miércoles, 11 de junio de 2008

Opciones

Ya está. No va más. Has jugado, durante estas décadas de opulencia, como si la vida fuera un placer que te anestesiara de lo que sabías: leíste, hace décadas, que aquello en lo que se basaba el progreso que ansiabas tenía los días contados, pero no lo creíste porque todo era producto de las mentes apocalípticas de unos cuantos agoreros y compraste automóviles que no necesitabas pero te daban la sensación de ser poderoso y libre cuando, en realidad, te atabas más a un tipo de vida insostenible y te esclavizabas a grandes corporaciones; casas con lujos que te daban comodidad a expensas de contaminar tu entorno; ocio que ni siquiera disfrutaste, tan obsesionado con poseerlo que ni veías que destruía el paisaje que decías amar y luego recriminabas a los que te imitaron como si tú no les hubieras abierto el camino.
Eres como los que ahora pretenden poner puertas al campo ante una avalancha que se les viene encima: otros demandan su cuota del pastel y no hay para todos y sólo podrá seguir la apariencia aumentando la diferencia entre los que pueden y los que no pueden, los que tienen y los que no tienen, los que destruyen y los que cargan con las consecuencias de la avaricia y lujuria de los otros. Aumentará el número de personas que no puedan comer una vez al día, crecerán los necesitados, pero te conformarás si tú puedes verlo en tus grandes pantallas de plasma. Habrá crisis energética, habrá crisis de alimentos, habrá una fractura inevitable que te pondrá ante el espejo: ya no podrás engañarte a ti mismo pensando que, con un poco de suerte, todo va a solucionarse. Ahora todo está lejos, pero llegará hasta las calles por las que paseas y subirá, en oleadas, hasta el piso alto en el que te refugias. Pero estás seguro de contarte entre los privilegiados que sortearan los malos tiempos y entre los elegidos que salvarán su pellejo. Quizá, como mucho, no puedas tener tanta gente pagada que te lama los zapatos o durante unos años te conformarás con ir de vacaciones un poco más cerca o no tener llenos los armarios.
Ya está. No va más. Te apostaste tu fortuna a que siempre podrías vivir por encima de tus posibilidades, como si fueras uno de aquellos que lo tenían todo: creíste, de verdad, la propaganda de que eras rico. Y de pronto tendrás dificultades para pagar la hipoteca, no podrás hacer esos viajes de placer, tendrás que sumar y restar números que te provocarán jaquecas que te saquen de tu sueño de pertenecer a una clase media que lleva sorda a todo demasiados años con el único horizonte de aumentar su consumo de cosas innecesarias.
Como te has criado igual que un niño mimado, primero echarás la culpa a los que te prometieron esa dicha de la felicidad -¡como si consistiera en eso!-; luego a los gobernantes, que sólo ocupan sus cargos porque tú los pusiste; luego a los personajes que mueven los hilos del retablo, como si no hubieran estado allí desde siempre. Todo antes de mirarte a tus propios ojos. Nunca tantos como nosotros, en la historia, han tenido toda la información en la mano y la han apartado con nuestra displicencia.
Aquí te espero, como a mí mismo, ante la última opción de ser consciente o de que todo te importe, realmente, un carajo.

48 comentarios:

Teresa dijo...

Es que se cae por su propio peso.
¡Chapó!

matrioska_verde dijo...

es un texto muy real... cuanto menos se tiene menos cosas a las que renunciar en los malos tiempos... cuanta verdad tan bien expresada

bicos,
Aldabra

Anónimo dijo...

genial la foto Pedro

d´Agolada dijo...

Que razón tienes, los seres humanos no sabemos controlarnos, ahora vemos los resultados. Un saludo

Isabel Huete dijo...

¡Qué razón tienes, querido Pedro! Suscribo totalmente todas tus palabras.
Un besote.

Euphorbia dijo...

Ahora podemos saber y no queremos: cambiamos de canal cuando en las noticias dicen algo que no nos gusta, todo tiene que seguir como hasta ahora y no permitiremos tener que compartir lo que hemos disfrutado en exclusiva; ya pueden llegar pateras, ya pueden aumentar los pobres, que nosotros seguiremos creyendo que no podemos caer, mientras poco a poco vamos resbalando por la pendiente.
Un beso Pedro

Merche Pallarés dijo...

Desnudos venimos al mundo y desnudos nos iremos. ¿Para qué acumular tantas cosas inútiles? Besotes, M.

Pedro Carcedo dijo...

Sí que hay pastel para todos. El problema es que unos pocos tienen el pastel de todos. Están llenos y no puede comer más, simplemente por que no les cabe. Guardan y guardan, con una estupidez infinita.

XuanRata dijo...

Cómo veo que esto va de ruletas, voy a apostar, pero ando indeciso: ¿al rojo o al negro?
Supongo que no importa demasiado, total, al final ya se que la banca siempre gana.
Pero no todo es negro o rojo. Ya que la mayoría de nuestras necesidades son innecesarias, no creo que haya mayor problema en ir aligerando. Lo dificil será convencer a los que nunca tuvieron que ya no tendrán, que han llegado tarde al festín, que se terminó la coca-cola y se vuelvan ustedes a sus casas o a sus puentes.
Tu foto dicotómica es perfecta pero te advierto que cada vez te costará más lograr buenos encuadres.

Juan Luis dijo...

Ultimamente he reflexionado mucho sobre el tema que has expuesto y coincido totalmente contigo. Algún día se acabarán los maravillosos anuncios de la tele y nos dirán que todo se ha ido al garete... y lo tendremos merecido, por dejarnos manipular.

Saludos.

Silvia_D dijo...

Que se pare el mundo que yo me apeo...
:(

Besos, niño^^

JESUS y ENCARNA dijo...

pero los malos tiempos se tienen que poner muy malos, muy malos para que les llegue a salpicar a ellos, cuando esto pase, donde estaremos nosotros?. "Suerte" que mientras tanto si que hay algo que nos aúna a todos... la enfermedad, la muerte...
Besos
Encarna

begoyrafa dijo...

A lo mejor todo esto sirve para que muchos de una vez por todas entiendan el significado del verbo necesitar y no lo conjuguen tan alegremente: necesito un vestido nuevo, necesito un plasma para ver la Eurocopa, necesitaremos una casa más grande, los niños necesitarán un Colegio en el que puedan aprender bieloruso...
Un abrazo

Anónimo dijo...

Hola Pedro, me llamo Antonia y hace poquito que he descubierto tu blog. Solo decirte que me encanta, y que lo sigo a diario.
Y sobre el tema de hoy, una cosa, no es más feliz quien más tiene sino el que menos necesita. Deberíamos aprender de verdad ésto.
Saludos.

Anónimo dijo...

Poseer nos lleva a poseer más. El órdago consumista en que vivimos tendrá que tocar a su fin algún día. Cuanto más lo pienso más asco me dan los valores en que hemos cimentado buena parte de la sociedad: consumo, beneficio, comodidad y lujo.
Prefiero libertad, solidaridad, y fraternidad.
Saludos.

Fabián Aimar (faBio) dijo...

No te imaginas como comentábamos esto con un par de amigos, así que me permitiré enviarle el vínculo a tu blog. Buen análisis de la realidad, me gustó.
Tal vez el ser de afuera, y desde las diferencias soy un poquito más observador... aquí se vivió un fenómeno donde todo el mundo se subió al tren de la unión europea, se vistieron de ciudadanos de primera e hipotecaron el resto de sus días... he visto muchísima gete vivir de un modo que era muy difícil de sostener, aún antes de la caída... hoy lógicamente no asumen nada de lo que les pasa... todavía están buscando al culpable... culpables éllos? pero por favor!!! jamás NO
saludos
buen trabajo!

Peter Mc Cut dijo...

Hola, duro pero real... veremos como se adapata la gente a este nuevo período, va a ser complicado.
Buenisima entrada chaval, un abrazo.

Pilar_Cordoba dijo...

Pedro,real como la vida misma, lo has descrito a la perfección.
La gente se endeuda más de lo que puede y al final acaban hasta el cuello.
¡Con lo fácil que es vivir con tranquilidad y cómo nos gusta complicarnos la vida!
Tenía que pasar y aquí está. Pero ¡ojo! la crisis es para los ciudadanos de a pie; para los que antes han ganado muchisimo dinero por ejemplo en el sector de la construcción, te hablo de este sector porque es en el que trabajo y lo conozco, para esos sí hay desaceleración (como dice el gobierno)no crisis; ellos no están perdiendo dinero, están dejando de ganar tanto, pero aún así salen airosos de la crisis.
Con respecto a la pregunta que planteabas ayer en la contestación a mi comentario, decirte que cuando la derrota ves que se te presenta en todos los frentes abiertos en tu vida piensa que siempre entre una y otra derrota habrá alguna fisura por la cual se colará ese rayito de esperanza que necesitas.
Un beso.

Esther dijo...

Hola soy nueva por aqui y acabo de leer este último post tuyo, muy buena forma de definir el capitalilsmo al que estamos sometido con la base del consumo desmesurado y el.. ¡a ver quien puede mas! Hasta que el mundo estalle (espero que no lleguemos a eso) Un saludo me llamo Esther y estás invitado a mi blog :)

Anónimo dijo...

por todas esas razones siempre digo: que quiero vivir en el campo...una casa con ventanas grandes y que mi despertador sea el barullo de un arrollo...lejos de la ciudad contaminada de todo lo que decribes en "OPCIONES" hoy aqui.....
magnifico post.como simepre....y como siempre dando la puntada a la relexion que tanto nos hace falta....y mas sobre estos sucesos...
besos para ti!

Anónimo dijo...

Estás bordando estas entradas de crítica, Pedro.

Sol solito dijo...

¡Qué bueno! Y cuanta verdad...Ahora a desesperarse. Besos (los mios no están hipotecados)

Pilar dijo...

Joder, Pedro, perdona por el inicio. Es que he sentido esta entrada como una voz del interior, pero aún a sabiendas de lo responsable de esa voz, hay algo en mí que se resiste a escuchar...
¿Por qué mi amigo Julián (cuando viene una vez al año de Guatemala, de estar con esos que llamamos "pobres") me dice que me (nos) ve más infelices que esa gente?

Anónimo dijo...

Pedro, no se puede expresar mejor.
Me he quedado sin palabras.
Besos.
Nina.

Silvia_D dijo...

Paseaba por aquí... hoy toca Quijote ;)

Besitos, profe^^

Unknown dijo...

je,je,je,... esto está cada vez más emocionante... era lógico que llegara este momento ¿cómo derivará y terminará? con un solo ganador, el de siempre LA BANCA.

jg riobò dijo...

Más claro agua.
Por cierto lo del agua clara es un imposible.
Foto estupenda.

manzacosas dijo...

Hola. Coincido con PEDRO CARCEDO. Y es que los viejos sabemos mucho... Un saludo

Anónimo dijo...

A mi me da risa la conciencia general.

Luego me llaman fatalista.

Me voy a hacer Moira, pero la de la cuchilla.

Anónimo dijo...

En líneas generales la gran mayoría de la gente ajusta bastante el consumo a sus ingresos, por la cuenta que le tiene. Sin embargo, hay una minoría que no pertenecen a esa clase media de la que hablas, aunque cada vez más numerosa, que se sienten en la constante obligación de mostrar su poder adquisitivo a los demás mediante la ostentación de artículos de lujo cuyo precio es mareante para la gran mayoría de los mortales. Junto a éstos está la gran mayoría de la población para los que la media de consumo le resulta tan arriba que las posibilidades de despilfarro son mínimas por cubrir las necesidades básicas a duras penas.
Texto duro, pero necesario mientras no tomemos conciencia de la necesidad de detener el despilfarro: los recursos no son ilimitados, más en nuestro país donde la naturaleza nos ha dotado de un medio más frágil que a otros países de nuestro entorno, donde la regeneración es posible en menos tiempo. pancho

São dijo...

Pedro, meu caro Pedro, o teu texto é de uma lucidez que ofusca e de uma consciência que me permite ter esperança em que nem tudo se afunde.
Bem hajas!
Um grande , grande abrazo, amigo.

El Deme dijo...

La avaricia rompe el saco. Quién nos iba a decir aquello de que con el "Un apartamento en Torrevieja, Alicante!!!!!"...estábamos empezando a estroperlo todo (las costas y los sueños). Cómo nos han podido engañar tanto. De todas formas hay esperanza, no sé dónde, pero la hay.

Anónimo dijo...

Qué bien me ha venido tu post hoy. Gracias por poner un poco de lucidez en un panorama tan desolador.

Anónimo dijo...

Por mucho que critiquemos la situación a la que hemos llegado, lo cierto es que todos hemos participado en el juego, en mayor o menor medida. Nadie quiere vivir con lo mínimo, a todos nos gustan las comodidades. Son muy pocas las personas que eligen vivir con lo justo pudiendo hacerlo de otra manera. Isabel.

Sandra García dijo...

O blanco o negro...ulimamente la sociedad más bien negra.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

El descontrol, el abuso de las tenencias en tiempos prósperos pasan factura tarde o temprano..ahí tenemos la crisis que ahora llama desaceleración....y la banca en el segundo trimestre de este años ya ha ganado un tercio más que el años pasado...y ganará más cuando no podamos pagar hipotecas gigantescas, créditos al consumo de interés variable....salud

Pedro Ojeda Escudero dijo...

BIPOLAR: ¡Gracias!

ALDABRA: sobre todo, más fácil será hallarse, sin tantas cosas innecesarias. Besos.

BLOGOCHENTA: gracias.

D`AGOLADA: no, no sabemos. Saludos.

ISABEL H.: me hubiera gustado estar errado. Besos.

EUPHORBIA: somos ciegos volluntarios. Un beso.

MERCHE: tantas que nos sepultan. Besos.

PEDRO C.: en efecto: somos una especie injusta.

XUANRATA: la banca gana. Siempre. Y tienes razón en la foto. Hoy lo hablaba con unos amigos.

JUAN LUIS: y, además, ni nos lo creeremos. Saludos.

DIANNA: no, hay que intentar cambiarlo. Besos.

ENCARNA: la muerte iguala, es lo único que lo hace. Buena pregunta, ¿dónde estaremos nosotros? Besos.

BEGOYRAFA: en efecto, en efecto: necesitamos pocas cosas. Un abrazo.

ANTONIA: Bienvenida a La Acequia, en la que espero verte en próximas ocasiones. Deberíamos aprender, como dices.

JAVIERSANZ: el consumismo es una espiral hacia la nada. Saludos.

FABIO: gracias por tus palabras y puedes hacerlo, por supuesto. Sí: por allí ya lo pasasteis, ahora se nos viene a nosotros encima. Saludos.

PETER: Muy complicado. Lo veremos.

DESPLAZADOS: en efecto, hasta en eso hay distinciones. Espermos la esperanza... Un beso.

ESTHER: bienvenida a La Acequia. Espero verte más por aquí. Hasta que el mndo estalle.

SAUVIGNONA: ni en el campo se escapa al consumo desmesurado... es una enfermedad contagiosa. Besos.

FUSA: gracias.

SOL: recibo tus besos no hipotecados. No te desesperes mucho. Besos.

PILAR: tu amigo Julián sabe lo que dice porque él ve esa otra realidad. Besos.

NINA: gracias.

DIANNA: ya voy. Besos.

MAFALDIA: en efecto. Y tienes razón, ¿cómo terminará?

JAVIER: pero a veces está más turbia de lo normal.

MANZACOSAS: Pedro Carcedo es un sabio, pero yo siempre lo he visto muy joven.

DARGOR: parca armada.

PANCHO: lo malo es cuando se quiebre el frágil equilibrio. Ya ha pasado. Volverá a pasar. Inteligente comentario el tuyo, querido amigo.

SAO: gracias, tengamos esperanzas. Un abrazo.

DEME: de aquellos tiempos venimos, en efecto. Busquemos la esperanza con dedicación y minuciosidad, a ver si damos con ella.

BRUJAROJA: gracias, me alegro.

ISABEL: en efecto, todos somos culpables, todos.

SANDRA: lo malo es que ni es negra: es de un gris aburrido.

MANUEL: seguirán ahogándonos porque nos dejamos, entre otras cosas. Salud.

Gracias a todos por vuestros comentarios, espero no haberme dejado a nadie.

Merche Pallarés dijo...

Pedrito ¡NO ME CONTESTES! pero veo que no das abasto. He leido tus respuestas telegráficas a TODOS y TODAS pero no puede ser... somos demasiados... tienes que descansar. Te juro que si te olvidas de mi de nuevo NO TE DIRE NADA. Te lo juro. Besotes, M.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Besos, querida MERCHE.

Merche Pallarés dijo...

Has tenido que contestar... Besotes, M.

Anónimo dijo...

Vacas gordas y vacas flacas, ésto es una rueda que siempre ha formado parte de la existencia humana, sólo hay que mirar un poquito hacia atrás.
A veces pienso que esta vida es un puro teatro, donde cada cual representa un papel pero.... la vanidad y la envidía nos lleva a desear el papel de otros.
Saludos y buen finde

Silvia_D dijo...

Merche tiene razón, te vas a estresar, no se puede , lo sé por experiencia y no tengo ni la mitad...

A mi tampoco me contestes, si quiero algo ya preguntaré, vale?? (no es pregunta)
Besos, niño^^

Pedro Ojeda Escudero dijo...

MERCHE: más besos.

TARA: somos así, nos hemos hecho de pasta envidiosa.

DIANNA: pues a ti tampoco te contesto. Besos.

Silvia_D dijo...

jaajajja me matas:))

Merche Pallarés dijo...

¡DIANNA! ¡¿Qué hacemos con este hombre?! Se nos va a enfermar... Besotes, M.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

DIANNA, MERCHE: hay enfermedades placenteras. Besos a ambas.

isla_errante dijo...

la fabula de la hormiga y la cigarra es lo que me recuerda esta ¿desaceleracion? muy buen texto mejor explicado imposible y totalmente de acuerdo.
Un beso Pedro

Pedro Ojeda Escudero dijo...

ISLA: en efecto. Gracias y un beso.