martes, 6 de mayo de 2008

Espejismo. (El deseo irreal.)



A veces, el deseo nos lleva por el camino falso del espejismo. No me refiero a cuando deseamos lo que no podemos tener, sino a cuando nuestro impulso se centra en lo que ni siquiera existe pero se nos ha construido como si fuera tan real como nuestra propia carne. Vivimos rodeados de falsos estímulos que provocan nuestras ansias porque no sabemos vivir en la realidad que nos toca. Nuestra mente se engaña fácil a sí misma y se arroja en pos de aquello que no es. Y somos capaces de las mayores locuras. La mayor de ellas, cuando queremos vestir con esa piel inexistente los cuerpos que usamos para compensar en ellos nuestras insatisfacciones y, aunque la alisemos bien y con mimoso detalle, denuncia que no les pertenece.
Mientras tanto, como en los espectáculos con los que la naturaleza se ríe de nuestros sentidos, nos sentamos enfrente de estos iconos, a adorarlos, y, en el reflejo, nuestros cuerpos se hacen más reales que nunca, más concretos y pequeños sobre sus hombros. Hasta que llega un momento en que no sabemos ya si ese objeto de nuestro deseo es más real que nosotros mismos y los que nos rodean.

28 comentarios:

Euphorbia dijo...

Cuanta razón tienes. Yo trabajo en el sector de la cosmética y ahí se dice que se vende humo. Sólo hace falta ver los anuncios de cosméticos (y también de coches, por ejemplo)

Merche Pallarés dijo...

Pedro, ¡te he visto en la foto! Sí, vivimos rodeados de estímulos falsos que nos llevan a desear cosas y seres inalcanzables. Besotes, M.

Anónimo dijo...

Yo creo que es una de las meteduras de pata de nuestra vida, ya que no nos dejan apreciar la madurez que nos proporciona la vida en un momento de ella y nos dejamos engañar cuando compramos la belleza como si fuera juventud!.
En algún sitio escuché decir a alguien, que la mejor alternativa que nos dá la vida es envejecer.
Rosa C.

elena dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, que razón tienes.
Un saludo:

Cleoppatra

Sol solito dijo...

Tal vez nos gusta y deseamos la piel del otro porque es muy dificil llegar al fondo de una persona. Desnudarla por dentro, y no por fuera. Que la gente vea tus miserias no esta bien visto, asi que nos disfrazamos de lo que no somos. Besos

Silvia_D dijo...

Dicen que de ilusiones también se vive... yo no sé, pero la imaginación nos hace evadirnos de algunas realidades non gratas y gracias!!
Besos^^

Anónimo dijo...

Si, y mucha culpa de ello lo tiene el maldito Photoshop, (por no hablar de la cirugía estética), que se debate entre la mejora y el engaño.

PILAR dijo...

Cuando alguien desea algo tanto, a veces en su fuero interno, se engaña y llega a creer realidad lo que no es.
Yo casi siempre he procurado ser realista. Es distinto soñar e ilusionarse que desear. Me he encontrado con personas que han confundido sus sentimientos por el sólo deseo ciego de ansiar algo. Está bien desear pero sabiendo la realidad de las cosas.
Se puede desear pero sin engañarse uno mismo.
Lo que ocurre que la necesidad y la debilidad a veces son compañeras de un deseo inequívoco y engañoso.

Caelio dijo...

Don Pedro, como se nota que empieza a apretar el sol. En invierno esas fotografías publicitarias son insulsas, estériles y sin mensaje.

De vez en cuando hay que ponerse a la sombra...

Pilar_Cordoba dijo...

Hola Pedro, que tal. Llevaba tiempo sin pasar por aki. Perdona hombre, ando justa de tiempo.
Pues si, respecto a lo que dices de los iconos estéticos estoy totalmente de acuerdo contigo. La gente (sobre todo los jóvenes)se piensa que puede ser como las chicas y chicos de los anuncios y pueden llegar a cometer locuras por intentar parecerse a ellos.
Es lo que nos quieren imponer, son los cánones de belleza que quieren que sigamos.
Menos mal que a mí me da igual todo eso. Yo soy como soy y no intento parecerme a nadie pero reconozco que cuando era adolescente intentaba seguir las modas y estereotipos que nos marcaban.
¡Que ilusa!
Saludos

jg riobò dijo...

Todos sabemos que se crean falsos deseos, falsos estímulos para que la rueda del consumo continue girando. Muy triste.

XuanRata dijo...

Lo malo es que la omnipresente publicidad que sostiene nuestros sistema no trata de vendernos el objeto del deseo sino el deseo que el objeto promete, y esa deseabilidad que el objeto nos promete se predica de cada uno de nosotros, porque uno no quiere el objeto sino que le quieran a uno. El objeto de nuestro deseo es ser deseados nosotros mismos y que los demás nunca tengan suficiente de nosotros.
No sé si me he liado un poco. John Berger lo explica mejor en su estupendo "Modos de ver".

El Deme dijo...

¿A Charlize Theron le huele el sobaco?. Detrás de toda perfección (publicitaria) hay una realidad pura y dura desconocida. Por cierto, los bancos de Burgos son muy altos, las mujeres que se reflejan sentadas están casi flotando.

manzacosas dijo...

Como de costumbre, Pedro, sombrerazo al canto y un saludo...

nachocarreras dijo...

De acuerdo.
Saludos.

São dijo...

A (torpe) função da publicidade é não deixar o nosso desejo em paz!
Besos, Pedro.

Fabián Aimar (faBio) dijo...

uFFFFFF cómo escapar del bombardeo explosivo y constante por los medios de comunicación y los ámbitos que nos rodean?
excelente post... compartido
me gustó mogollón
saludos

Anónimo dijo...

La atracción por la belleza va con el kit del ser humano. La publicidad se sirve de esa atracción para ponernos como modelos unos iconos que de humanos no tienen más que la apariencia.
Ya no es suficiente ponerse una ropa de una marca o de otra para vestir la percha, para sentirte integrado en el grupo o para diferenciarte, ahora lo que rompe es el culto al cuerpo: parecer joven a toda costa. Aquí está el nuevo filón del sistema consumista este en el que nos movemos. pancho

Teresa dijo...

Jellous Peter
¿nunca has deseado un deportivo?
¿o este deseo no entra en el mismo hemisferio cerebral?

Pedro Ojeda Escudero dijo...

EUPHORBIA: humo... y caro.

MERCHE: inalcanzables e inexistentes, querida Merche.

ROSA C.: envejecer con sabiduría es lo mejor que podemos hacer, en efecto.

ELENA: gracias. Saludos.

SOL SOLITO: y, además, hay que tomarse la molestia de conocer a la gente... y a eso no están dispuestos la mayoría. Besos.

DIANNA: pero lo malo es que esas realidades siguen estando ahí. Besos.

NOVENTERA: todo falso, todo falso.

PILAR: y tan compañeras que nos anulan.

CAELIO: ya sabes, el sol es malo para la piel, querido celtíbero.

DESPLAZADOS: Es la mejor forma de estar satisfecho consigo mismo. Adelante.

JAVIER: y que nos arrastre en su giro.

XUANRATA: no te lías. Lo que pasa es que ese darse suele ser tan superficial y egoísta que ni siquiera nos llena.

DEME: la perspectiva, la perspectiva.

MANZACOSAS: pues gracias. Un saludo.

NACHO: saludos.

SAO: fomentarlo, en efecto, para el consumo. Besos.

FABIO: difícil, muy difícil. Saludos.

PANCHO: parecer joven y deseable según unas normas que nos rasan como si fuéramos productos de fábrica.

BIPOLAR: no. Nunca he deseado un deportivo. No conduzco. Soy así de raro.

Un abrazo a todos y gracias por vuestros comentarios.

Teresa dijo...

JAJAJAJAJAJA Pedro. Ten points
(Caelio el más sincero... eh?)

Unknown dijo...

Somos espejos que reflejan lo que idolatramos, mirándonos en ellos como tantas veces insistes,vemos claramente lo que queremos o pretendemos ser, soy reflejo de... y no me gusta, claro que no, tengo que poner mis miras en el único ser del que merece la pena ser reflejo.

matrioska_verde dijo...

la publicidad engañosa ha hecho y hace mucho daño a la sociedad... yo me incluyo también, a veces, no lo niego... y deseo lo que nunca podré ser o tener.

bicos,
Aldabra

Pedro Ojeda Escudero dijo...

BIPOLAR: en efecto, este celtíbero va de frente siempre.

MAFALDIA: en efecto. El reflejo nos devuelve con claridad aquello que nos callamos a nosotros mismos.

ALDABRA: nos llevan por donde quieren (¿o queremos?). Besos.

JESUS y ENCARNA dijo...

Buenas tardes Pedro, pienso que es justo que en este mundo que nos toca vivir, disfrutemos con adarajas y guapuras, cuando no,con exageraciones.Sobre todo las feminas, por naturaleza, quiero decir.De todas, todas es lo que nos vamos a llevar. Tambien seria, a mi parecer, justo que, todos equilibrasemos,( o al menos lo
intentaramos); esta sociedad de consumo e irrealidades, con lo que la madre naturaleza nos dice a cada gesto en cada aviso.
En resumen, NATURALIDAD, pediria yo, incluso para mi mismo.
Un placer, leer tus escritos.

Saludos. Jesus

Pedro Ojeda Escudero dijo...

JESÚS: naturalidad, en efecto. Buen comentario. Un placer verte por aquí. Saludos.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Desear desear y desear es lo que prima hoy día, en lugar de aceptar lo que tenemos y lo que somos. nos dejamos arrastrar por "ese oscuro deseo" sin ser conscientes que no tiene solución. Saludos
Sigo....

Pedro Ojeda Escudero dijo...

MANUEL: en esto, no hay diferencias de épocas, querido Manuel. Sí es cierto que, en otras épocas (y culturas) existen ideologías que amenguan el deseo (o la frustración). Saludos.