el tema: el amor es una pasión desordenada, según se entiende hasta el siglo XIX y, por lo tanto, caótica y con funestas consecuencias porque en realidad es un trastorno del juicio, es decir, de lo que debe regir la vida en sociedad según los principios que han regido la moral oficial hasta el siglo XIX. Frente a ella, la voz popular, Sancho, nos anticipa una lectura en la que la voz del amor es más importante (pero, observémoslo bien, como distorsión). Hemos visto que Cervantes, en otros momentos de la novela, defendía el amor: pero siempre tratado como tópico literario, una clave de género. Veremos si en la conclusión de esta historia hay un avance.

Cervantes trató, como muchos autores del momento, el tema del matrimonio: fue especialmente duro con los matrimonios desiguales en edad. Era un tema de esencial importancia para el tejido social, pero también de fácil burla literaria. En una sociedad en la que la libertad en la elección de cónyuge no era un derecho, se irá problematizando la situación hasta hacerse insostenible.


Las narices de Tomé Cecial y Cornelivs
Como sabéis, Cornelivs, de joven, amplió sus prácticas de mecanografía copiando el Quijote: su edición es única y tiene un valor sentimental que la convierte en un tesoro para la familia y también para nosotros, embarcados en esta locura.

Hace unos días me mandó copia digital de alguna de las páginas correspondientes a la Segunda parte. Publicaré las ilustraciones cuando correspondan a cada capítulo. Lo hago hoy con ésta, que habla de un episodio que ya hemos leído: cuando Sancho descubre, atemorizado, las narices del escudero del Caballero del bosque.

El escudero resultó ser un vecino de Sancho, Tomé Cecial. Pues bien, al buscar en Google este nombre me he encontrado con la agradable sorpresa de que el primer resultado -antes que muchas referencias académicas- corresponde a esta entrada de nuestra Abejita de la Vega. Bien por Cornelivs, bien por Abejita.


Os animo a mandarme imágenes que reflejen la iconografía cervantino-quijotesca o a que las publiquéis en vuestros blogs, para acumular toda la información posible sobre Cervantes y el Quijote. Sobre todo me gustaría publicar imágenes no usuales, aquellas de pequeños lugares.

También os pido que me remitáis autorretratos quijotescos. Recordad que debéis estar con un ejemplar del libro o en actitud quijotesca.

Noticias de nuestra lectura

Abejita nos muestra a Cervantes en otoño, con el susto que nos da la reforma urbanística proyectad en ese lugar. Luego da voz, como suele hacer con tanto tino, a un nuevo personaje secundario del Quijote: en este caso, el bachiller Corchuelo, que nos hace su propio resumen del capítulo. Después publica nueva carta del Sanchico, un tanto picado por la aparición de tanto secundario, no le vayan a robar el protagonismo: el pobre echa de menos a su padre, claro. Lo sabemos gracias a Ele Bergón.

Jan Puerta centra especialmente su comentario del capítulo de esta semana en las frases que dedica don Quijote al matrimonio y la intervención posterior de Sancho. No os perdáis ni su Quijote de hojalata ni el enlace que propone.

Manuel Tuccitano señala, con acierto, cierta contradicción entre el título del capítulo y su contenido. No es la primera vez que pasa, aunque era más frecuente en la Primera parte, terminada con apresuramiento para entregarla a imprenta. Después, centra su entrada en informarnos de la esgrima, noble ciencia o deporte que aparece como núcleo del capítulo. Finalmente, nos descubre un interesante blog con su ilustración que merece la pena visitar.

Pancho hace un resumen magnífico del capítulo, en el que no falta ninguno de sus asuntos. Y no os perdáis el interesante dibujo con el que lo ilustra.

Cornelivus comenta el capítulo con buen tino. Os recomiendo que prestéis atención, sobre todo, a su forma de ver la participación de Sancho en los acontecimientos.

Desplazados nos regala un buen postre de chocolate para la comilona de las bodas del rico Camacho. Para no perdérselo.

Antonio Aguilera se disculpa esta semana: no comenta el capítulo porque nos depara una buena sorpresa.

Enlace con el índice de nuestra lectura, elaborado por Raúl Urbina : Primera parte y Segunda parte.
Enlace con el blog construido por Manuel Tuccitano expresamente para esta lectura y que puede considerarse un agregador con los enlaces de todos los blogs participantes de forma regular, aquí.
Enlace con el grupo en Facebook, aquí. (Este grupo no sustituye a la lectura en este blog y no estáis obligados a uniros: lo usamos sólo como complemento, para informarnos, preguntar y debatir.)
Enlace con la entrada en la que encontraréis sugerencias si os incorporáis con la lectura ya iniciada, aquí.
Si me he olvidado de alguien, hacédmelo saber y lo subsanaré. Recordad enlazar vuestras entradas con La Acequia, para poder encontrarlas.
Vale.

25 comentarios:

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

¡Recuerdos de Priego...! Te esperamos...!

Un abrazo.

pancho dijo...

El número uno de Google de La Abejita es una demostración del peso que tienen las cosas en Internet, algo de lo que ya nos has hablado antes.

Eso de que el matrimonio es como un nudo que sólo lo desata la guadaña de la muerte es algo que todavía está vigente en la creencia dominante de este país. Si lo quebrantas ya sabes las consecuencias...

Algo excepcional, mecanografiar El Quijote, más mérito aún si lo haces de adolescente y lo ilustras con dibujos, como Cornelius.

Gracias por la reseña del comentario propio del capítulo. No llega a las seis entradas largas de Ágora, pero muy agradecido por tus palabras de todas formas.

A propósito, ¿Cuántas veces has visto la película? Parece que un trabajo de estas características, tan exhaustivo, requiere más de un visionado, creo yo.

Un abrazo

Merche Pallarés dijo...

Vamos a ver qué pasa en la boda, pero viendo el estupendo cuadro que reprodujo ABEJITA, me lo estoy imaginando... El pastel de DESPLAZADOS ¡delicioso! Besotes, M.

Señor De la Vega dijo...

Mi Señor Don Pedro,
Leo su causa sobre las razones Quijotescas para defender los matrimonios concertados y nos pide su contextualización en el XVII.
Yo haré dicho esfuerzo y llevaré el Quijote a pasear por la India de mi memoria y de nuestros días.
Quienes hayan leído las primeras entradas en mi cueva (escasos neandertales), sabrán de mi afición bollywoodiense, me encantan la películas indias, casi todas, pero mucho más, las equiparables a nuestro 'Cine de Barrio' y en general su música.
El amor romántico facilón, ¡ese que le gusta al Senor Zorro! ;-) está presente en las 3 ó 4 horas de metraje indio, además de respeto, familia y tópicos indios... mucha música y mucho baile.
Las bodas de Camacho, bien podrían servir para un guión al uso hindú, sin ningún problema, incluso las figuras quijotescas y panzistas, tendrían paralelo. Faltaría solo la particular coreografía.
Hace unos años, me encontraba en Mysore (India), allí estaba (entre otras cosas secretas del Zorro, que empiezan por hamaca) participando en una boda tradicional entre unos jóvenes, (porque no decirlo, deliciosos). Él, ingeniero de Software y ella de Hardware informático, él trabaja en Alemania y ella ahora también, por entonces y aún soltera trabajaba en Bangalore.
Aproveché sin vergüenza esos días, (nunca la tengo), para escrutar el pensamiento indio: de adolescentes, hombres y mujeres, de jóvenes y jovencitas, de adultos y de ancianos, y así comprender o mejor, discutir sobre el matrimonio concertado. Difícil concepto para un desbaratado espadachín de origen castellano.
La casta era de Brahamanes, (en tantas cosas a años luz de mis ideas y mi pobreza) pero sin embargo, su capacidad de razonamiento, es envidiable y eran interlocutores sabios, que me dejaban hablar para luego machacarme, sin miradas de desprecio y con cariño.
Niños y adultos, eran también aficionados al cine Indio, no podía ser de otra forma (sabían las canciones y bailes de memoria), además conocían la mayoría de los títulos del cine americano y alguno (rara avis) las clásicas de Almodovar.
Pero nadie consiguió dudar siquiera de su postura de salida, sobre el matrimonio concertado, dando razones que las razones del Quijote parecían y superaban. Yo me veía impotente y a todos les preguntaba ¿Dónde queda el amor? y la respuesta era unánime, "el amor llegará" porque somos buenas elecciones del uno para el otro y el amor siempre llega finalmente.
Hay fallos, reconocían, pero muchísimos menos que en occidente y por supuesto nadie nos enseñará o nos dirá que otras culturas se aman más que nosotros, porque no es cierto y de amor sabemos.
...CONTINÚA...

Señor De la Vega dijo...

...CONTINUACIÓN...
Algún año más tarde, una amiga de origen turco que reside en Manhattan, celebraba su boda en Estambul, (y yo con mi hamaca, casualmente allí me encontraba), mi amiga a la que sigo en su periplo vital, es mujer (bella como Quiteria o más) formada, feminista y libre en sus elecciones de pareja, había convivido con judío, musulmán o cristiano, en varios y multiétnicos lugares del mundo, por situar su libertad y credo(que es ella misma).

Pero se casaba con un indio residente también en la Gran Manzana, aunque había transportado a la boda (de Camacho) en Constantinopla a todos sus parientes (los menos decía él), para la ceremonia.
Yo encontré mi revancha, finalmente, jejeje, Indio que se casa con mujer liberal y liberada sin matrimonio concertado, por AMOR.
Cuando hablaba sobre ello con la madre del novio, con mi tez sonriente, me dijo que no era cierto, que hace meses ellos, se habían reunido con los padres de mi amiga, para concertar si eran una pareja adecuada para contraer matrimonio. Y solo después de comprobar que su estatus social, formación, ideas y planes de futuro coincidían, les dieron su permiso.
Sobre la boda, diré que concluyó dos semanas después, en la India y la esposa resultó una diosa cubierta por saris y colores en su frente.

Mi amiga, cuando tuvimos la oportunidad de hablar a solas y le pedí confirmación del hecho, me guiñó un ojo y me dio un castísimo beso de amigos para siempre.

En realidad, la entiendo, nunca hubiese tenido futuro con un espadachín desbaratado y la vida no es cuento y El Quijote menos ¿o sí?.

Me consuela saber, que hoy viven juntos, con familia y felizmente enamorados. बधाईयां

Suyo, Z+-----

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Sería la visión que tenía Cervantes...o quizá el resalto de algo que criticaba??? Pedro son miles las entradas de Google con temas del Quijote que corresponde a nuestra lectura...compruebalo y verás...todo un honor...saludos

São dijo...

Concordo de todo : não podemos tirar as coisas do seu contexto , especialmente as que se escreveram ou viveram no passado.

mas reconheço a dificuldade que, por vezes, isso coloca.

Besos, amigo mio.

Martine dijo...

Ayer noche me llevé el Quijote en la cama.. no pienses mal! ;-) pero confieso ante testigos que me adelanté algo en la lectura, y me sorprendió el "volte-face" de Sancho en cuanto a su opinión sobre el Amor y el matrimonio, (será que la anterior estaba inspirada en lo que la Sra Panza pensaba).. del Quijote nos lo presentas en este Post de hoy y encaja perfectamente con las ideas vigentes hasta hace poco y muy de acuerdo con quien no pasó por el altar.

De los demás enlaces tomo buena nota y o los visité o lo haré en breve..
De Abejita/Doña Cristina/ Corchuelo y lo que falte, un maravilloso descubrimiento por parte de esta Nómada...

Y de Cornelivs ya que podemos decir..

Besos para tí, Pedro y para todos!

Anónimo dijo...

HOLA.............. POR LO QUE VEO HAY BASTANTES NOVEDADES PUES ME ALEGRO QUE ASI SEA.....EN SERIO ME ALEGRO DE TODO CORAZON!

TE DEJO BESINES GIGANTES Y DECIRTE LO IMPORTANTES LEER MIS COMENTARIOS Y ENCONTRAR UNO TUYO..
LOS BESINES DE SIEMPRE....
_:) SAU

Abejita de la Vega dijo...

¡La humilde arañita campeña en primera línea de Google! ¡Qué honor!
Gracias, Pedro, por descubrirlo.Haré una entrada,el acontecimiento lo merece.
Como en la entrega de los Óscar, mi discurso:
Se lo dedico a la que me introdujo en el mundo de los blogs, Luz del Olmo, nuestra Ele Bergón. También a mis compas, mosca cojonera y arañita. A ver si asomáis.
Y, por último, un recuerdo irónico y sarcástico para aquellos que me amenazaron con todas las penas del infierno por haber expresado mis sentimientos en un blog, tal vez con demasiada sinceridad.
Recojo el "Primera línea de Google.
Besos
Cornelius,tu Quijote mecanografiado

Abejita de la Vega dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Abejita de la Vega dijo...

Cornelius, tu Quijote mecanografiado a golpe de tecla, a la antigua, muestra un espíritu de trabajo inmenso, una paciencia sin límites y un amor fuera de serie por el Quijote. Felicidades.

En cuanto al discurso "carca" de Don Quijote, aunque nos chirrie, sobre todo a las mujeres, hay que aceptarlo como expresión de las convenciones sociales de la época. Esperad al siguiente capítulo, Merche ha dado en el clavo con lo del cuadro.

Y, volviendo, a lo del Google:

Sin Pedro Ojeda, esto no hubiera sido posible. Un agradecimiento muy especial para nuestro super profe, que diría Sanchico. Y para todos los que me visitáis: Merche Pallarès, Kety Morales, pancho, Manuel Tuccitano, Antonio Aguilera, Silvia Camacho, Cornelivs, Alatriste, Myr, Selma, todos los acequianos.
Besos

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

Sois unos cracks con esta serie sobre "El Quijote"

un abrazo.

Merche Pallarés dijo...

SEÑOR DE LA VEGA, ¡me ha encantado su descripción de las bodas indias! Recuerdo hace años (creo que en los '80) en la 2 de TVE dieron una serie de peliculas indias y una que me quedó grabada trataba de un matrimonio concertado. Fué bellísima. Se veía todo el proceso de los padres de ella y de él llegando a un acuerdo. Luego la ceremonia, despues el instalarse como matrimonio en su casa. Durante muchos meses vivieron sin tocarse ni hablarse a penas, luego poco a poco empezaron a conversar pero aún sin contacto íntimo (dormían en cuartos separados si no recuerdo mal...) hasta que llego el punto culminante del apareamiento y fue ¡tan romántico! ¡tan apasionante! ¡tan lujurioso! Que quizá esa costumbre no esté tan mal al fin y al cabo... Besotes, M.

Merche Pallarés dijo...

¡Ah! NO era una peli de Bollywood, bueno quizá sí pero era más como de arte y ensayo... Lástima que no me acuerde del título. Besotes de nuevo, M.

Anónimo dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Cervantes, aprovecha cada personaje para tratar el tema del amor y del matrimonio, desde sus diferentes visiones. Y hace una descripción crítica de las costumbres del momento. Al ser variadas, sabe que en el lector se va a crear controversia.

Las mejores explicaciones y más objetivas sobre el matrimonio, las he escuchado de personas solteras. Parece como si desde fuera se viera todo con más claridad. Recuerdo, por ejemplo, una entrevista, de D. Josep Plá con Soler Serrano.

Con su permiso.
Para Merche Pallarés. Creo que te refieres a unas películas del gran director Ray Sotyagit. A mí también me impresionaron. Eran la trilogía de Apu.
En esos paisajes y en esas gentes, me imaginaba situados los escritos de Tagore.
- Sr. de la Vega. Es usted un romántico empedernido. ¿Cuántas veces ha escuchado la canción " Daar Maala" de Dedvas?. No me extrañaría que estuviese estudiando el idioma de la protagonista.

Saludos. Gelu

matrioska_verde dijo...

¡que inceíble lo de Cornelivs! ¿y se lo ha copiado todo?

biquiños,

Merche Pallarés dijo...

GELU, gracias, quizá sí fuese esa trilogía que tu apuntas. Solo sé que fue una serie preciosa. Por cierto, en la que menciono, la protagonista se parecía muchísimo a ¡Lola Flores! Besotes, M.

Señor De la Vega dijo...

Mi Señora Gelu, no sé si Doña Merche se refiere a la Trilogía de Apu, puede ser.
Porque la verdad, es que el tema al que Don Quijote hace referencia, se ha tratado en muchos y diferentes modos, los indios son los primeros interesados y críticos, algo que se entiende porque hace parte de su día a día y son más de mil millones.

Mi Señora Merche, el AMOR es la gran costumbre del hombre y la mujer, yo pienso que lo que cambia es como nos acercamos al amor, pero somos incapaces de entender completamente el por qué surge y su sentido, más allá del apareo.
Al parecer estamos biológicamente condenados a enamorarnos, y no de una media naranja sino de completos naranjales, si nos dejaran, de ahí el control parental de los naranjos.

Mi culta y apreciada Gelu, desde luego la serie de películas que usted menciona, son una de las mejores muestras de cine universal, con acento indio. Ni tan divertidas ni marchosas, como las de Bollywood, pero representan una humana y entrañable aventura personal y familiar, llena de muchas desgracias y algunas e importantes felicidades.
Hace poco la vi en DVD, pero siendo quien soy, no la compré, aunque la recomiendo y mucho. (No se lo digan al Señor Don Pedro, porque no sé lo que escribiría con 326 minutos de film genial entre sus manos)

A los seguidores de los Simpsons les aclaro que este Apu, no tiene nada que ver con el personaje del Badulaque. Aunque el de la serie animada, es uno de los que más me gustan y disfruto; y como es presumible, también tuvo su matrimonio concertado, a pesar de Homero Simpson.

Sobre el film Dedvas, se estrenó simultáneamente además de en Hindi, en Inglés, Francés, Alemán, Mandarín, Tailandés y Panyabí.
Por lo demás, y para mi desgracia no tengo 'don de Lenguas' más bien soy un 'bocazas' en cualquiera que hable.

Para su información 'off the record', habré escuchado la canción bailada por Madhuri Dixit en el papel de cortesana y doblada por la cantante Kavita, en repeticiones que se acercarán a la centena.

Seré sincero, me pone tanto amor imposible e infinito, ¿qué quiere que le diga?, es lo malo de ser yo un personaje, que nació romántico para morir romántico, eso sí, con sus toques ácidos y cítricos.

Suyo, Z+-----

Anónimo dijo...

Buenos días, profesor Ojeda:

La canción, que citaba ayer es Maar Daala. Me falló la memoria al escribir.

Con su permiso:
Para el Sr. de la Vega
Genial como siempre.
He notado que ultimamente escribe menos en su blog. Se le echa en falta.

Saludos. Gelu

Merche Pallarés dijo...

SEÑOR DE LA VEGA ¡me ha encantado lo del "control parental de los naranjos"! Y lo de no dar ideas a nuestro profe sobre éstas 325 horas de film... ¡Qué gracioso es, vuesa merced! Me rejuvenece. A sus pies, M.

Señor De la Vega dijo...

Mi Señora Gelu, no escribo en mi cueva, porque no hay motivo.

Y si me expreso en esta Acequia caudalosa, es para afilar mi espada, bailar mi danza de esgrima y confirmar un dicho atribuido a Mark Twain, que aseguraba que el hombre es el único animal que come sin tener hambre, bebe sin tener sed y habla sin tener nada que decir.

Saludos y Suyo, Z+-----

Señor De la Vega dijo...

Doña Merche, usted es sana y por eso sigue tan joven, además su risa es contagiosa.

Pero para los que no saben del Zorro y buscan maleficios y el fomento de la vieja envidia, que haberlos haylos, les diré que si digo esas cosas, no lo hago como chascarrillo de un gracioso ante algo que me parezca erróneo.

Sino con la profunda admiración y respeto, que la figura de Don Pedro Ojeda Escudero me merece en lo que le sigo y conozco, leyendo en abierto, públicamente, pero también entre sus líneas.

Besos igualmente, Suyo Z+-----

Merche Pallarés dijo...

Por supuesto, mi querido jovenzuelo SEÑOR DE LA VEGA que no creo que sus comentarios quieran eclipsar los de nuestro querido y admirado profe. Simplemente, vuesa merced me hace mucha gracia. A sus pies, M.

Teresa dijo...

Si es chocante que un idealista romántico como Q se contradiga con la severas normas de sociedad. ¿No chocaría su personalidad con el sentimiento de castellano viejo, y a la vez con los Erasmistas? ¿No luchaba entre lo que debería y lo que realmente quería ser? ¿Se escapan en el Q sus pensamientos?
Es igual que un blog, después de muchas páginas no se puede mentir. Alguien te caza.

El manuscrito de Cornelius lo podíamos subastar "de broma" para ver qué precio llega a alcanzar. Me parece algo extraordinario.

Leí el capítulo de Tomé Cecial de Abejita (que es super aguda y tiene mucho nivel. hay que estar muy espabilado para seguirla)

¡Me encanta esta aventura colectiva!