domingo, 11 de mayo de 2008

Jano

¿Cuántos rostros tenemos? Freud teorizó sobre nuestra mente, abriéndola a su multiplicidad, que sería el campo de trabajo de otros psicólogos y psiquiatras y la inspiración de numerosos artistas. ¿Cuántos rostros tenemos y cómo convivimos con ellos? Nos creemos de una pieza cuando no somos más que un puzle o, mejor, una bola irregular hecha de papel de periódico, tan llena de rugosidades y en continuo cambio según la presión que ejerzamos sobre ella.

¿Cuántos rostros tenemos? Ni siquiera en una vida monótona y controlada somos únicos: cuántos se quitan la máscara al cerrar la puerta de casa. Los vecinos de los que protagonizan inesperadas noticias de sucesos suelen declarar que eran buenas personas, que no se lo esperaban.

¿Cuántos rostros tenemos? Hay gente que tiene vidas paralelas y que, en cada una de ellas, son capaces de mostrarse sólidos y sin resquicios. Si esa vida paralela no es externa sino que está dentro de nosotros, puede estallarnos con violencia y destruirnos.

Jano era el Dios de los vanos por los que accedíamos a un lugar o salíamos de él: era la explicitación mítica de las crisis que nos cambian y trasforman. Esos cambios suelen ser producto de todos nuestros rostros internos. Tras el cambio producido por las experiencias, por la circunstancias, uno de ellos se hace con nuestras facciones.

¿Pero qué pasa con aquellos momentos en los que, a través de una grieta mal cerrada salen a la vez varios de nuestros rostros y somos incapaces de someterlos o conciliarlos?

37 comentarios:

PILAR dijo...

Pienso que somos uno en varios.
Voy hablar de mí, mejor.
Me siento como si fuera una crema de verduras, es decir, (vaya ejemplo que se me ha ocurrido) tengo varios ingredientes, pero han sido triturados para conseguir una buena mezcla. Es como un coctel, pero un coctel bueno. A veces tengo más de un ingrediente que de otro. Pero todos consiguen hacerme un solo homogéneo.
En mi contradicción connatural intento ser un conjunto de "yoes" pero me siento íntegra por dentro.
(Me acabo de dar cuenta que en el comentario parece que voy de sobrada, pero no lo voy a borrar porque es así como me siento, y por cierto, no sé si me he sabido explicar).
Las dobles vidas, conozco a personas que las llevan, a pesar de que parece difícil hay personas que se han acostumbrado a vivir así y eso les motiva para vivir su única vida. A mí, me parece una auténtica locura.

Anónimo dijo...

Supongo que todos estamos llenos de cualidades y defectos, pero lo que nos diferencia a unos de otros (son a mi parecer) la nobleza ó su carencia,la justicia, el respeto y las intenciones con las que actuamos.
Cuando una persona se envilece es cuando creo que goza haciendo el mal sin importarle nada.... por lo tanto lo que encubre con esta doble cara es su verdadera intención y su verdadera forma de ser para obtener la mayoria de las veces beneficios indebidos.
Pero quien no ha tenido en algún momento de su vida (movido por algún tipo de interés) doble personalidad??????
Que tire la primera piedra......

Rosa C.

Serendipity dijo...

Que razon tienes Pedro! Todos tenemos muchas caras, unos somos conscientes y otros no. Las caras de las circunstancias, de los distintos estimulos y de los distintos estados hormonales. Hay tantos factores que nos moldean diferentes caras diferentes yoes.

Pilar, me ha encantado tu explicacion y conincido contigo! Nada de sobrada. Muy clara!!!

Un abrazo a ambos y que tengais una magnifica semana!

Merche Pallarés dijo...

Yo soy tan primaria que solo tengo una cara... ¡qué le voy a hacer! Besotes, M.

Euphorbia dijo...

Sí, tenemos muchos rostros, o facetas poliédricas, pero se puede ir por la vida sin soldar esas piezas sueltas, lo que nos acaba arrastrando a la desfragmentación, o bien intentar ir puliendo los encajes hasta conformar una unidad más o menos sólida la a la que quizá podríamos llamar sinceridad…
(Tienes razón… madrugo demasiado.)

Anónimo dijo...

Muchas veces nos tenemos que adaptar al medio dónde te desenvuelves. Muy poca gente se comporta igual en su casa que en el trabajo, con la familia o con los amigos etc, y no creo que sea por tener muchas caras, excepto los cínicos que van engañando a la gente por alguna razón oculta y oscura. Besos Isabel.

fotosbrujas dijo...

vi q te pasaste por la seccion de foto historia, ains¡¡ sigo pensando en la foto de la viuda negra, realmente impactante
un saludo gracias por pasarte por Foto Historia, poca gente lo hace
saludos brujos

fotosbrujas dijo...

por cierto peróna mi grafía, ¿caligrafia? bueno gramatica, en fin, perdonalo todo son solo la sprisas de este mundillo
un saludo

Pilar_Cordoba dijo...

Creo que una persona sería incapaz de llevar una vida pararela a la que está viviendo. Las hay, por supuesto, pero tarde ó temprano acaban cometiendo un fallo y son descubiertas.
Creo que yo no podría vivir tranquila intentado ser varias personas a la vez, llevar de cara al público otra vida que la que en realidad me ha tocado vivir.
Seamos realistas, ¿para qué engañarnos intentado ser otra persona de "cara a la galería"?
Es absurdo. Cada uno es como es. Con sus defectos y virtudes. Y no hay por qué darle más vueltas.
Saludos.

Marcel.la dijo...

Si, somos como un puzzle que se va modelando según nos pide la vida. En cada momento buscamos dentro de nosotros la parte del yo que mejor se adapta a cada situación, o mejor dicho que queremos mostrar en cada situación (buenos, malos ...) Ahora no quiere decir que siempre controlemos y sepamos usar de forma coherente la mascara que hemos decidido mostrar en cada momento ... desenvadenando el la LOCURA!

Anónimo dijo...

Jano es, además del dios bifronte, el dios de las fronteras, el de las puertas de entrada y salida , de ahí que le dediquemos el nombre del primer mes del año, Enero. A mi, se me antoja un dios muy simpático y muy humano porque todos tenemos intrínseca una dualidad. En algunos pocos es la diferencia entre el bien y el mal (el famoso Dr. Jeckill y Mr. Hyde), la mayor parte, en cambio, se refiere a la cara que mostramos a los demás y nuestro verdadero yo.
Toda nuestra vida está llena de situaciones fronterizas y en ocasiones se hace complicado decantarse hacia un lado u otro, menos mal que Jano ( y que sabios eran los griegos) está ahí para ayudarnos a atravesar ciertos vanos.

Sol solito dijo...

Pues yo creo que tengo un rostro para cada situación. Soy serena, y hasta me dicen que cuando están conmigo doy paz,pero hay veces que tengo tanto odio hacia todo que se me escapa por todos orificios de mi cuerpo, dependiendo de la situación, la gente que me rodea...supongo que son máscaras para sobrevivir. Digo yo.... Besos


(Por cierto, pronto iré a Burgos)

Beatriz Montero dijo...

Yo creo que en general deberíamos ir todos al psicoanalista. Igual que se va a otros especialistas médicos.

Han anunciado en peridódicos que en los próximos cinco años va a aumentar el número de enfermos mentales en paises desarrollados.

Yo voto porque los psicólogs formen parte del cuadro médico de la Seguridad social.

matrioska_verde dijo...

Pues yo diría que lo que pasa es que entramos en "crisis" como se suele decir. Es difícil mostrar dos caras (o más) o vivir una vida paralela (o más) aunque hay personas que lo consiguen.

La mayoría de las personas tenemos que hacer una elección para conciliarnos con nosotros mismos. Yo misma he experimentado en un momento de mi vida una catarsis y he tenido que decidir ¿quién quería seguir siendo?. Y decidí ser la que ahora soy. Estoy contenta. Pero no ha sido facil.

Los que optan por No EScoger me parecen también respetables pero de un cansado...

En fin...

Hay un libro que habla de las diferentes caras o armaduras de las personas. Se titula "El caballero de la armadura oxidada" de Robert Fisher. Es muy cortito pero interesante.

bicos,
Aldabra

Anónimo dijo...

Tal vez sea sólo el cínico el que tiene varios rostros, porque es incapaz de ser sincero consigo mismo ni con los demás.
Miguel.

Anónimo dijo...

Pirandello planteaba que no tenemos una personalidad definida, sino muchas, dependiendo de quien nos juzgue.
Hace algún tiempo leí un articulo en donde se hablaba de los Siete Pecados Capitales del siglo XXI, uno de ellos era la hipocresía, para representarla, mostraban a una mujer, no buscando en su guardarropas qué vestir aquel día, sino viendo, qué máscara utilizaré hoy?.
La mascara significa mostrar y ocultar a la vez, y todos sabemos que tras aquello que mostramos, se esconde o guarda una parte que es nuestra, que es intima del ser. Y no sé trata de ser hipócrita, sino por el contrario, ya que resulta difícil ir por la vida siendo tan auténtico, lo queramos o no debemos filtrar, debemos adecuarnos a nuestros roles, etc.
Hasta ahí todo bien, el problema surge cuando nunca te quitas aquella máscara, que la lleves por tanto tiempo o que la utilices tantas veces que hasta olvides quien eres en realidad.
“El mundo es una Teatro, la vida una comedia y todos nosotros excelentes actores” (no recuerdo quién lo ha dicho...)
Excusa la extensa parlata, interesante post.

Dejo mis saludos.

MeTis dijo...

yo se que tengo dos. llamame con sindrome dual si quieren, pero Metis solo es para vosotros, nadie la conoce, es la Lina interior que nadie conoce, por ésta externa es demasiada dura con el mundo y no deja que nadie se cuele por la redija para visitar a Metis. Pero al menos saben convivir. Muchos otros no.

besos

Silvia_D dijo...

Yo ando a tortas conmigo misma todoooo el rato, no se si tengo varias caras o el cerebro hecho puré, la edad no perdona y creo que desgasté las mias pensando en tonterías... así me he quedado con cara boba ;))

Besoss^^

El Deme dijo...

Yo soy yo y mis circunstancias, etc., es decir, que depende de cómo me levante ese día, con quién esté hablando, qué intenciones busco o cómo deseo resolver una situación soy así o de otra manera. Me parece que entrar y salir de distintas personalidades facilita el salir airoso de las situaciones...

jg riobò dijo...

Tenemos un rostro, los demás se encargan de la variedad al vernos con miradas diversas.

ARSINOE dijo...

Todos somos Jekyll y Hyde. De otro modo sería muy previsible y aburrido.

Anónimo dijo...

La pregunta no es cuántos rostros tenemos, que yo por lo menos no tengo demasiados, la pregunta buena es cuántos nos gustaría tener, cuántas vidas querríamos vivir...
La vida, tal como la tenemos, tampoco da para mucho, en el mejor de los casos dos o tres rostros, no más. Y con interferencias, que es lo peor de todo...

manzacosas dijo...

Y por esas grietas que están sin cerrar se nos escapará la vida, poco a poco, pero se ira...

JESUS y ENCARNA dijo...

Buenas tardes, Pedro.
En parte me referia a esto, cuando te escribia mi reflexion en -el deseo suicida-, tambien era un poco -sarna con gusto no pica-.
A veces me sucede, que algo dentro de mi se revela con rabia impotente, delante de situaciones o incomprensiones injustas. A veces solo la controlo cuando pasa la tempestad y reflexiono, mas tarde me calmo, acabo aliviandolo creando en mi tallercito, escuchando musica, pintando o cuando llegan los fines de semana milagrosos y pateamos las montañas de mi querido Pireneo.
Es verdad.... existen diferentes rostros interiores que afloran cuando crees que todo circula con la eterna rutina y esta , se rompe.
Rostros que se han creado como callos en la piel y que aunque los raspes acaban por formarse a base de utilizar las mismas herramientas.
Es curioso... Yo debo estar conectado a alguna corriente energetica e invisible que me avisa del futuro proximo. Te explicare, no es que yo sea el Guru
Jesus, noooo... Sino que hace como dos meses encontramos algo en plena naturaleza que no hace mas que salir po Tv, en noticias, y ahora en tu post. Perdona que te intrigue, pero , cuando puedas pasate por mi blog y mira mi ultima creacion. Luego te explicare.
Saludos
Jesus

Unknown dijo...

yo tengo una cara o rostro y bien grande... y este se transforma según amanezco, puedo ser una Ogra terrible, una mamá cariñosa y dulce, una bruja con escoba que atiza, una experta arreando collejas, un ser amable y cariñoso... esto es un tremendo desastre, ¡qué le voy hacer!

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Pedro tocas un tema del que leo mucho, y que como tu tengo experiencias diarias.... caras??? para cada circunstacia, para cada momento, para cada persona..son máscaras y antifaces, lo peor de todo es cuando te los quitas y sale lo peor. Yo me asombraba mucho con algunos sucesos como el del tipejo ese que tenia a su hija secuestrada.... pero no, hoy me sorprendo cuando las deswviaciones que da la vida no salen antes...Tampoco quiero hacer n discuro. Un abrazo...

Anónimo dijo...

VArios rostros pues no siempre nos comportamos de la misma manera depende del sitio, la compañía, las circunstancias, etc.

un saludo

Teresa dijo...

¡Qué bueno!

He imaginado un poliedro.Cada cara refleja una perspectiva. Además, el material distorsiona la realidad.

Teresa dijo...

Pregunta de colleja:

¿Cómo se rascaba la cabeza Juno?

Pedro Ojeda Escudero dijo...

PILAR: vaya comparación, querida Pilar... Pero te comprendo perfectamente en lo que dices, sobre todo en la homogeneidad (yo no lo he logrado).Vivir dobles vidas es, sobre todo, fatigoso.

ROSA C.: en efecto. ¿Y quién sabe dónde está de forma universal la frontera entre las cualidades que señalas? Buen apunte.

SERENDIPITY: somos muy moldeables, en efecto. Un abrazo y lo mismo para ti.

MERCHE: dichosa tú, querida amiga. Besos.

EUPHORBIA: en efecto. Pero, ¿qué pasa cuando esa uniformidad no es más que la máscara que esconde la tormenta interior?
Duerme más...

ISABEL: no siempre la doble faz es cínica. Como bien señalas, las circunstancias nos moldean en muchas ocasiones. Besos.

CUENTOSBRUJOS: lo hice. Me gustó. Un saludo.

DESPLAZADOS: ...sobre todo cuando no podemos ni con una sola identidad... Lo malo es aceptarse. Saludos.

MARCEL.LA: la tendencia a la locura, en sus muchos matices, es un riesgo permanente del ser humano.

NOVENTERA: en efecto, dios simpático y humano... demasiado humano. Besos.

SOL SOLITO: La supervivencia, como señalas, es una de las circunstancias que más nos hacen cambiar y aplicarnos máscaras. Al menos, en este caso, hay una razón. Besos. Avisa.

BEA: qué necesario sería y cuánta gente arreglaría sus problemas al conocerse.

ALDABRA: leí el libro. Es una fábula sobre nosotros mismos: interesa saber con quién te comparas al leerlo. Besos.

MIGUEL: no estoy seguro. Creo que todos llevamos muchos rostros. El cínico sólo juega con ellos. Bienvenido a La Acequia, espero verte más por aquí.

PATRICIA: me gusta esta aportación. Todos llevamos dentro actores potenciales. Sólo hay que seguir la comedia. Bienvenida a La Acequia. Espero verte en próximas ocasiones por aquí.

METIS: espero que sigan conviviendo, de su roce cotidiano saldrá lo mejor. Besos.

DIANNA: seguro que no, seguro que no. Besos.

DEME: el ser humano ha hecho de esa adaptación su forma de vida, en efecto.

JAVIER: querido amigo, te conozco y sé que en tu caso es así. Y te envidio.

TAREIXA: y tanto, ¿te imaginas vivir en un mundo previsible?

BRUJAROJA: además, las máscaras se nos van rompiendo por el camino y enseñan sus defectos...

MANZACOSAS: se irá, es lo único seguro.

JESÚS: me pasé. Estoy muy intrigado: vi la máscara. Es curioso, ¿coincidencia o destino? Saludos.

MAFALDIA: bueno, con cariño todo se lleva...

MANUEL: tienes razón, tienes razón. A veces es peor el rostro auténtico que las máscaras sociales: que buena forma de verlo.

Un abrazo a todos y gracias por vuestras palabras.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

FERNANDO: en efecto. Un saludo.

BIPOLAR: y todo se modifica con la diferente intensidad de luz de cada momento.
Juno, como buen dios, no tenía picores de cabeza...

Euphorbia dijo...

Contesto a tú pregunta:
Pasa lo que nos pasa a muchos, que por fuera damos la imagen de integridad estructural, a veces incluso la envidia de algunos, pero la procesión va por dentro.

Y como decía un slogan antiguo: "quien madruga compra en Sepu", lástima que ya lo cerraron hace años... ay, no, que era "quien piensa"... ahora entiendo por qué se ha devaluado tanto el pensar.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

EUPHORBIA: Comprendido.

Pablo A. Fernández Magdaleno dijo...

Somos más que Dios, que es uno y trino. Nosotros somos uno y múltiple.
Un abrazo

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Somos dioses atomizados, querido PABLO. Un abrazo.

Unknown dijo...

Supongo que todo el mundo tiene varios rostros.
El apunte de la buena gente protagonista de las crónicas de sucesos me recuerda el refrán: Santos en plaza y demonios en casa.
Puedo hablar de mi: he sido maestra muchos años. Los niños, en clase me tenían respeto y me llamaban maestra o señorita. Cuando venían a casa a jugar con mis hijas me llamaban Antònia y de tú. ¿Dos rostros distintos o dos roles distintos?
Hace mucho tiempo leí un artículo en el cual se decía que los actores geniales no interpretaban ni fingían: se transformaban en el personaje: el enfermo imaginario, el avaro, la damisela boba o el cornudo.
Seguía diciendo que tenemos que sumergirnos en el papel que nos toca interpretar o que queremos interpretar. Cuestión de saber elegir.
Además todo el mundo puede ser cobarde y sin embargo realizar actos de valentía, ser débil interiormente y asumir el rol de fuerte porque alguien tiene que serlo. Puedes escuchar educadamente una conversación insulsa que no te importa nada, cuando en realidad, querrías decir: ¡cállate y no digas sandeces!
Hay gente a la que no le importa nada las convenciones y hacen lo que quieren, pero son los menos.
Incluso los hay que están pensando seriamente en abandonar la especie humana. Llegado el caso me gustaría convertirme en una tortuga o en un caracol. Por la concha.
Saludos.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

ANTÒNIA: me gusta mucho tu comentario. Entiendo, perfectamente, lo de la concha. Saludos.